𝐏𝐀𝐃𝐑𝐀𝐒𝐓𝐑𝐎 | Kth '+18

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10 días después...

— ¿Vacaciones?

— Algo así, por lo menos para ustedes.

— ¿Nosotros?

— Sí, la música es algo que no descansa así que debo viajar y puedo llevarlos a todos.

— Oh... Ya veo p-pero... No puedo, Tata, estaré ocupada estos días con el curso.

— No he dicho la fecha.

La mujer se puso nerviosa.

— Pues como lo dices ahora creí que era para esta semana —agachó su vista a la comida.

Taehyung no quería discutir a estas horas de la mañana, así que solo asintió y sacó su mejor sonrisa falsa.

— Sí, es para este fin de semana. Puedo ir con los chicos el viernes saliendo de la universidad y regresar el lunes antes de amanecer —mencionó—. Al menos de que todo se alargue, serían 15 días.

— Descartame de ahí, Kim —declaró sin parar de comer—. Tengo entrenamiento con mis amigos, no quiero faltar.

— ¿No quieres faltar por ellos o por tu novia? —habló la menor.

Éste le dio una mirada asesina.

— Por ambos. Yo también tengo derecho a follar en esta casa —alzó su vista—, bueno, por tu parte ya no.

— Samuel, ella no tuvo consentimiento —afirmó con indignación por la actitud de su hijo hacia su hermana, cosa que no pasaba.

— ¿En serio? —soltó una carcajada llena de sarcasmo— Antes de eso, obviamente no. Deja de creer que T/N te necesita, mamá. La mayoría del tiempo te la pasabas culpándola de todo, no entiendo tu postura ahora: "Madre del año" —se levantó y la señaló— Cuando no detallaste sus marcas, a lo único que prestaste atención fue a su maldita figura: "Estás delgada, estás aquello, estás esto" ¡Por Dios, mamá! ¿Te importó más su figura que su salud mental?

— ¡¿Y QUÉ VAS A HABLAR TÚ, SAMUEL?! —también se levantó impotente— ¿Crees que no noto como la llevas tratando? ¡Tú también has sido indiferente con ella! No solo con T/N, con Taehyung eres igual ¿Por qué estás así tan de la nada? ¡¿No te sientes cómodo que esté con otro hombre y no con tu padre biológico?!

El final de esas palabras, fue la gota que derramó el vaso para Kim Taehyung, haciendo que golpeara la mesa con ambas manos.

— ¡BASTA! —gritó exhausto y éstos se sorprendieron.

— ¿Con mi padre...?

— Estamos en la mesa —interrumpió—, son las siete de la mañana y no son horas para estar discutiendo ¡No permitiré que hablen de esto con T/N presente! —se levantó y le hizo un ademán a la chica para que se fuera con él— Nos adelantaremos a la universidad, ustedes verán como se irán.

No perdió el tiempo; agarró llaves, chalecos y subieron al auto. Tae estaba tan enfadado que cerró con fuerza la puerta provocando que la menor soltara un chillido.

— Oh, disculpa, nena. Pero es que... No me gustan los gritos —peinó su cabello hacia atrás y se tiró en el respaldar del asiento.

— D-Descuida.

— ¿Estás bien?

— Sí.

Que mentira tan usada.

— Nena, sé que estás mal. ¿Por qué no me dejas ayudarte? —posó su mano en la mejilla y ésta cerró sus ojos por instinto.

— Ya me ayudaste demasiado.