A kiss to a homophobic girl [Lesbian]

34.

En el último día de sus vacaciones tienen un montón de cosas en la cabeza; todas las maneras de disfrutar pero siendo el disfrutar la principal prioridad. Aunque disfrutaban todo el tiempo, estaban seguras que la simple compañía de la otra era total y puramente disfrutar; saliendo a cenar, caminando por cualquier lugar, besándose en algún rincón, viendo películas en casa de Isla, pasando la tarde en casa de Dian. El simple hecho de estar frente a frente y mirarse a los ojos ya las hacía sonreír y sentirse en el lugar correcto.
El día anterior ya lo habían planeado cada una, sin embargo nunca revelando los planes.

Ambas despiertan casi en el mismo momento, Isla mira cómo la espalda de Dian queda al desnudo cuando se mueve sobre la cama, quedando boca abajo. Dian sonríe para ella, y por supuesto que Isla sólo siente el impulso de lanzarse sobre ella, y parece leer su mente cuando ríe ligeramente.
-¿Qué esperas?-Pregunta en un tono bajo, entre juego y serio.

-¿A qué?-.

No obtiene palabras por respuesta, Dian se levanta ligeramente para acercarse a ella y besarla como en ninguna de esas mañanas. Era la última juntas y alejadas de las responsabilidades, después de todo. Las ganas y la calidez sobraban.

Las manos de Isla bajan casi por sí solas, paseándose por el cuerpo de la otra chica y baja sus besos al cuello, mientras también la ayuda a subir sobre ella. Dian tampoco quiere quedarse quieta, sus manos también se vuelven traviesas y decide tocar un poco a su novia bajo ella, parece querer más y no parece que se detendrá, las caricias aumentan y su boca sólo parece bajar un poco más los besos de zonas, pero no de intensidades.

-Dian...-Llama Isla, entre jadeo y voz.

-¿mm?-.

-Deberíamos parar-Más duda que respuesta, Dian niega en respuesta y sigue besándola. Cuando los besos llegan a donde Isla preferiría esperar toma a Dian por el cabello-Dian.-Y la llama de nuevo, pero no parece ceder.

Y ciertamente una parte dentro de ella quería que no lo hiciera, la quería ahí, justo donde la tenía; sobre ella, disfrutándola. Siente sus piernas ser separadas, su cuerpo ser acariciado y besado, su corazón latiendo fuerte y, cuando ya no piensa insistir, sólo le ayuda a separar más las piernas. La ve colocarse entre ellas y hace las caderas hacia atrás cuando siente dos de los dedos ajenos tanteando sobre su ropa interior.

El tiempo en la mañana no sería realmente perdido.

O al menos eso fue lo que pensó Dian cuando decidió cambiar sus dedos por su lengua, turnando con su mano, escuchando la voz de Isla llamando y gimiendo su nombre, sintiendo los dedos de su novia enredados en su cabello, sabiendo y sintiendo que se contenía por cerrar las piernas, empujando su cuerpo sobre su boca y mano, diciéndole cómo ir y obedeciendo en todo momento; todo por complacerla. La mejor de las satisfacciones se presenta cuando escucha su nombre entre gemidos, cuando Isla termina agitada y luciendo totalmente caliente cuando Dian decide mirar sobre sus pestañas.

(...)

Termina de colocarse su labial y mira por el mismo espejo a Isla que también termina de arreglarse.
-Eres realmente preciosa-Dice, más como un escape de palabras que algo que pensó en decir.

-Tú también eres realmente preciosa-y es honesta, lo dice sin pensarlo porque realmente lo siente, lo ve.

Cuando ambas están finalmente listas para salir no están seguras de a cuál lugar ir para tener su cita, así que de nuevo deciden que el momento decida por ellas, caminan fuera de su habitación y se dirigen al lugar que llame su atención. Comienzan entrando a un lugar para comer, ambas concuerdan al mencionarlo. En cuanto terminan, entre coqueteos y risas, salen del local. El viento las acompaña, de vez en cuando moviendo el vestido de Isla. Los llamativos colores pintando en el cielo roban su atención y deciden quedarse a mirar un poco más ese precioso atardecer, recargadas en la baranda que del otro lado se encuentra la arena y el agua. 

Es rápido cuando Dian toma su cámara, y es repentino cuando Isla escucha el sonido que hace el aparato al tomar la fotografía, la tomó por sorpresa, de perfil.

-¿Por qué?-cuestiona, confundida y divertida.

-Porque te veías preciosa-responde Dian, encogiendo los hombros.

-Por supuesto que no. Quiero verla-Exige y se estira para alcanzar la cámara, misma que Dian aleja.

-No. Confía en mí, te ves preciosa. Lo eres.

Isla la mira, niega mientras desvía la mirada hacia otro lado y no contiene aquella sonrisa fugaz.

-De verdad, Is. Me encantó-la gira, quedando frente a frente y deshaciendo la distancia entre sus cuerpos-Tú me encantas.

Y, sin esperar, de nuevo la sorprende, esta vez besándola, suave y sereno.

💕💕💕💕
Ni siquiera sé si alguien lee esto aún.
Pero gracias a quienes siguen leyendo (En caso de que sí), espero estar actualizando más.