Hijo de la Luna || Taekook (Finalizada)

Capítulo 43

Observó con atención sus manos y una nueva arcada se hizo presente, volvió a vomitar sintiendo como su estómago se revolvía una vez más. Se comenzaba a sentir débil, las piernas le comenzaban a temblar y con costos lograba sostenerse de las paredes.

El silencio en su casa se hacía presente, su padre se había encargado de bajar el cuerpo del padre de Namjoon mientras él había salido corriendo hacia su casa evitando encontrarse con sus amigos o Haneul.

Con esfuerzo se sentó en el suelo pasando las manos por su cabello sintiendo el sudor recorrer por su frente. En que momento se había convertido en aquello, la muerte del padre de Namjoon sería una de las miles con las que tenía que cargar y quizás se convertiría en una de las que más trauma le causaría.

La puerta de su casa fue abierta y los pasos de alguien se hicieron presente en el lugar y contuvo la respiración tratando de apartar el nudo que se había formado en su garganta, si su padre había llegado a casa no lo podía encontrar siendo débil cuando él mismo le había prometido ser fuerte y demostrar que era capaz de estar al frente en la Guardia Real.

—Hoseok —escuchó la voz de Yoongi resonar por toda la casa.

No respondió y mordió su labio con fuerza, no quería hablar con nadie, quería desaparecer.

—Hobi —volvió a llamar.

—En el baño —murmuró.

La puerta del baño fue abierta, Hoseok lo miró desde el lugar en el que se encontraba y a Yoongi le dolió ver la imagen de su amigo en el suelo.

—¿Estás bien? —preguntó preocupado sentándose junto a su amigo.

—No —negó—. Soy una mierda, hyung —Yoongi escuchó como la voz de su amigo se quebraba—. Soy un asco de persona

—Solo hiciste tu trabajo —lo miró—. Era algo que cualquiera hubiese hecho si tu papá lo hubiese solicitado

—Pude negarme —murmuró—. Pero quise demostrarle a mi papá lo fuerte que era, quise demostrar que de verdad vale la pena que me tenga al frente en la Guardia

—Hobi, no todos somos tan fuertes como pretendemos serlo —lo miró—. A veces está bien ser débil porque de ahí es donde tomas las fuerzas necesarias para continuar

—Arruiné la vida de Namjoon —mencionó mirando un punto fijo en la pared.

—No lo hiciste, Hobi —pasó su brazo por el hombro del chico para atraerlo hacia él y poder abrazarlo—. No tienes porque cargar con la culpa de algo que ni siquiera te corresponde

—Yo maté al señor Kim —sollozó.

Hoseok se aferró a Yoongi con fuerza buscando tener algo de refugio, aunque en el fondo sabía que su amigo se encontraba peor que él. Yoongi no estaba bien y todos lo sabían, pero él pretendía encontrarse en perfectas condiciones para no generar ninguna inquietud en sus amigos. Yoongi tensó su cuerpo al sentir como Hoseok se aferraba a él, aún trabaja en aquello, aun no soportaba sentir el toque de otras personas.

—Estoy jodido, hyung —murmuró.

—De alguna forma todos estamos jodidos —susurró—. Nadie se va de esta vida sin estar jodido

Hoseok sollozo, Yoongi solo pudo sostenerlo con fuerza, aunque en aquel justo momento quisiera gritarle que se apartara de él, Hobi no tenía la culpa de sus traumas.