10.

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 tres meses más tarde.
 
 

La luz de la primera se filtró a través de las cortinas de Liam, despertándolo con la suavidad de un beso. Las mañanas lentas y lánguidas eran algo que disfrutaba cada vez más a medida que pasaban los días. Había llegado a apreciar la quietud y silencio de Sunset Harbor.

Cambió de posición en la cama y dejó que se le abrieran los ojos. El dormitorio que en una ocasión había pertenecido a sus padres ahora era completamente suyo. Había sido la primera habitación que había reformado y renovado.

La vieja manta carcomida por las polillas había desaparecido, siendo reemplazada por un precioso edredón patchwork hecho de seda. La maravillosa alfombra color crema se sintió suave y mullida bajo sus pies cuando salió de la cama, usando uno de los cuatro postes de la cama para ayudarse a ponerse en pie.

Las paredes todavía olían a pintura fresca cuando Liam  se inclinó hacia la cómoda ahora pulida y barnizada y eligió un una camisa color celeste y unas bermudas negras. Los cajones estaban llenos de ropa bien ordenada, y su vida volvía a estar organizada.

Liam  admiró su reflejo en el espejo de cuerpo entero que había pedido que restauraran y limpiaran profesionales, y después abrió por completo las cortinas para disfrutar de cómo la primera había llegado a Sunset Harbor en un torbellino de colores: las azaleas, magnolias y narcisos habían florecido en el jardín, los árboles que limitaban su propiedad estaban llenos de suculentas hojas verdes, y el destello de océano que podía ver desde su ventana destellaba con reflejos plateados.

Abrió la ventana e inspiró profundamente, saboreando la sal en el aire.
Al inclinarse por la ventana vio movimiento de reojo. Inclinó la cabeza para ver mejor: se trataba de Zayn cuidando de uno de los parterres de flores.

Estaba completamente concentrado en su trabajo, una costumbre que Liam  había llegado a reconocer durante los tres meses que habían pasado trabajando juntos en la casa.

Cuando zayn comenzaba algo centraba toda su atención en ello, y no se detenía hasta acabar. Era una cualidad que Liam  respetaba, aunque a veces se sentía completamente dejado de lado. Había habido muchas ocasiones a lo largo de los últimos meses en los que habían estado trabajando codo con codo durante todo el día sin dirigirse ni una sola palabra.

Liam  no conseguía adivinar qué debía de estar cruzando la mente de Zayn , era imposible interpretarlo, y la única señal que tenía de que no se sentía repulsado por el era que seguía acudiendo día tras días, aceptando sus peticiones de mover los muebles, pulir los suelos, barnizar madera o volver a tapizar los sofás. Seguía negándose a aceptar un solo céntimo a cambio, y Liam  se preguntó cómo debía de ganarse la vida cuando se pasaba todo el día con el trabajando gratis.

Se apartó de la ventana y salió del dormitorio.

El pasillo de la segunda planta estaba ahora limpio y organizado. Había retirado los marcos polvorientos de la pared y los había sustituido por una serie de reproducciones del excéntrico fotógrafo británico Eadweard Muybridge, cuyas fotografías se centraban en la captura del movimiento. Había elegido la serie de mujeres bailando por su increíble belleza; el momento de transición, el movimiento, era casi poesía para sus ojos.

El papel de pared lleno de marcas de dedos también había sido arrancado, y Liam  había pintado las paredes de un blanco brillante.

Por Ahora Y Para Siempre [ Ziam ] Adaptación.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora