"Y en mis peores momentos, ahí estabas tú para sostenerme...".
—¡Corre, perra, corre!
No sé si fue Daniel o yo la del grito, pero al menos sabemos que compartimos la misma emoción. Nos encontramos de pie, con los nervios en punta y vistiendo poleras azules del equipo universitario. Los Sharks están arrasando y nosotros les brindamos apoyo. O al menos lo intentamos.
—¡¿Qué te pasa, Stuart?! ¡Mueve el culo, ulitka! —Esa fue Petra. La rusa maldice en su idioma natal, para luego agitar por los hombros a su exnovio, furiosa luego de ver cómo atraparon a nuestro corredor en plena cancha.
Una oleada de decepción se extiende en las graderías. Me incluyo.
—¡Lo tenías, ya lo tenías, hijo de la chingada! —Zelan intenta tirar su gorra, pero al hacerlo solo consigue empujarme, haciéndome trastabillar entre la masa de gente que nos rodea.
—¡Hey, ten más cuidado! —Mike consigue tomar mi mano y me jala hacia él, evitándome una caída—. ¿Estás bien? Lo siento, suelen alterarse mucho en estos partidos...
—Descuida, yo suelo ser más torpe —le respondo, carraspeando, mientras golpeo en las canillas al moreno haciéndolo tropezar—. ¿Ves?
—¡Oye! —Zelan se levanta rápido, volteando para enfrentarme—: ¡Que no fue mi intención, maldita loca! —Y me tira su gorra en la cara.
—¡Ay, si serás...! —Me abalanzo dispuesta a pegarle.
—No peleen. Están haciendo un Nikel.
Nos detenemos tras oír la voz de Iara, que sorbe su zumito de manzana, mientras nos señala el partido. Me siento culpable por haber interrumpido su concentración ya que es la única que entiende realmente las reglas y las formaciones del fútbol americano. Es toda una experta en esto y de vez en cuando nos suelta un comentario reprobando algunos movimientos que terminan en errores para nuestro equipo.
Zelan me empuja con su hombro y yo le dedico mi dedo corazón, irritada.
La gente que nos ve cree que somos amigos de toda la vida, hasta sus seguidores, que empezaron a seguirme en mis redes de forma abismal. Entré en pánico cuando empezaron a comentar mis fotos y darle like a los memes que compartía a mis dieciocho.
Mi vida en anonimato llegó a su fin gracias a él. Bueno, ¿a quién engaño? Vengo siendo un meme andante desde que golpeé a esa actriz y mi fama en Youtube tampoco ayuda. Supongo que estoy destinada a la tragedia.
Suspiro mientras observo el marcador, vamos perdiendo por dos puntos. Nuestro equipo es increíble, para alguien que tiene una pésima resistencia física, me basta solo con verlos correr para admirarlos. La disciplina y el esfuerzo es lo que los ha llevado hasta aquí, es gracias a un riguroso entrenamiento que ahora son parte de los Shark, el equipo universitario de Froddous.
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HADES | Dioses latentes #1 (PAUSADA POR CORRECIÓN)
RomanceObligado a vivir entre los mortales, el gruñón dios de la muerte, Hades, cruza caminos con una joven muy torpe y desastrosa que tal vez le enseñe a sonreír... una vez más. 🔸🔸🔸 El dios del Inframundo sabe que los humanos son débiles, simples, pred...