«Antes que te vayas» [NamKook]

XLIV

—Me duele mucho que te hayas ido —habló Namjoon afligido viendo la tumba de su madre—. Me duele mucho que me hayas dejado aquí, a pesar que te pedí que te quedaras. Te pedí que lucharas, aún había posibilidades, el doctor lo dijo..., y no quisiste. Me duele mucho estar aquí y sentirme tan solo. Tan vacío. Me duele mucho que Jungkook se haya así tambíen, mamá. ¿Por qué tuvo que ser de esta manera? —sollozó—. Realmente me duele mucho. ¿Qué tengo que hacer para que vuelvas? ¿Para tenerlos a ambos de regreso? ¿Con quién tengo que ir para traerlos de regreso? ¡Vendería mi alma por verlos nuevamente! ¡Mamá, me dejaste! —gritó dando un puñetazo al aire—. ¡Me dejaste, maldita sea! ¡Regresa! —gritó con furia—. ¡Regresa! ¡Regresa! ¡Regresa! ¡Te quiero de vuelta! ¡Te odio, te odio, te odio, te odio! ¡Siempre fuiste egoísta! ¡Siempre pensaste solamente en ti! —En este punto Namjoon había caído de rodillas frente a la tumba de su madre. El silencio lo aturdió por unos segundos. Escucharse a sí mismo sollozar era demasiado. Los hipidos salían sin permiso desde su pecho—. Me dejaste aquí, ¿qué hago? Mamá, mami... Yo... —lloró más fuerte—. ¡Te amo! —Su mano derecha tocó el lugar en su pecho donde yacía su corazón—. Mamá, te amo. Perdóname... Necesito... Quiero salir de aquí, quiero pensar otras cosas. Mamá, no me quiero morir. Mamá, ayúdame —dijo casi sin aliento—. Por favor —susurró.