Learning From The Bullet [EDITANDO🌺]

29. One last breath from a cold place.

. . .

Se acercó tambaleándose ante todo el desastre que había formado frente la casa... Lentamente, viendo como su pobre hijo se aterraba cada vez más con cada paso que daba.

No dijo nada, no hizo nada, y aún así él parecía estar al borde de todo.

Que se quebraría como un cristal en cualquier momento.

-¿Jaxon Cottsweld?

Estaba ebrio, y apenas podía saber qué estaba haciendo mal...

-Yo mero, ¿qué... Qué se le ofrece...?

El oficial hizo una mueca de molestia y, casi al mismo tiempo el chico de cabello blanco que estaba abrazando a su hijo hizo otra mueca más, pero esta era de asco, de odio.

No tardó nada en que un oficial se acercase a él por la espalda, sin hacer nada, pero... Podía sentir su amenaza con solo tenerlo atrás.

-Usted queda arrestado por intento de asesinato.

En eso, no pudo evitar soltar una carcajada mientras ponía su mano en su rodilla.

Esto obviamente no le pareció gracioso a los oficiales, pues en seguida hicieron un sonido con su garganta intentando llamar la atención del hombre.

Pasó un rato, Jaxon respiró profundamente y en seguida miró a todos los presentes en el lugar, incluidos los metiches de sus vecinos.

-Yo no... Maté, ni iba a matar a esa vieja loca.

Dijo, antes de soltar un eructo y dejar salir una risita.

-Ella sola es la que casi se mata. Esa hija de puta con sus drogas es la única que ha intentado matarse, no quieran..., echarme todo el saco a mí.

El oficial negó, con una sonrisa sínica.

-No es su único cargo, señor... Abuso doméstico, abandono de hogar y maltrato infantil también están en la lista.

-¿¡Infantil!? Este pendejo tiene dieciocho eso ya no es infantil.

-¡Tiene diecisiete!

Byron gritó entrometiéndose ya molesto por la situación.

-Sí, sí, lo que digas mocoso.

-Así el joven tenga más de dieciocho, eso sigue sin justificar el maltrato a su persona.

Jaxon solo borró su sonrisa, antes de desviar la mirada.

-Si no se puede defender solo no es mi culpa. Yo solo intento educarlo, es un pequeño diablo sin control... Y ahora además me sale joto el hijo de puta.

Lo único que pudo oír fue un gruñido completamente rabioso de parte del chico que abrazaba a su hijo.

Y entre más pasaba el tiempo, más parecía querer aguantar las ganas de golpearlo...

-¿Qué? ¿Tienes algún problema conmigo, güerito adinerado?

Aquel "güerito adinerado" frunció el seño en completa molestia, intentando ignorar esas palabras con toda su fuerza de voluntad. Aunque era difícil, viendo como Jaxon miraba con asco a Edgar, quien no había hecho nada mal.

El oficial hizo una señal, y el policía que estaba detrás de él se acercó bruscamente hasta tomarlo de los brazos y comenzar a ponerle las esposas.

Tarde en la noche, se podían oír los gritos del hombre bastante ebrio, recrimando que él no había hecho nada malo. Incluso golpeó al oficial con tal de que no le pusiera las esposas.