Capítulo 47:acto de buena fe.
[En el capitulo anterior]
Mi vida era bastante tranquila y no tenía muchos problemas al menos hasta que me acerque a una ladera donde pude ver un carruaje por lo que mire este había sido atacado por monstruos, ellos eran bastante violentos en estas zonas por lo que mire ya que pensé que podría encontrar algo de comida, que una manzana era suficiente para alimentarme por varios días y que también solo necesitaba la luz del sol.
Maria:*Mirando una cesta*Veamos que haré contigo.
*RUIDO*
Maria:¿Um?.
Arter:*Dirigiendose de un salto a María con sus garras asomadas por el yukata*Te encontré.
[Continúa]
La noche reinaba con las dos lunas decorando un pequeño pueblo semi escondió entre las faldas de una montaña contrarrestando la fría luz de las lunas un fuerte color naranja las llamas cubrian el pueblo donde dos pequeños niños de 8 y 11 corrían por los pasillos de una casa atrás de un hombre sosteniendo una espada hasta llegar a un lugar vacío de la gran casa donde ayudó a los dos niños a subir antes de mirar hacia atrás mirando a su perseguidor mirándolo fijamente.
Hombre:AAAAAAAHHHH
Niños:*abrazados mirando con miedo la compuerta*
Niña:p-papa?
Arter:*Salta al interior de al habitación con la cabeza de hombre en su mano*tienen un minuto para correr mientras se arrepienten de no Aver cerrado la entrada.
Ya había pasado más de dos semanas desde que regrese a mi mundo original dejando de lado con lo que pasó con la familia Kodachi donde empezó a viajar en busca de las otras piezas, era lo que tenía que hacer desde un principio y ya que tenía suficiente poder era el momento de matar a los otros antes de que se siguieran haciendo más fuertes donde quieran que estén aunque no estaba avanzando como me hubiera gustado ya que al principio solo sentía una especie de tiro, como si tuviera el hilo de una telaraña entre mis dedos, demasiado frágil para romperla pero lo suficientemente clara para saber de dónde venía y lo que encontré no fueron más que susurros, susurros de un cadáver...susurros de dolor, ira y deseos de venganza, diría que me sorprendio pero, no había abandonado el Furia 3 desde que regrese y algo como la sorpresa era algo que no podía sentir, simplemente mire el cadáver por unos segundos mientras mi habilidad de pieza hizo lo suyo antes de solo levantarme y en tres días había atrapado a los tipos que la asesinaron vengandome tal y como esa mujer quería, matandolos tal y como ella quería solo para después dejar los cuerpos de esos hombres nuevamente seguí otro hilo de araña, más susurros, mate de la forma que los susurros vengativos querían y seguí a él próximo hilo.
Así continue vagando por un tiempo hasta que llegue a un pueblo, estaba lleno de susurros y a diferencia de los últimos en este los susurros querían que los matara a todos de manera diferente, hombres, mujeres, niños y niñas por igual, quemandolos, electrocutandolos, ahogandolos, aplastandolos, desmembración era lo más solicitado por los susurros y como tal fue pedido y fue hecho, solo tuve que ir primero por los más fuertes, fue un poco curioso ya que los susurros no querían que los matara así que simplemente los dormí y cerré el pueblo, nadie sale, nadie entra, así que con los que parecían los guerros y cazadores, fue una muerte lenta y bastante personal, bueno todos los que había matado hasta ahora se podría decir que todas fueron personales, por lo que sólo diré que aquí ellos fueron cazadoz y heridos poco a poco, solo a dos los deje con vida, hijo y padre por lo que entendí, a ellos los dejé encerrados con la mentira que volvería dentro de un mes, solo tenían que sobrevivir sin agua ni comida, el resultado era bastante obvio, pero no importa, dudo mucho que tuvieran mucho asco de comer carne humana, después de todo por ello llegue aquí.
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El lobo de la ira Y La Venganza{abandonada Hasta Nuevo Aviso}
FanfictionChuy,un Ex estudiante de secundaria muere asesinado por uno de sus compañeros de clase,este jurando con su último aliento tomar venganza contra sus asesinos logra llamar la atención de un antiguo Dios que le da una oportunidad de vivir una nueva vid...