Dejo caer mi cuerpo sobre la cama, fue un día agitado, pasé de la comodidad de una cama, a la incomodidad de mucha gente en la cafetería y luego hubo clases de lengua... después me paseé por los pasillos del gigante. Alguien toca mi puerta, muevo apenas la cabeza y observo la sombra de luz debajo de la puerta.
Quizás deba esperar a que se quien sea, se marche. Necesito con mucha urgencia descansar, fue una semana atareada y para mi mala suerte, Vanth no ha podido darme clases de piano. Así que volví al aburrimiento de mi cuarto en cuanto me descopé.
—¡Anna soy Violeta, abre! —insiste.
Cierro mis ojos fuerte, pero con leve envión me pongo de pie y abro la puerta. Me encuentro con una Violeta completamente diferente, lleva ropa de abrigo, unos bolsos a su lado y es obvio, mañana es sábado. Algunos se van con sus padres y otros, se quedan aquí.
—¿Ya te vas?
—No, ya nos vamos, pero... ¿Por qué no has preparado nada? —pregunta y le da una mirada a mi cuarto —tienes un desorden asqueroso Anna —blanqueo los ojos.
—¿Qué se supone que tengo que preparar?
—¡Es la excursión de fin de semana Anna! —grita exaltada y cierro mis ojos al recordar que el lunes fui notificada de ello, ¿Cómo es que me lo pasé tan de largo?
Bueno, no se volvió a hablar del tema y ya nadie más me lo recordó, sinceramente esperaba con muchas ansias quedarme encerrada en mi cuarto para siempre. Violeta me ayudo a las corridas y de muy mala gana a empacar todo, pero seguía muy sorprendida por el desastre que tengo dentro de estas cuatro paredes, no es mi culpa. Todo se desordena en la noche, yo creo que son duendes.
Bajamos por el ascensor, Tomas está debajo junto a Dylan esperándonos y Violeta no duda en ignorarlos, literalmente está corriendo hacia la salida de la institución.
—¡Apresuren! —grita desde el medio del campus —me costó mucho conseguir el cupo en el autobús como para que ustedes me arruinen el fin de semana —Tomas me da una mirada y luego se ríe.
—Le emociona mucho salir —comento y este asiente, no estoy segura de cuantos alumnos son los que van, pero lo que sí sé es que esto, se hace una vez al año y si tienen suerte dos. Como son muchos alumnos, tienen que ir turnando los fines de semana y este nos tocó a nosotros. —¿Marisol? —pregunto y doy una mirada por encima de todos.
—Ella no puede asistir, el entrenador Foster la obliga a quedarse a entrenar, el miércoles que viene tienen un campeonato y esta escuela —desliza su brazo por mis hombros y me obliga a girar para ver la institución entera. —Es ganadora todos los años del primer puesto y si llega a bajar un solo puesto... a la rectora le da un paro cardiaco
—¿Rectora? —pregunto confundida, ¿Qué es una rectora?
Tomas asiente, pero no me da una respuesta y ha pensado que solo era una pregunta de afirmación. Nos subimos al autobús, Violeta se encamina a dejar mi bolso en el portaequipaje y yo busco un lugar junto a los chicos.
La bocina del autobús me sobresalta, el que maneja tiene más ganas de irse que nosotros, Violeta se tira a mi lado.
—Toma —Tomas le pasa una pequeña caja a sus manos.
—No, no te hagas el tonto —se la devuelve
—Llévalo tú —me levanto para acomodar encima mi mochila y no tener que llevarla sobre mis piernas.
—¿Qué pasa? —pregunto, Violeta me toma de la corbata y me obliga a sentarme de nuevo. Abre un poco la caja... es una cajetilla de cigarrillos pintada de negro. —¿Cómo diablos consiguieron eso? —pregunto en susurro
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TE DETESTO;
RomanceAnna Blair es una estudiante de 18, esta en el ultimo año de preparatoria y por un incidente de verano, sus padres como castigo la obligan a ingresar a un internado. "Instituto privado Mentalba" Algo totalmente absurdo considerando que esta en su...