Capitulo 7.
Colgó.
-¡Estas loca! ¿Cómo pudiste?-Thomas estaba realmente enfadado.
-Un simple gracias seria suficiente.
-¿Acabas de arruinar mi vida y quieres que te agradezca?
-¿Tu vida? ¿En serio? Creo que estas exagerando un poco. Además, te gusta esa chica por lo que puedo ver, el problema era que hasta ahora no has sido capaz de hablarme por lo que he visto.
-La he saludado pero no sabe que yo existo.
-Bueno, problema resuelto porque ahora si lo sabe.
-¿Que dijo?
-Nada, solo colgó.
-¿Eso significa que has arruinado mi vida para nada?
El portón hizo ruido pero no se abrió.
-Bueno, parece que no. Es tu oportunidad.
-¿Y que se supone que le diga?-dijo nervioso. Más que eso.
-Primero creo que seria mejor levantarnos de este barro inmundo. Por cierto, gracias, acabas de arruinar mi ropa.-dije tratando de levantarme.
-Tu lo hiciste primero.-se levantó.
-Barro y cerveza.-dije, recordando el primer accidente.
-Genial.
-Digamos que ambos ayudamos a arruinar mi ropa. Si, genial, ya lo creo.
La puerta se abrió. Me escondi dejando a un Thomas-desde la cabeza a los pies, lleno de barro-muy expuesto enfrente del gran portón negro.
Esperaba ver salir a una chica media feucha. Pero para mi sorpresa una chica alta, rubia, con unas hermosas curvas y un vestido sumamente apretado y corto, con tacones altos, salió por la jodida puerta y puso cara de confundida dirigiéndose a Thomas.
Era mi oportunidad corri sin que ella lo notara y entré.
Punto de vista de Thomas:
-¿Como tienes mi número? ¿Eres un acosador psicópata o algo así? ¿Quien era la chica que hablaba? ¿Por que tenia tu teléfono y porque decia que yo soy tu novia y que estoy ebria cuando ni siquiera me gusta el alcohol?
Oh por Dios.
-Joder.-susurré mientras me reia un poco, no porque fuera gracioso, era los nervios. -Son muchas preguntas, ¿no crees?
-Creo que podrias empezar respondiendo la primera y luego las que le siguen, hasta llegar a la última.
-Todas.
-Es lo que dije.
-Genial.
-Ah, y si, tengo una más, ¿por que estas lleno de barro?
-Eres la chica mas popular del internado asi que cualquiera tiene tu número. No, no soy psicópata ni acosador. La chica que hablaba se llama Alex, tenia mi teléfono porque me lo quitó. ¿Me recordarias la ultima?-dije intentando darle tiempo a Alex para que saliera. No podia creer lo rapido que habia dicho todo eso aunque me encontraba muy nervioso. Era hermosa, realmente hermosa. La amaba.
-Hey, hey-dijo Rachael moviendo su mano por delante de mis ojos.-Thomas...
Sabe mi nombre.
Cuando ya no sabia que decir ni como disimular que estaba temblando de los nervios, Alex salió por el portón negro con Andrew colgado de ella. Estaba completamente borracho y empapado, probablemente lo habian tirado a la piscina o algo parecido. Éramos los 3 chicos mas glamorosos de toda la fiesta:
Dos llenos de barro y cerveza y otro completamente mojado.
Gran fiesta. Genial.
