Suerte.

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Mariel.

Poco a poco fui abriendo mis ojos, en cuanto mi conciencia estuvo conmigo me maldije por no haber muerto, era una oportunidad perfecta pero para la mala suerte que tengo desperté de nuevo.
Mire a mi alrededor, estoy en la enfermería de la universidad de nuevo, la el enfermero es un hombre amable de edad avanzada, pasó mucho tiempo aquí así que me cuenta muchas cosas, el es un humano al igual que yo pero se casó con una mujer lobo y tuvieron tres hijos los cuales ya todos están grandes tienen sus propias familias.
Victor así se llama el enfermero, el sabe lo que me hacen en mi casa y aquí por lo que siempre está preparado para curar mis heridas, dijo que mientras el este vivo no me dejara morir porque si aún sigo con vida es porque aún tengo algo que hacer en el mundo, el piensa que algunas personas tenemos algo llamado "destino" dice que son solo unos pocos lo que lo tienen pero que ellos son especiales, el piensa que soy una de esas personas. Lo siento señor Victor pero no soy especial.
Cómo sea busque con la mirada pero al parecer no hay nadie, ¿Dónde está el señor Victor? Me levanté lentamente para irme antes de que llegue Victor y me de un sermón, tengo mi torso, brazos y piernas vendadas, en mi rostro tengo algunas curitas y pomada, en mis dedos tengo lindas curitas azules con dibujitos y en la mesita de al lado de la cama hay una nota con un frasco de antibióticos, tome la nota para leerla:

"Mariel tuve que salir a atender a algunos alumnos que se lastimaron en una pelea, toma uno de estos antibióticos por día y por favor evita lo más que puedas el medicamento controlado en exceso, en la nevera hay comida estás muy flaco así que acábatela y ve a casa a descansar lo más que puedas, te encuentras muy mal de salud así que cuídate por favor.

Atte: Vic.

Posdata: la comida la hizo mi esposa.

Bueno, no le diré no a la comida, me levanté de la cama para ir a la nevera donde normalmente guarda su almuerzo Victor y ahí encontré un plato con una nota:

"Para Mariel, disfrutala."

Supongo que la nota la puso la esposa de Victor porque las letras son muy distintas, la letra de Victor es la típica letra de doctor, fea y que parecen garabatos, en cambio la letra de la esposa de Victor es bastante bonita y entendible.
Saque el plato de la nevera y me serví un vaso de jugo de uva. Comenzé a comer tranquilo la comida de la señora Lucia es deliciosa, realmente me da energías y me ayuda a recuperarme aunque creo que eso es gracias a las medicinas que me puso Victor antes cuando estaba inconciente.

Al terminar de comer tome mis cosas y salí de la enfermería, ya es bastante tarde, cuando estuve fuera de la escuela pude observar la luna llena, vivo en un pequeño pueblo de Alemania que está rodeado por un bosque, incluso tengo que pasar por un pequeño tramo del bosque para llegar a mi casa hay una carretera que lleva de la escuela a una parte del pueblo donde queda mi casa pero si voy por el camino de la carretera será más largo y tardaré aproximadamente media hora caminando así que siempre prefiero tomar el camino del bosque que me ahorra 15 minutos y me ayuda a despejarme, nadie toma este camino es como un atajó.

Como dije antes nadie toma este camino y además ya es muy tarde así que nunca me espere ver a Sergey y su grupo de amigos aquí.

--- Valla ¿Que haces por aquí tan tarde mariposita?--- Dijo uno de los amigos de Sergey acercándose a mi.

--- Voy a casa.--- Hablé sin pensar de nuevo.

--- ¿Para que? Nadie te quiere ahí, mejor quédate a divertirte con nosotros.--- Sergey comenzó a toquetear mi cabello.

--- Eres tan pálido que me da asco.--- Otro de los idiotas se acercó a mi.

ꀤnfierno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora