15

272 23 7
                                    

—Hey Woonie, podrías ayu... ¡Oh por Dios! ¿Qué mierda te hiciste?

—¿Qué, esto? —llevó sus dedos índice a sus orejas, señalando las múltiples perforaciones que ahora portaba —¿Qué tiene?

—Sólo, ¡wow! Es decir, hace unos meses dijiste que mis perforaciones eran horribles y ahora... Incluso son iguales a las mías —habló con el ceño fruncido, mirando con detenimiento cada pendiente que colgaba —Eres raro

—No soy raro, sería genial si a Joshua le gustaran ¿verdad, hermanito?

"¿Sabes, Jeonghan-ssi? Amor, tus orejas son lindas, y estos pendientes las adornan de una manera hermosa"

El azabache se quedó congelado por esas últimas palabras pronunciadas por el pelimenta, pues aquella noche dónde fue uno solo con Joshua, éste había dicho lo mucho que le gustaba como se miraban ese tipo de adornos en él.

Había tenido cierto alivio al aceptar la declaración del rubio pero ahora que su hermano lo mencionaba, la culpa regresaba como normalmente la sentía.

No tenía ni la menor idea de como lidiar con la situación ahora que se encontraba en una relación.

Por otra parte, igual se encontraba emocionado, Joshua le gustaba tanto que quería compartir su felicidad con todos y más aún con Wonwoo, pues él era la persona más importante en su vida, pero ¿cómo hacerlo? Estaba bastante claro que tarde o temprano iba a enterarse, aunque aún no sabía cómo decírselo.

—Jeonghan, ¿estás escuchándome?

—Yo, lo siento... no...

—Voy a salir con Mingyu, entonces no quería que te sintieras solo y llamé a Joshua para que viniera a hacerte compañía ¿está bien?

—¿Y mamá?

—Salió con la señora Hong, así que, aprovechen su tarde —dijo sonriente con evidente sarcasmo.

—Aunque... estaría agradecido si lo intentas acercar más a mi, dile cosas lindas ¿sí? Te veo más tarde Hannie.

Jeonghan sintió su garganta ser estrujada y su corazón acelerarse, ¿qué había sido aquello?

Por un instante sintió miedo, temía pensar que Wonwoo ya estuviese enterado de su noviazgo, pero es que simplemente no podía ser posible, había salido de casa sin hacer el más mínimo ruido. El azabache estaba seguro de ver a su hermano dormido antes de salir en busca de Joshua y había regresado a casa aún antes de que amaneciera.

Por un momento pensó en cancelarle la visita al castaño pero pudo darse cuenta que eso sólo levantaría más sospechas, incluso si aún existían miles de excusas para esto.

El timbre de su casa no tardó en sonar y bajó para abrir la puerta.

Se sorprendió un poco al ver a Joshua parado con una sonrisa, pues su hermano jamás le dijo que llegaría tan pronto.

—Eres rápido

—No lo soy hyung, Wonwoo fue a casa a avisarme que estabas solo —se encogió de hombros poniéndose serio —¿Él... sabe algo?

—Eso no puede ser posible Shua, yo no estaría vivo ahora mismo —rió tomando al menor de la mano llevándolo a su habitación.

—Entonces, creo que podemos divertirnos un buen rato, ¿no es así?

—¿Y si vuelve?

—No lo hará

Dijo antes de empujar a Jeonghan  sobre el colchón y comenzar a besarlo desesperado.

El azabache no podía negar que a pesar de escuchar a su novio decir con toda seguridad que su hermano no regresaría, sentía su cuerpo temblar por el temor a ser descubiertos, y es que, era tan diferente hablar con el pelimenta y comentarle todo lo que sucedía, a que se enterara de la relación por medio de actos no muy decentes.

Aun así, de un momento a otro los labios de Joshua ya se encontraba sobre su cuello, lamiendo y succionando, provocándole placenteras sensaciones que no podía detener y claramente, no quería hacerlo. Realmente el rubio parecía tener total control sobre Jeonghan y claramente no le molestaba. Sin duda eran el uno para el otro y esto, iban a disfrutarlo al máximo hasta que toda la situación estallara, porque cuando eso sucediera, probablemente nada volvería a ser igual.

⛅⛅⛅

—¿Wonwoo hyung? —gritó el peliplateado observando su celular y luego a Wonwoo repetidas veces

—¿Hmn?

—Hola, mucho gusto, soy Lee Chan—dijo tomando asiento frente al mayor, dejando caer sus manos en la mesa de aquella cafetería.

—¿Tienes algo que decirme? Estoy esperando a alguien.

—Bien, la verdad es que Yoongi hyung no vendrá.

—¿Qué? ¿Estás jugando, no? ¿Te mandó el? Por que si es así juro que voy a matarlo.

—Escucha, él jamás te citó, fui yo.

—¿Cómo? Pero yo recibí un mensaje de su celular y...

—Touché.

—Sé claro, ¿qué es lo que quieres?.

—¿Sabes que Mingyu está enamorado de ti, cierto? —el pelimenta asintió —¡Deja de ser un idiota!

Dios, ¿acaso no te das cuenta que no le gustas a tu vecino y jamás le gustarás? Hyung es una gran persona y estás dejándolo pasar.

—¿Y a mi qué mierda me importa? —habló exasperado —Se lo dije antes y voy a decírtelo a ti también... No puedo darle lo que necesita y me vale un carajo si no le gusto a Joshua, no voy a rendirme fácil ¿oíste?

—Eres tan... En verdad no sé cómo Mingyu pudo fijarse en ti, eres un asco de persona con él.

—¿Crees? ¡Por dios! ¿Qué motivos le he dado yo para que siga ilusionándose de esa forma? Sólo debería dejarme en paz.

—¿Y qué motivos te ha dado Joshua para que sigas luchando por él?

El pelimenta se quedó callado pues ¿qué iba a decirle exactamente? Estaba actuando de la misma manera con su vecino que cómo Mingyu lo hacía con él. No tenía nada de diferente y sin más se levantó de la mesa y se dirigió a la salida. Escuchó a lo lejos la voz de Chan llamarlo insistente pero hizo caso omiso hasta que sintió una mano aferrarse a su camiseta.

—¡Déjame tranquilo!

—Bien, ya que confirmé tus pensamientos, entonces tengo el camino libre ¿no?

—Ah tú... ¡Ni se te ocurra acercarte a Gyu, imbécil!

—¿Por qué no? Dijiste que lo querías fuera, pues voy a darle algo en lo que pueda poner toda su atención.

—Eso no significa que puedas ir y conquistarlo, sólo te conocí 20 minutos y no eres la persona que el quisiera en su vida.

—¿Y tú sí?

—¡Te quiero lejos Lee!

Dijo antes de soltarse y regresar a casa. Respiro hondo y frotó sus ojos ante la picazón que sentía, aunque no sabía con exactitud el porque de sus lágrimas. No iba a mentir diciendo que no le dolió cuando aquel sujeto soltó diciéndole que Joshua no estaba interesado, claro que le habían dolido y más aún por las razones que mantenía escondidas. Pero por otra parte pensaba en el pelirojo, y es que de cierta manera le tenía un cariño especial a pesar de todo. Recordó aquel instante en que pensó atreverse a besar aquellos labios que se miraban tan dulces y apetecibles.

Estaba confundido, no tenía en claro si solo se trataba de una amistad o algo más, y aunque fuese así, seguía colocando al rubio en el primer sitio. Según él, lo que le hacía sentir Joshua distaba mucho de lo que le provocaba Mingyu, y aún así, no evitó sentir celos a sabiendas que Chan podía lograr su objetivo, pues era un sujeto demasiado atractivo y tal vez pudo parecerle alguien irritante, pero para el pelirojo podía ser totalmente diferente.


DAMN CUPID! [Yoonhong]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora