Capítulo 11

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Sentía cosquillas en mis costillas así que me levanté de un salto, entonces vi a un alegre Eliot mirándome con una sonrisa de oreja a oreja. Me incorpore de la cama para poder darle mi atención.

— Mel.

— ¿Qué pasa Eliot? Me despegue del edredón encaminándome a mi closet, estaba cansada de que todo el mundo me mirara como la sombra de Mahite entiendo tengo una hermana que para muchos es el sueño, Pero ya no más estaba cansada de conformarme a que la gente pesara de mi como "la sombra" eso ya no volvería a pasar.

— ¿Me harías un favor hoy en la tarde?

— Claro.

— Eres la mejor Mel te adoro.

Me abrazo con mucho entusiasmo antes de salir casi a saltos de la habitación. Cuando termine de vestir me algo se sentía diferente "especial" por lo general iba a con vaqueros y sudaderas al instituto pero hoy me puse uno vestido color celeste casi un tono muy ceñido de mis ojos. Ya no más sombra ahora soy yo no sombra.

— Buenos días mamá y papá. Dije bajando las escaleras con la mochila en la mano.

— ¿Melania?

— ¿Si mamá?

— ¿Ese no es uno de los vestidos de Mahite?

— No mamá este me lo regalo la abuela, el mes pasado que vino.

— ¿Te has olvidado hacerte tu trenza? Esto me estaba empezando a cansar.

— No mamá, he decidido que quería experimentar con el pelo suelto en vez de coleta.

— ¿Y eso?

— Porque quiero un cambio.

— Me alegro por ti Mel, ese vestido le queda hermoso ¿a qué si mamá? Pronuncio Eliot.

— Claro. Se acercó de nuevo a la cocina dejándome sola con Eliot, sin darle importancia alguna.

— Ya me voy mamá. Dije agarrando mi celular de la mesa.

— Que tengas un buen día Mel. Me dijo Eliot con un pulgar arriba.

— Igual tu Eliot. Le devolví el gesto. Entonces salí de la puerta, llame a Alice para que vaya acercándose al instituto.

— ¿Alice?

— Quien eres y si no eres Ela será mejor que cuelgues si no quieres que te mate.

— Soy Ela Alice así que levanta tu trasero ocioso de la cama y cámbiate que en 10 estaré en la esquina de tu casa.

— ¿No vas a venir a mi casa?

— No, después te explico por qué.

— ¿Qué hizo ahora el tarado de mi hermano?

— Por qué me dices tarado ahora rata sucia. Pude escuchar la voz de Alex

— Largo engendro mal parido.

— Rata sucia hora de levantarse.

— Joder que tiene Ela y tú por no dejarme dormir, escuchaste mi cuerpo recién está en su 40% como mínimo necesita estar en 45%.

— ¿Ela?

— Si idiota la misma que viste y calza está al otro lado de la línea, por cierto idiopata que le has hecho ahora.

— Pásame el teléfono.

— ¡No! Alice por favor no le des. Suplique.

— Idiopata este es mi móvil así que tuve por el tuyo a ver si te contesta, así que largo de mi habitación que tengo que cambiarme.

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