STUPID LOVE

19

Hoy es el cumpleaños número 23 del famoso Jeon Jungkook heredero de la empresa Jeon.

Prometido de Kim Taehyung, un famoso empresario que tan solo a sus 23 años es dueño del famoso restaurante de Seúl, siendo un conocido diseñador siendo apodado por las personas como "él chico Gucci"

Apagó la televisión dejando el control en la mesa de mármol.

— ¿Vendrás cariño? — la vos de la señora Rose se escuchó al otro lado de la línea.

— Si señora Rose...¿Llegaron mis padres? — seco su cabello con la pequeña toalla blanca.

— Aún no lo sé cariño, pero están por llegar — Se escuchó su suave risa.

— Está bien, nos vemos luego — colgó.

Con cansancio tiro su celular en la mesa y camino hasta su habitación tomando el traje que se encontraba en la cama, un hermoso traje Gucci.

Después de unos minutos se paró frente al espejo amarrando aquella pañoleta en su cuello, tomo los lentes que estaban a su lado y los acomodo en su rostro.

Le gustaba como se ajustaba a su cuerpo aquel traje negro de saco largo cerca de sus rodillas, aquella pañoleta en su cuello resaltaba su cabello castaño y piel bronceada, aquellos lentes resaltaban sus ojos y perfil a la perfección.

Pero no podía faltar lo mejor, aquella boina que siempre a preferido, después de todo debía estar presentable.

Rocío un poco de perfume en su cuello y muñecas para después tomar su celular y aquella caja blanca con un lindo moño rojo.

La fiesta de cumpleaños se llevaría acabo en el famoso restaurante de Taehyung, plan hecho por los señores Jeon.

Después de una larga conversación con ellos se fue rumbo al restaurante para tener una reunión con sus trabajadores, utilizarían el segundo y tercer piso para la fiesta, se serviría los mejores platillos.

Cuando Taehyung estacionó su auto frente al restaurante bajo siendo recibido por los flash de las cámaras, tomo la caja entregándose la a unos de los meseros que había abierto su puerta.

— Por favor ten cuidado, es frágil — arregló su traje observando al rededor. — déjalo dónde ya sabes —

— Si señor — se retiró.

Suspiro profundamente comenzando a caminar hacia la puerta principal que era adornado por unos hermosos globos negros y dorados con unos hermosos ramos de flores a los lados.

— ¡Joven Taehyung! Es el último en llegar — hablo uno de los fotógrafos.

— Tuve un pequeño inconveniente — respondió intentando entrar, habían demasiadas personas afuera.

— ¡¿Señor Taehyung, cuando podremos saber sobre la boda?! — hablaron a lo lejos.

— Aún estamos en eso, cuando tengamos la fecha será revelada inmediatamente — con pasos rápido y pequeños empujones pudo entrar siendo cerrada las puertas detrás de él.

Camino hasta la segunda planta observando todo el lugar, todo era tan lujoso de color blanco, negro y dorado.

Las mesas eran de color negro adornados con delantales grises, en el centro unas hermosas lámparas de un árbol sosteniendo la luna entre sus ramas, todo de color blanco siendo acompañados por los platos del mismo color.

— Cariño, llegaste — su mirada fue hacia la señora Rose que se acercaba a él con un hermoso vestido plateado largo con la espalda desnuda. — ven conmigo —

Caminaron hasta la mesa del centro del lugar donde él señor Jeon hablaba con los señores Kim alegremente, cuando llegaron todos incluído Jungkook los miraron.

— Pensé que no vendrías — hablo sonriente el señor Jeon dándonos lugar para sentarnos.

— Siento la tardanza, tuve un pequeño problema — se sentó a la par de Jungkook.

Este lucía un hermoso traje Louis Vuitton con su largo cabello amarrado en una media coleta, mientras sus largas y gruesas piernas estaban cruzadas al igual que sus manos recargado en el asiento.

— El lugar está hermoso, la decoración es espectacular Taehyung — la señora Rose sonrió mirando a todos.

— Muchas gracias, pero no fui yo quien hizo la decoración — sonrió mirando aún lado viendo a Jin saludar. — Él con otros más lo hicieron —

— Entonces hicieron un gran trabajo — sonrió alegré el señor Jeon sonriendo con la señora Kim.

— Mi hijo escogió a los mejores meseros — respondió la señora Kim volteando a ver al castaño.

— Pera nadie más que tú sabe que a mí niño le gusta la astronomía — Taehyung sonrió asintiendo.

— Si, digamos que solo ayude en eso — sonrió un poco.

Discretamente miro hacía Jungkook dándose cuenta que este lo miraba con seriedad.

Después de varios minutos los meseros comenzaron a entrar dejando los platillos y botellas de vino tinto en la mesa, la suave melodía al fondo hacia que fuera muy relajante.

Taehyung no podía evitar mirar a Jungkook por más que trataba de no hacerlo, su mente comenzó a llenarse de pensamientos haciéndolo tambalear.

Mis brazos se están desgarrando por querer abrazarte con fuerza, si lo hiciera, ¿Me dejarías?