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Hola, después de subir la nota importante estuve pensando mucho sobre lo que había dicho, y la verdad me sentí tan egoísta por pensar solo en la historia y no en ustedes, realmente lo siento mucho por tomar una decisión tan apresurada y tan egoísta, por lo que la historia seguirá en su curso solo con ustedes, las amo, no lo olviden ❤️🌺✨











Unos suaves golpes se escucharon dentro de la habitación de Taehyung.

Namjoon había entrado con el desayuno ya hecho sobre la mesa de la habitación, pero no encontraba al pequeño castaño por ningún lado hasta que en unos minutos se escuchó un estornudo en el armario.

— Joven Taehyung, su desayuno está listo — dió suaves golpes en la puerta.

Pasaron unos segundos pero ninguna respuesta llegó.

Con un suspiro Namjoon se puso aún lado esperando a que el castaño apareciera.

— Hyung — una sonrisa apareció en el rostro de Namjoon al escuchar la suave vos del castaño.

— ¿Que sucede? — pregunto llevando sus manos a su espalda.

— ¿Creés que soy un egoísta?  — su vos se fue apagando con cada palabra.

Aquella sonrisa que adornaba el rostro del mayor se fue borrando a los segundos, confundido dió media vuelta abriendo el armario donde un desanimado castaño se encontraba entre las ropas envuelto en su cobija amarilla.

— ¿Sucedió algo? — se puso en cuclillas mirando fijamente la cabeza baja del castaño.

— Es solo que...me siento mal — apretó la sábana ocultándose un poco más en ella.

— ¿Te duele algo? — se acerco un poco para acariciar aquella esponjosa melena castaña.

— Me duele todo Hyung — levantó la mirada mirando a su mayor con tristeza. — No se que hacer, solo quiero rendirme —

— Conozco a mi revoltoso Taehyung y se que él nunca se rinde — sonrió mostrando unos hermosos hoyuelos a cada lado de sus mejillas.

— El día de hoy quiero estar solo hyung — susurro apartando su mirada a la esquina de su habitación.

— Está bien, les diré a todos que se vayan — se puso de pie marchando se de la habitación.

Los ojos del castaño comenzaron a humedecer por el creciente llanto en su interior, levantó su mano hasta su frente dando pequeños golpes en su cabeza intentando desaparecer aquella soledad y tristeza.

¿Cómo es que había soportado tanto dolor en toda su corta vida? no lo sabía.


— ¡Hey!, Niño sucio — él pequeño Jungkook se acerco a él sentándose a su lado en el césped. — acepto ser tu amigo —

— ¿Enserio? — volteo a verlo con una pequeña sonrisa.

— Si, no me gusta como te vistes ni como hueles pero me caes bien — sonrió jugando con el corto césped.

— Lo siento — bajo su cabeza jugando con una pequeña rama.

Jungkook al verlo con su cabeza baja limpio sus manos en su pantalón para después meter su mano en su bolsillo derecho, busco por unos segundos hasta que lo pudo sacar con cuidado.

— Toma — extendió su mano hacia él castaño.

— ¿Que es? — extendió sus dos manos.

Un pequeño colgante de color oro cayó en sus manos, los ojos de Taehyung se iluminaron al verlo.

Era una hermosa cadena con una pequeña esfera de cristal con el universo en su interior,

— Las cadenas están hechas de oro puro, la pequeña esfera es muy frágil por lo que debes tener cuidado con ella — señaló con una sonrisa.

— Es hermoso, gracias — sonrió ocultando sus ojos en una línea.

— Ahora que eres mi amigo te prometo que te protegeré por siempre, yo seré tu luz en la oscuridad y tú serás mi universo — se puso de pie quitando la tierra de su pantalón.

Al ver eso Taehyung también se puso de pie rápidamente guardando el collar en su bolsillo del pantalón, se acerco a él con una sonrisa y estiró su mano hacia él.

— También te prometo que protegeré de ti no importa lo que tenga que pasar, nunca te dejare solo, siempre estaré ahí para ti —

Jungkook lo miro fijamente para después sonreír y estrechar sus manos, los dos sonrieron y se marcharon a sus casas.


Desearía volver al pasado — cerró sus ojos con fuerza.

Llevo su mano a su cuello sacando debajo de su camisa aquella cadena, después de tantos años eran pocas la veces que se lo quitaba, era el único regalo que había recibido desde que recordaba.

— Y no haberme ilusionado para no sentirme tan roto ahora — apretó el colgante arrugando su frente en un pequeño temblor en su cuerpo producto por el llanto que ya no podía retener.



















Un ejemplo de cómo es el collar para ayudar a su imaginación.

Un ejemplo de cómo es el collar para ayudar a su imaginación

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