𝐄𝐋 𝐒𝐔𝐄𝐍̃𝐎 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐀 [𝐌𝐈𝐊𝐔𝐗𝐋𝐄𝐍]

♪CAPITULO 16♪

Habían llegado a la mansión.

Mikuo fue directo al despacho para solucionar unos pequeños problemas que surgieron en la empresa.

Mientras tanto, Miku subió a su habitación.
Al llegar se lanzó en su cama cerrando sus ojos para poder descansar un momento.

- Siento que cada vez estoy más lejos de acercarme a tí senpai...

El sonido de la puerta llamó la atención de Miku, se levantó y puso su oreja junto a ésta para poder escuchar de quién se trataba.
Al parecer era una de las empleadas que conversaba con alguien más.

-¿Si?-dijo sin separarse de la puerta.

-Señorita Miku, hay alguien que vino a verla.

-Eh... Espera un segundo. -dijo mientras corría para tomar su celular y revisar si alguien le había enviado un mensaje para avisarle.

Nadie.

Los contactos de Miku no pasaban de seis o siete personas. Los únicos con los que mantenía comunicación eran sus padres y su hermano, Luka y recientemente Rin y Gumi.

Suspiró y se dirigió al lugar donde esperaban su presencia.

-Pueden pasar. -dijo abriendo la puerta.

-Con permiso. -dijo la empleada mientras hacía una reverencia para irse del lugar.

El visitante de Miku entró a su cuarto y paró junto a ella.

-Hace tiempo que no nos vemos pero veo que no has cambiado mucho Miku.

-¿Quién eres? -dijo firmemente.

-Creo que tú habilidad para recordar voces ya no es tan buena como antes. - dijo mientras suspiraba. - Soy.... -no terminó su frase y agachó un poco su cabeza sonriendo.

Miku no soportaba la curiosidad, aparentemente era un chico. ¿Cuántas veces se había encontrado con 'un chico' que la conocía pero que ella no recordaba?

- Y.... ¿Me vas a decir quién eres?

El joven soltó una leve carcajada mientras se giraba a verla.

-... Kaito...

-¡Bingo! - dijo alegremente el joven.

Tardó unos momentos en salir de su asombro.

-¡Kaito! - dijo mientras corría a abrazarlo. -¡Te extrañé tanto!

-Yo también te extrañé pequeña...

-¿Mikuo sabe que estás aquí? ¿Cuándo volviste?... No... más bien, ¿Qué haces aquí?

-¿Hmm?¿Tantas preguntas apenas me ves? -dijo sonriendo.

Miku se separó del joven para poder observarlo mejor.

- En verdad te extrañé.... Kaito.

-Yo también... Bueno, dime ¿Cómo has estado? Mikuo me dijo que cambiaste de escuela. ¿Cómo te va?, ¿Tienes amigos?

-Vaya.... ¿Tantas preguntas apenas me ves? -dijo con ironía.

-¿Usas mis propios hechizos contra mi? Eres injusta pequeña.

- Bueno... Creo que aprendí del mejor.

- Has crecido tanto -dijo secando sus falsas lágrimas.

- Kaito...

-Entonces... ¿Quién va a interrogar a quien?

Antes de que Miku pudiera responder, la voz de Mikuo al otro lado de la puerta la interrumpió: