¿Que Es Lo Peor Que Puede Pasar?

3. PAPA

13 de septiembre 5:10 PM
Amelia

¿convencer a mi padre de dejarme ir a la casa de la playa una semana antes de los exámenes? Fácil, tan fácil como ir a Marte.

Mi padre es complejo, y muy sobre protector. Creo que la única razón para dejarme salir con las chicas tan seguido, es por el mero hecho de que conoce a sus padres de sus épocas en la preparatoria y Universidad. Dudo que si no fuera así el me dejara tanta libertad cuando ellas entran a la ecuación. En muchas ocasiones me sentía agobiada, pero mi padre era lo más lindo que tenía.

Cuando Sam todavía estaba por la casa era mas fácil hacer que se centrará en una mientras la otra escapaba.

―¡papa, llegue!― dejó caer mi bolso en la entrada, y observó la entrada de la casa. Las lleves del auto de papá estaban colgadas al Igual que su saco ― ¿papá?

―¡en la cocina cariño! ― grita de vuelta, paso por la pequeña sala encontrando un montón de papeles esparcidos por la mesa de café y el sillón grande. Entró a la cocina encontrado todo hecho un desastre.

Joder.

La pequeña isla del centro estaba cubierta de harina y no anda a saber que cosas más. Mi padre tenía un delantal que decía "la mamá más sexy" cubierto de algo negro de dudosa procedencia, su rostro cubierto de una mezcla y su cabello castaño cubierto de harina. Sus ojos azules, que desgraciadamente no herede, brillaban alegres.

―Melia ― deja la cuchara de madera y se acerca a darme un abrazo, retrocedo antes de que logre alcanzarme 

―estas todo sucio papá ― hice una mueca de asco y el bufo divertido, me senté enfrente de la isla y analice lo que estaba sobre ella ― ¿Qué se supone que cocinas?

― es una receta de unos mini pasteles que vi en Internet ― me señala el horno y entrecierro los ojos tratando de ver el interior.

―¿muffin?

―¿así de llaman? ― observa un papel ― pues los anote como "mini pasteles"

― mientas no quemes la cocina, estaremos bien.

― no se me da tan mal.

― claro y yo soy Rachel James ― digo irónica y mi padre frunce el ceño sin captar.

―¿es quien es? ¿una nueva amiga?

― olvídalo papá, iré a cambiarme.

Corro hacia mi habitación, con cansancio me saco el uniforme. Era cómodo, una falda gris, camisa blanca y por encima un saco rojo.  Deje todo sobre una silla para el día siguiente antes de ponerme el pijama, hacerme un moño en el pelo. Entre nuevamente  a la cocina encontrado a mi padre completamente limpio y sirviendo chocolate caliente en dos tasas.

¡joder si! amo el chocolate

Me siento emocionada frente a él, amo el chocolate.

¿ya dije que amo el chocolate?

―come todos los muffins que quieras ― desliza la bandeja en mi dirección― lamentó no haber podido darte plata para el almuerzo el día de hoy.

―no te preocupes, Elise se encargó de que comiera ― me río, y mi padre suelta un bufido entre risas.

Elise, era quien se encargaba de alimentarnos hasta explotar. Siempre que veía que una de nosotras no almorzaba por falta de dinero, nos traía un bandeja de comida. A papá no le gustaba el deber a los padres de Eli más de lo que según el le debía. Ya que ellos le habían ayudado a conseguir su trabajo y está casa. Si no fuera por ellos nos hubiéramos tenido que mudar luego de que el perdiera el trabajo.

Estoy segura que Elise se encargó de convencer a sus padres para que no tuviera que irme. Estoy muy agradecida con ella y su familia. Se que papá también, pero no se siente cómodo con que ellos nos ayuden tanto.

―esa niña es muy terca ― bebé de su tasa sonriendo, el las quiere como si fueran sus hijas. Después de todo nos criamos todas juntas.

―Yo ya me rendí, dile que no y un Bufet aparecerá en la casa.

―otra ves no por favor ― ambos soltamos una carcajada, al recordar.

Hace un año Elise se enteró que llevaba dos días sin almorzar por que papá no tenía trabajo, y mucho menos plata para darme para el almuerzo, me limitaba a cenar. La rubia se volvió loca y le dijo al padre todo sobre como estábamos económicamente, ese día entramos por la noche a la casa y teníamos la cocina llena de comida gourmet, comimos por casi un mes por la cantidad de comida. Y por supuesto llegó el padre de ella con una propuesta de trabajo y esta casa.

Mi padre se negó a lo de la casa, no podía aceptarla. Pero nos estaban echando del departamento en el que estábamos, y era la única opción. Bueno o mudarnos con el abuelo a el norte.

Esas 3 chicas lo eran todo para mi, no se que hubiera hecho sin ellas.

Mire a papá meditando si era momento de pregúntale con respecto a lo del viaje, o esperar a la cena. Suspiro sabiendo que atrasar todo no cambiará nada.

―oye papá ¿puedo preguntarte algo? ― murmuró con miedo, joder que ni con el final de Lujuria tuve tanto pánico.

―Dime.

―Elise quiere que este fin de semana vayamos a la casa de la playa ― levanto la vista de mi tasa viendo como fuente el ceño ― los exámenes están a dos semanas, y hemos estado estudiado mucho. Y pensamos que sería una buena idea relajarnos para despejar la mente.

― No lo sea Melia...― toma un mini pastelito y lo pone junto a su tasa ― ¿este sábado?

― Nos iremos el viernes, y volveremos el domingo.

―Nunca se van los viernes ― frunce el ceño con sospecha.

― decidimos que si queremos relajarnos la idea es no sólo pasar una tarde, siempre llegamos los sábados por la tarde super cansadas por el viaje. Así que pensamos que sería mejor llegar por la madrugada ― sonrió tratando de mostrar seguridad en mi tono de voz.

―¿es muy importante que vayas?

― papá, eh estado dos meses encerrada estudiando para poder conseguir esa beca ― hago una mueca de cansancio, por que si estaba cansada ― sólo quiero hacer algo que no sea estudiar un fin de semana.

―¿irán las 4 juntas?

― si.

― ¿Sólo estarán en la casa de la playa?

―si

― ¿No harán fiestas?

―no.

― ¿habrán chicos? ¿alcohol?

― no habrán chicos, y seguramente alcohol si.

―Amelia... ― me regaña.

― siempre tomamos cervecitas pa...

― No te emborraches.

― lo prometo... ¿puedo ir?

― joder, si― suspira con cansancio y me levanto para abrazarlo ― yo sólo quiero que seas feliz y estas a salvo.

― vamos papá, e ido miles de veces ¿Qué es lo peor que puede pasar?

---------

Se menciona a: lascivia, lujuria y deseo de Eva Muñoz.

En multimedia está Amelia.