STUPID LOVE

41

El fin está muy cerca.

Jimin lo miro con nerviosismo, Taehyung se encontraba mirando aquellos cuchillos regados en el suelo con una leve sonrisa.

— ¿Ya haz decidido en matarme? — trago saliva aterrado.

Taehyung levantó la mirada mirándolo fijamente con el seño fruncido, haciendo que Jimin temblará en su lugar, pero después de unos segundos la suave risa del contrario se escuchó.

— Eres muy gracioso Fresita — sonrió tomando un enorme cuchillo para cortar carne entre sus manos. — ese era una opción antes, pero tu compañía me hace sentir bien —

— No sabes cómo me alegra escucharlo — dijo menos nervioso, por un poco sintió que mojaria los pantalones.

— Lo se — sonrió tomando todos y guardarlos en el enorme maletín.

Miro a su derecha observando las bolsas de comida y meriendas regadas.

Al parecer Taehyung iba a desaparecer por un tiempo cuando esté tomo un overol desechable con capucha y cierre con unos guantes de nitrilo.

— ¿Adónde vas? — se sentó en la cama observando ir y venir al contrario a todos lados.

Taehyung se acerco a la cama con unas pinzas en sus manos.

— A cazar — Sonrió con una enorme sonrisa cuadrada, antes de dar media vuelta tomando el enorme maletín negro y salir de la casa.

La media noche fue callendo en las frías calles de Seúl, en aquella cantina reinaba el bullicio y el olor a alcohol y tabaco.

Sin pensar que dos personas desaparecerían esa noche.

Después de varios minutos varios hombres salieron sin poder mantenerse parados, sin embargo, dos de ellos no tendrían problema cuando una mano salió de la ventana del auto.

Aquellos hombres pudieron reconocer al chico que los miraba fijamente, con divertidas sonrisas se acercaron a aquel callejón en la oscuridad.

— Vaya, vaya a quien tenemos aquí — sonrió recargandose en la puerta del piloto.

— Así que te atreves a mostrarte ante nosotros — comenzó a reír.

— Vine a buscarlos — sonrió ladino apretando el volante con fuerza.

— ¿Buscarnos? — rio burlón.

— Se que quieren divertirse al igual que yo, ¿Que dicen? — miro al otro sujeto que se mantenía detrás del otro.

— Así que decidiste ser una perra he — lo miro con perversidad.

— Suban a la parte trasera — quitó el seguro del auto. — ahora —

Los dos hombres por el efecto del alcohol subieron cerrando la puerta con fuerza.

— Entonces vamos a divertirnos — dijo riendo con el otro sujeto.

Taehyung los miro por el retrovisor y sonrió, conduciendo lejos de la ciudad.

Ramas romperse y gritos se escucharon en medio del bosque, los dos sujetos corrían lejos de la carretera en busca de un escondite tropezando con las raíces.

— Querían diversión ¿Entonces porque huyen? — sonrió caminando por el oscuro bosque con su bate recargado en su hombro derecho. — yo me estoy divirtiendo mucho —

Aquellos gritos por ayuda le hicieron soltar una estruendosa carcajada cuando los escuchaba cerca, con pasos elegantes con la luz de la luna camino siguiéndolos con su bate y una cadena en la otra mano, con una sonrisa torcida.

— Se ven tan hermosos correr, esto me vienen demasiados recuerdos — apretó la cadena con poca fuerza caminando un poco más rápido. — ¿Ustedes no? —

— ¡Alejate maldito! — grito con fuerza cayendo al suelo de boca al enredarse con las ramas.

Taehyung siguió aquel grito sonriendo al ver que estaba a unos metros de él, tenía una gran ventaja cuando aquellos hombres no podían correr por la sustancia del alcohol.

— ¿Porque? Solo me estoy divirtiendo — giro el bate en su mano al poder ver por la luz de la luna una silueta detrás de un árbol. — solo estoy cazando a dos conejitos asustados llamados Dae-hyung y Sang-hun —

Sang-hun que se encontraba escondido detrás de un árbol tembló al escuchar aquella voz cerca de él, con pasos torpes intento correr sin embargo, sus pasos se detuvieron al ver un cuerpo frente a él.

Levantó la mirada observando los brillosos ojos de Taehyung mirándolo fijamente con una sonrisa macabra, trago profundo cuando esté elevó su pesado bate al aire.

— Te encontré — fue lo último que dijo antes de girar su bate con una sola mano impactando en la cabeza de Sang.

El fuerte grito del sujeto hizo estremecer a Dae-hyung que corría buscando una salida sin éxito, intentaba hacer el mínimo silencio para no ser encontrado, pero aquel ruido de cadenas lo hizo parar.

— Uno menos — dijo tomando la cadena sobre su hombro derecho y jalar con fuerza.

El cuerpo de Sang-hun comenzó ser arrastrado por el suelo arrastrando las hojas secas con él, eso no fue impedimento para Taehyung que seguía en busca de su otro conejo.

— Es mejor que corras más rápido que mi bate — lanzó una gran carcajada.

Dae-hyung nunca se imagino que aquel niño pequeño lo estuviera siguiendo como un maldito lunático, mientras arrastraba a una persona con una bolsa en la cabeza posiblemente muerta con una cadena.

— ¡Por favor perdóname! — grito entre los árboles. — no quise lastimarte —

— Que lindo es pedir perdón a algo imperdonable ¿No crees? — soltó la cadena haciendo un fuerte ruido.

— ¡Por favor escúchame! No quise hacerlo tus padres me obligaron — dijo aterrado.

— Eso no funciona querido, no cuando solo me lastimaste a mi — miro el cuerpo en el suelo para después caminar hacia el otro sujeto. — tu hora llego Dae —

— ¡Maldito escúchame! ¡Te juro que te mataré! — grito con furia.

Taehyung pensó que el sujeto era estúpido ya que no sabía su intención, entre más hablaba más rápido sería encontrado.

— Si muero, te arrastro conmigo — comenzó a correr al tenerlo cerca.

— ¡Por favor te lo suplico! — sollozo al ya no tener fuerzas para correr.

— Mis lamentos y súplicas no fueron escuchadas cuando te pedí que te detuvieras, entonces, ¿Porque debo escuchar las tuyas ahora? — se detuvo detrás de él.

Dae-hyung al sentir un aliento chocar en su nuca abrió sus ojos aterrado, aquella aura negra lo hizo estremecer y cuando dió media vuelta grito al sentir un golpe en su cabeza y perder el conocimiento.

Observó el cuerpo de Dar en el suelo escuchando uno que otro aleteo de los pájaros al ser asustados por el grito.

— La caza a terminado — sonrió tomando la cadena en sus manos.