Hijo de la Luna || Taekook (Finalizada)

Capítulo 41

Se apoyó en el marco de la puerta mientras cruzaba sus brazos sobre su pecho observando con atención al pelinegro que se encontraba ayudando a su madre con la preparación de alguna comida pedida por la reina.

Jungkook no se percataba de la presencia de Taehyung en la cocina por lo que el mayor aprovechó para detallar cada una de las facciones del menor, aprovechó aquellos momentos para deleitarse con la risa de Jungkook mientras su madre le explicaba como realizar las cosas. Le parecía adorable observar su sonrisa y la manera en la que las estrellas habían sido colocadas en sus ojos.

—Su majestad —le saludó una de las ayudantes de cocina mientras hacia una reverencia ante él llamando la atención de Jungkook y su madre.

—Puedes llamarme Taehyung —la miró y le regaló una sonrisa provocando un leve sonrojo en la chica.

—¿Necesitas algo, cariño? —habló la madre de Jungkook.

Jeon Sang no veía Taehyung como el príncipe o como a alguien que tuviese que servir, lo había conocido como el chico que había ayudado a su hijo a dejar una parte de su vida atrás y le estaba agradecida con aquello, para ella Taehyung era más que el príncipe de Ártica.

—No, señora —negó sonriendo—. Estaba dando un recorrido por el castillo, aún no me acostumbro a andar por estos lugares y quise asegurarme que todo estuviese yendo bien por aquí —respondió ingresando completamente a la cocina—. ¿Cómo ha estado?

—He estado mejor, niño —sonrió—. Me alegra ver que estás tomando las cosas con calma

Él también quería creer que había estado tomando las cosas con calma, él también quería creer que toda estaba yendo por el camino correcto y ya nada iba a afectarlos más.

Yoongi y Jimin lo habían dejado frente al castillo luego del incidente con Haneul y habían acordado mirarse dentro de un rato en la biblioteca, necesitaban hablar con Namjoon.

—Trato de tomarlo de la mejor manera, señora —le sonrió—. ¿Puedo llevarme a su hijo? —cuestionó mirando al pelinegro.

—Trata de no regresarlo nunca —bromeó.

—Con gusto —respondió guiñándole el ojo al menor provocando que la señora Jeon riera.

—Nos vemos en casa, mamá —mencionó Jungkook secándose sus manos para luego depositar un beso en la mejilla de su madre.

—Recuerda que debes cuidar a tu hermano esta noche —le sonrió.

—Ahí me tendrás

Jungkook se despidió de las demás personas que se encontraban en la cocina y salió de esta siendo seguido por Taehyung quien no tardó en tomarlo de la cintura para atraerlo hacia él y depositar un beso en su mejilla.

—¿Eso a que se debe? —cuestionó riendo.

—No te he visto en todo el día —respondió haciendo un leve puchero.

—Disculpe, soy un hombre ocupado —respondió—. No tengo el privilegio de otros —mencionó con tono de burla.

—Pronto tendrás esos privilegios y tu mamá tendrá que dejar trabajar en esa cocina —dijo cerca de su oído.

—Taehyung —respondió separándose.

—Debemos ir a la biblioteca —mencionó con una sonrisa—. Allí nos esperan los demás —tomó la mano del menor y lo jaló para comenzar a caminar hacia la biblioteca.