12

283 26 2
                                    


No sabía cuántos minutos llevaba mirando el césped mientras enterraba su cuchara una y otra vez en aquel helado de chocolate inconscientemente.

A su lado, Mingyu lo miraba consternado. Si bien el que había decidido que sería buena idea salir a caminar había sido Wonwoo, daba por hecho que sólo era una distracción.

El pelimenta se encontraba de cierta forma decaído y podía notarlo incluso a distancia.

Tenía muchas ganas de preguntar pero tampoco quería parecer entrometido. Si Wonwoo le tenía la confianza suficiente, lo esperaría a que éste decidiera hablar por sí sólo.

—Wonnie, tu helado va a derretirse —habló rompiendo el silencio, captando la atención del menor al instante

—¡Oh! Sí sí, lo siento... Sólo no me siento muy bien ¿sabes?

—¿Quieres que te lleve al médico?

—No. Es decir, no es algo físico... Mingyu, no debería estar hablando de esto contigo pero se que debes estar preguntándotelo

—No te preocupes ¿sí? De cualquier forma tú lo dijiste, no somos nada y... Bueno, aquí tienes un amigo en quien apoyarte, lo sabes —rodeó su hombro con su brazo, acercándolo un poco más hacia sí.

—Me gusta alguien...

No necesitaba ser un genio para saber de quien hablaba. Joshua era su mejor amigo y por obviedad le había contado de la atracción que sentía Wonwoo hacia él. Y aún así, decidió arriesgarse e intentar conquistar a aquel chico.

Amaba ser honesto y aún más con la persona que ahora yacía con la cabeza en su regazo mientras miraba el cielo, y se preguntaba porque estaba siendo tan cobarde ahora. Su subconsciente le pedía que dijera con tranquilidad que aquello lo ponía celoso porque estaba enamorado, más simplemente sólo susurró un "la esperanza es lo último que muere, Wonnie... Joshua es un gran chico"

Y tenerlo de aquella forma ahora, lo estaba torturando. Podía ver a la perfección esos ojos avellanas brillando por el sol y sus labios tan deseables ligeramente humedecidos. Tenía tantas ganas de besarlo y decirle con aquel acto lo mucho que había imaginado y esperado ese instante.

—Wonwoo... Puedo... ¿Puedo besarte?

—¿Qué? ¡NO! —sus ojos se ampliaron y se levantó rápidamente, vió los ojos de Mingyu agolparse ante la inmediata respuesta y quiso abofetearse —Quiero decir que... No, Gyu, no llores, no por favor...

Se sentía por completo un idiota, al verlo con el corazón roto y con las lágrimas resbalando por su rostro, se había percatado que en serio lo juzgó mal.

El pelimenta era una persona con una personalidad encantadora y que cuando sus sentimientos salían a flote, todo su tornaba distinto.

Jaló al chico, rodeándolo con sus brazos, provocando el notable aumento de su llanto y dejando que se desahogara en su pecho. Cuando Mingyu alzó la mirada, Wonwoo mordió su labio intentando contenerse, los ojos del pelirojo ahora estaban rojos e hinchados cómo si hubiese sufrido toda una noche.

—Yo... Si te beso ahora, ¿dejarías de llorar? —dijo recordando las palabras de Joshua.

—No soy un objeto para que me trates así Wonwoo, no voy a obligarte a hacerlo solo porque me has visto llorar, perdón... —susurró separándose del pelimenta caminando de vuelta a casa.

Aquellas palabras hicieron eco en su cabeza. Es que ¿Joshua lo trataba como un objeto entonces?

Creía que podía arreglar la situación mencionando lo anterior, pero sólo logró empeorarlo.

—Eres un completo idiota Yoon...

⛅⛅⛅

Subió las escaleras hacia aquel cuarto trastabillando, ignorando el gesto de confusión en el rostro de Somin.

Decir que no le dolió en absoluto escuchar aquello, era un total engaño.

Joshua me besó.

Nos besamos, Hannie.

Tal vez y había sido algo inventado por su hermano, pero la forma en que lo dijo, mencionando cada detalle y su emoción al recordarlo, le hizo sentir náuseas y escalofríos.

Por eso es que ahora estaba en busca del castaño para exigir una explicación.

Si bien, no formalizaban aún una relación, se sentía dolido y traicionado.

Entró a la habitación sin tocar, encontrando al menor recostado en su cama mientras escuchaba música. Éste se levantó de inmediato al fijarse en la presencia del azabache recargado en el marco de la puerta.

Corrió a abrazarlo pero obtuvo un rechazo por respuesta.

—Hyung... ¿Qué ocurre?

—¿Que qué ocurre? ¡Dímelo tú Joshua! —alzó la voz entrando y cerrando la puerta detrás suyo, provocando el retroceder del menor —¿Hay algo que deba saber que me estás ocultando?

—¡Claro que no Jeonghan! Nos tenemos demasiada confianza, yo no podría hacer algo así...

—¿NO? Dios... ¿Acaso tengo que recordártelo? —sonrió irónico agitando su mano en el aire.

—Que te parece... ¿Mi hermano besa bien? —su pecho se estrujó al ver la cara de Joshua siendo descubierto —¿Por qué...? Mierda Hong Joshua, explícame por qué carajos lo hiciste...

—¿Cómo que por qué lo hice? Jeonghan, tu hermano iba a llorar, estaba destrozado por la cancelación de la cita que TÚ nos arreglaste —soltó furioso clavando su dedo índice en el pecho de Jeonghan —Esto es tu jodida culpa

—¿Y era necesario aquello? ¡Wonwoo llora por todo! Maldita sea, por eso te dije que aceptaras, eso hubiese sido menos peor...

—Tú no entiendes ¿verdad? Tú no sabes lo que se siente ir por la vida ilusionando a alguien que no quieres

—Pues de todos modos lo empeoraste, eres un imbécil Joshua.

—Ni siquiera sé porque te importa, ¡Tú y yo no somos absolutamente nada! —gritó exasperado.

Se arrepintió de lo dicho en el momento en que Jeonghan se dejó caer de rodillas al suelo, cubriendo su rostro con sus manos cuando comenzó a sollozar. Tiró de su cabello con fuerza y se arrodilló frente al pelinegro, apegándolo a su cuerpo y recorriendo su espalda de arriba a abajo con sutileza.

—Han... Yo no... yo no quise...

—C-créeme que quiero —habló con dificultad sin parar de llorar —quiero estar contigo Joshua, pero tú... tú tampoco entiendes... Dijiste, dijiste que ibas a esperarme... ¿Qué hice mal ahora?

—Y voy a esperarte siempre ¿escuchaste? Sólo... me sentí terrible por dejar a Wonwoo hyung de esa manera, quería remediarlo Jeonghan, no así, pero lo hice sin pensar antes y dios... En serio que me arrepiento —Alzó el rostro del mayor, musitando aquello cerca de su boca —Te he dicho que me importas y aunque ahora dudes de mi siempre estarás acá —tomó una de las manos del pelinegro, llevándola a su pecho del lado izquierdo —Y siempre voy a estar para cuando me necesites y para cuando estés decidido a aceptarme ¿de acuerdo? Sabes que te amo hyung.

Jeonghan cerró la distancia tomando los labios de Joshua entre los suyos, tirando con suavidad del inferior y succionando a medida que avanzaban. Una última lágrima resbaló por la mejilla del menor antes de separarse, no sabía en que momento todo había regresado a ser perfecto e irreal. A través de aquel beso pudo sentirse en las nubes pero entendía que al volver a casa, esa familiar sensación de vacío, regresaría para atormentarlo. Joshua ahora era su total felicidad y en cierta parte eso lo asustaba, su hermano ahora se encontraba más ilusionado y eso no estaba bien, terminaría terriblemente lastimado.

Terminaría en el fondo de la total depresión.

----

A mimir

DAMN CUPID! [Yoonhong]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora