Estaba demasiado nerviosa, el cuerpo me temblaba y las manos me sudaban. Lo había pensado varias noches, la inseguridad había sido parte del proceso pero finalmente tomé la decisión de terminar con Ethan, y no solo hablo de nuestro noviazgo. No, hablo también del compromiso, mis padres me matarían, los padres de Ethan también, pero preferiría morir a tener que vivir atada toda una vida a una persona que no puedo corresponder.Más vale arriesgarse y perder que no intentarlo.
Quise citar a Ethan en la cafetería para hablar con él, pero insistió en que lo mejor era hablar las cosas en mi casa, con calma. Al parecer no tenia ni la menor idea de para que lo cité, por esos mis nervios eran tan grandes. No quería que él saliera lastimado, lo quería mucho a pesar de todo, fue muy buen chico en su momento, pero cuando Sam llegó a nuestras vidas Ethan se convirtió en un ser desconocido, en un ser celoso y grosero.
—Señorita Hebe, el joven Ethan la esta esperando en el salón.
Cerré los ojos y respire profundo, el viento pegó directamente en mi rostro y yo volví a mirar a la empleada de mi padre.
—Amanda dile por favor que estoy aquí en la terraza.
Ella asintió y poco a poco desapareció de lugar. Me acerque hasta el borde de la terraza y mire el paisaje tratando de calmarme, cosa que no logre. Mierda estaba realmente tensa y no entendía el porque. Escuche los pasos de Ethan detrás de mi. Una corriente eléctrica recorrió todo mi cuerpo, pero no de una buena forma, no como cuando la sentía con Sam.
—Mi amor. —Me abrazó por la espalda y recostó su mandíbula en mi hombro, mis músculos se tensaron al sentir su tacto.
—H-hola Ethan.
Me separé de su agarre y me gire hacia él para poder encararlo, tenia una amplia sonrisa y me miro con mucha calidez. Terminarle seria mas difícil de lo que pensé, principalmente porque no estábamos enojados.
—¿Por qué siempre me recibes tan seca? ¿Qué no te alegra ver a tu prometido? —Se acercó a mi rostro con la intención de besarme pero me aleje de inmediato.
—¿Estas bien? Te noto algo tensa.
Negué y le sonreí con amargura.
—No te preocupes, estoy mejor que nunca.
Si claro.
—Excelente. También estoy de buen animo hoy, deberíamos celebrarlo como ambos sabemos. —Me agarró de las caderas y con un movimiento brusco me apegó a su cuerpo.
Tal vez en otra circunstancia aquello me hubiese encantado, pero no me apetecía tocarlo, ni siquiera deseaba besarlo y eso que antes lo disfrutaba mucho.
—No empieces por favor, tengo que hablar contigo de algo muy importante.
Se separo de mi cruzándose de brazos y su mirada se puso seria.
—Por el tono en que lo dices se que no se trata de algo bueno. Habla de una vez. —Su agresividad repentina me tomó por sorpresa.
Tome una gran bocana de aire y después la solté. No quería darle mas vueltas al asunto, no seria justo para Ethan ni para mi seguir jugando este juego de fingir amor por uno mientras el otro asegura sentirlo de verdad.
—Sabes que te quiero mucho Ethan, que eres importante para mi. —Apreté los dedos contra la palma de mis manos y mordí mi labio inferior—. Pero no podemos seguir con esto. No quiero seguir con esto.
Noté como su cuerpo se tensaba y apretaba la mandíbula. Tal vez sea exagerada pero su expresión me causo temor, sus pupilas se habían dilatado y las venas de su rostro se habían brotado. Jamás había visto tal punto de rabia en su ser.
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Todo Por Tenerte [COMPLETA]
Teen FictionPara Hebe Miller la vida nunca fue tan complicada, se basaba en una repetitiva rutina; ir a la universidad, volver a casa, salir con sus amigos los fines de semana, salir a fiestas y enredarse con uno que otro chico siempre que podía; cenas familiar...