Capítulo 19

29 10 1
                                    

Me esforcé por cerrar la puerta con la mayor delicadeza que me fue posible. No deseaba provocar ruidos innecesarios. No deseaba que nadie me descubriera, pero todo se echó a perder cuando, al dame la media vuelta, me encontré cara a cara con mi compañero.

—Lo sabía —dijo James, cruzandose de brazos.

Cerré los ojos y apreté los dientes.

No, yo lo sabía: se hizo de la visita gorda allá a dentro. Él era demasiado listo como para no verme.

—Deja que te expli... —intenté excusarme, pero él me tomó del brazo y me llevó a jalones por el pasillo.

—James, amigo. Oye...

—Silencio.

Me llevó hasta el estacionamiento y ahí me puso el regaño más duro que yo hubiese oído salir de su boca en lo que llevaba de conocerlo.

—No fue para tanto —dije en cuanto tuve oportunidad de hablar.

—¡Cállate! —rugió, paseándose de aquí para allá con los dedos entre el cabello—. Mira, Carter... Tú sabes mejor que nadie lo mucho que te he apoyado, pero yo también he trabajado duro para estar aquí. Me esfuerzo por demostrar mi valía, para que no crean que estoy aquí solo por las conexiones de mi familia.

—Lo sé —musitié.

—Si lo sabes no me hagas escoger entre tú y el trabajo que amo.

—¿Cuándo te he pedido que elijas? —repliqué, confundido.

—Me obligas a escoger cada vez que actúas con descuido, te pones en riesgo, aflojas el ritmo u te obsesionas. Es ahí cuando yo debo elegir entre cubrirte o delatarte.

Aparté la vista. Sentía vergüenza de ponerlo en un aprieto moral de esa clase. A diferencia de mí, él siempre había soñado con pertenecer a la policía. Me sentía mal de que mis acciones pudieran orillarlo al desastre.

—Fue egoísta de mi parte, lo siento —murmuré.

—No te disculpes únicamente conmigo, Carter. ¿Qué no lo ves? Seguirás cometiendo los mismos errores si no dejas de ser egoísta contigo mismo. —Me pasó las  manos por detrás la nunca.

Yo no podría haber estado más confundido.

¿Conmigo?

James de seguro notó que no lo estaba entendiendo porqué dijo:

La Analogía De Carter©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora