MI ANTIGUO VECINO✔ (Jungkook & Tù) [Terminada]

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MI ANTIGUO
VECINO

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Esa tarde estuve pensativa acerca de todas las conclusiones que habíamos sacado con Taehyung, tambien le Conte a Jungkook y el estuvo de acuerdo conmigo. Incluso dijo que tenia una forma de averiguar quien estaba en ese pasillo de la segunda planta ese día.
Realmente traté de recordar algún detalle mas de ese dia, algo que pudiera servir para saber quien me empujo, pero me fue inútil, no había nada mas a parte de la fuerza que sentí que me empujo y aquel botón que encontró Taehyung. Sin embargo y aunque tenia mis sospechas acerca de quien pudo ser, nada era claro aún.

Dos días después yo ya estaba en casa recuperándome. Por fortuna me dieron el alta, no soportaría un dia mas estando en aquel hospital, y menos teniendo que comer la insípida comida que alli me daban. Ahora que estaba en casa, me sentia a gusto estando cómoda en mi habitación.
Por indicación medica debía estar bajo reposo por una semana, después me seria posible regresar a mis actividades normales dijo el medico. Durante el tiempo que estuve en casa Hee Sung, Taehyung y Jungkook fueron a visitarme a casa.
Hee Sung venia todos los días después de clases a visitarme por un rato. Ambas charlábamos un poco y ella me adelantaba de los trabajos de la escuela. Jungkook tambien lo hacia a diferencia de que él venia a quedarse la tarde completa, el solo se iba cuando la noche llegaba.

Una tarde luego de que Hee Sung acababa de venir a visitarme y a traerme la tarea de Química, Jungkook llego hasta mi habitación.

-Toc, Toc-dijo abriendo la puerta-¿puedo pasar?-pregunto

-Ya entraste de todos modos, ven-le dije sonriente.

-Te traje un postre de nuez. Tu mamá me dijo el otro dia que te encantaban-se acerco a mi y se sentó en el borde de la cama.

Me enderece y me posicione sentada.
-Muchas gracias. Adoro el postre de nuez-le dije.

-Te lo pondré aqui-dijo mientras dejaba el postre sobre la mesita de noche.

-¿como te sientes hoy?-me pregunto.

-Bien, me siento bien. Ya no me duele el brazo, solo un poco la pierna, pero pasara pronto. Incluso el moretón en mi brazo está mejorando.

-Tienes que recuperarte bien, no sabes cuanto te extraño en la escuela.

-Ah ¿de verdad? creí que no lo hacías.

Él se acerco a mí, miro mis labios y empezó a arrimar su rostro al mío.

-¿por que supusiste eso?¿a caso no me crees?

-No, no te creo.

-Si supieras todo lo que he tenido que hacer por ti, pensarías diferente.

-¿hacer por mi?¿exactamente a que te defieres?

-Bueno, por ejemplo sacarte de un frio y profundo lago, curar las heridas que sueles hacerte, encerarme contigo  en un salón de musica por horas.