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Llegamos al apartamento de Ruggero, estaba tal y como lo habíamos dejado

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Llegamos al apartamento de Ruggero, estaba tal y como lo habíamos dejado.

Ruggero: Bienvenida... De regreso —me abrazó por la espalda.

Karol: Si, está perfecto para un reventón.

Ruggero: Karol...

Karol: Pero que sensible andas, sólo estoy bromeando —caminé hacia la cocina y saqué una botella de agua del refrigerador.

Ruggero: Me rebelé ante mi padre y ahora me quitará todo el dinero que me daba, creo que debo buscar trabajo.

Karol: ¿Cómo dijiste? —dije ahogándome con el agua—. ¿Qué hacías con el dinero que te daba?

Ruggero: Lo tengo en una cuenta pero de todos modos está a su nombre.

Karol: Pero que tonto.

Ruggero: ¿Comienzas?

Karol: Dijiste que no cambiaba de la noche a la mañana.

Ruggero: Aunque tuvieras razón fuiste muy ofensiva con mi padre, no lo vuelvas a hacer, ¿si?

Karol: ¿Ofensiva yo? Tú viste como me trató, que sea tu padre no le da derecho a criticarme.

Ruggero: ¿Ves de lo que hablo? No cedes ni de broma, siempre estás a la defensiva.

Karol: Lo sé, pero es que... —puse la botella en la mesa—... No estoy acostumbrada a hacerlo, cuando lo hago me siento...débil, dominada.

Ruggero: ¿Y cómo crees que me siento yo cuando cedo todo el tiempo? Y aún así lo hago.

Karol: Pero es que... —me asome por una ventana para ver los rascacielos—... Así es este mundo, hay todo tipo de personas, las dominantes y las dominadas. Igual en las parejas esta el chupador y el chupado.

Ruggero: Ya tenías tiempo de no involucrar sexo en las conversaciones.

Karol: ¿Tú crees que lo hago por deporte? Hablar de sexo con las fajonas del internado no es divertido porque ya se saben las mil maromas pero tú, eres diferente... Así que me divierto como te pones de nervioso cuando hablo de eso.

Ruggero: Y-yo no me pongo nervioso.

Karol: Hagamos un juego ¿Te parece? —me acerqué a él con una sonrisa tentadora.

Ruggero: Esto no me está gustando.

Karol: Tengamos una conversación... De aquellas —le guiñe un ojo—. El que se sonroje primero tendrá un castigo.

Ruggero: Sabes que perderé.

Karol: Entonces hagámoslo más parejo... El primero que se excite pierde.

Ruggero lanzó una carcajada.

Ruggero: ¿Estás hablando en serio?

Karol: Muy en serio, yo con los fajes no bromeo, eso es tema muy delicado.

Niña Mal Donde viven las historias. Descúbrelo ahora