𝐄𝐋 𝐒𝐔𝐄𝐍̃𝐎 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐀 [𝐌𝐈𝐊𝐔𝐗𝐋𝐄𝐍]

♪CAPITULO 9♪

— Es sobre Miku...

Esas palabras fueron suficientes para hacer que el rubio se sintiera aún más nervioso, ¿Había algo malo con Miku? ¿Era algo grave?
Decidido a saber lo que pasaba le respondió al mayor tratando de sonar lo más tranquilo posible:

—¿Pasa algo.... Con Miku?

El mayor solo asintió.

—¿Es algo grave? ¿Qué pasa?

—Tranquilo... Por ahora no es nada grave.

¿Por ahora? Esas palabras no sirvieron para que el menor se tranquilizara fue todo lo contrario.

Mikuo, al ver que el rubio seguía sin entender absolutamente nada, decidió comenzar a decirle todo.

— Verás Len, hay algo que me preocupa.... Necesito tu ayuda, hasta ahora eres la única persona que he visto que es cercano a ella.

Len solamente escuchaba, seguía procesando todo.

—... A Miku le hacían bullying... — dijo finalmente.

—¡¿Qué?!

—Solo...  Necesito que la mantengas vigilada, será solo un tiempo, conozco a alguien que podrá hacerlo después pero por ahora, necesito que seas tu.

— Disculpa... Necesito tiempo para procesarlo.

Seguía perplejo, había pensado miles de cosas pero jamás imaginó que fuera algo como eso.

Después de un silencio bastante abrumador, se dispuso a hablar:

—¿Estás seguro que necesitas mi ayuda?

Mikuo solo lo observó por el rabillo del ojo durante unos segundos, después posó su vista en un árbol que se encontraba frente a ellos.

—¿Sabes?... Miku nunca tuvo una vida fácil como la mayoría cree...

Len lo observaba en silencio, si en verdad quería ayudar a Miku, tendría que saber la razón de ello.

— Todos creen que porque somos los hijos de la gran familia Hatsune somos felices, creen que el dinero y la fama lo son todo pero, ¿Alguna vez se han puesto a pensar en todo lo que tenemos que pasar para mantener esa falsa imagen de perfección? Nunca le dije esto a nadie pero, Miku no era feliz, muchos creen que al ser yo el mayor y el único varón es a mi a quien ponen mayor presión, pero no es así... Nunca dejaron a Miku disfrutar lo que ella ama...

—Mikuo...

— Perdón, ¿Puedo continuar? En verdad necesito decirle esto a alguien.

—Adelante...

— ¿Sabes...? A Miku le encanta dibujar, cuando era pequeña siempre me decía que su sueño era ser diseñadora gráfica, yo la apoye todo el tiempo pero... —su voz se estaba quebrando, no era fácil recordar todo eso, su hermana lo era todo para él y el recordar todo lo que había sufrido en el pasado, lo hacía sentir culpable.
—Ella... Quería tener la vida de 'una persona normal'  no quería ser la menor de la familia Hatsune... Jamás le permitieron salir a jugar con sus amigos... ¿A quién engaño? Ella no tuvo amigos, fue educada en casa hasta que entró a secundaria, yo fui quien convenció a nuestros padres para que le permitieran estudiar fuera como toda joven de su edad pero... Por mi culpa Miku tuvo que soportar todo tipo de acoso. —Estaba llorando, ya ni siquiera lo ocultaria, simplemente lloraría hasta no poder más.

Mientras tanto, Len seguía sin entender por completo todo lo que Mikuo le había dicho, en su mente solo había algo, Miku, no podía ni siquiera imaginar todo lo que había pasado, sentía unas ganas inmensas de correr hasta su casa y poder abrazarla, quería consolarla como ella lo había hecho con él momentos antes.

Lamentablemente, no podía hacerlo, escucharía a Mikuo hasta el final.

—Lo siento... Te estoy obligando a escucharme aún después de pedirte ayuda.

— Está bien, te escucharé todo lo que sea necesario.

— ... Gracias... Pero ya estoy bien, te explicaré lo que necesites saber. Cómo dije, a Miku le hacían bullying, necesito que la vigiles durante un tiempo y también que la hagas decirte la verdad, sé que jamás me dirá nada para no preocuparme así que necesito que te ganes su confianza... Por favor, te lo pido Len ayuda a mi hermana para que pueda ser feliz...

El menor seguía en total silencio, no sabía cuáles eran las palabras correctas para esa situación así que se levantó aún en silencio y le tendió la mano, dándole a entender que contaba con su apoyo.

—Lo haré, te ayudaré en todo lo que necesites.

Mikuo lo observaba sorprendido, se limpio sus lágrimas y sonrió amablemente. Acto seguido, acepto la mano del rubio y la estrujó suavemente.

— Gracias...

—No tienes que agradecer.

—Es mejor que te lleve a tu casa, tus padres deben estar preocupados.

—Si...

Ambos jóvenes se dirigieron al auto de Mikuo para poder ir a casa, sin duda ésta había sido una larga noche.

(...)

Mientras tanto, la joven aquamarina se encontraba en su habitación un tanto molesta con su hermano por haberla dejado encerrada, ella quería acompañar a Len para no perder ni siquiera un segundo a su lado.

Suspiró, en verdad se sentía preocupada por el rubio, no paraba de preguntarse ¿Qué era lo que lo atormentaba? Si quería averiguarlo, tendría que esperar, estaba la posibilidad de preguntarle a Rin pero, ella quería escucharlo de los labios del chico.

— Creo que es mejor que trate de dormir. — dijo mientras frotaba sus aquas ojos.

No tardó mucho en quedarse profundamente dormida, lo último que pudo llegar a pensar fue el nombre de cierto rubio.

Lo que nadie sospechaba era que a  partir de ese día, las cosas serían distintas...

Continuará...