STUPID LOVE

33

El tiempo fue pasando rápidamente desde la última vez que inicio aquella voz en su interior.

Los sonidos de las gruesas sogas se escuchaban en todo el salón de ejercicio, en su frente se deslizaban gruesas gotas de sudor.

Había comenzado a trabajar en su pequeño y delgado cuerpo teniendo una extremada dieta, pero sabía que después de esto haría todo lo que su mente pensaba.

Entonces su celular comenzó a vibrar insistente, dejo su rutina y tomo la toalla que estaba aún lado y limpio su rostro para después dejarlo en su hombro, tomo el celular y contesto.

— ¿Hablo con él señor Kim Taehyung? — se escuchó de la otra linea una voz masculina.

— Así es — camino hasta la mesa tomando la botella de agua y abrirla para darle un gran trago.

— Lamento informarle que su prueba a desaparecido del hospital — intento hablar con firmeza pero no pudo al escuchar el rechinar de los dientes del contrario.

— ¡Cómo que ha desaparecido! — grito con enojo apretando fuertemente su celular.

— Señor Taehyung no sabemos exactamente cómo pasó, no hay ningúna pista de lo que haya pasado —

— ¡Y las cámaras! — llevo su cabello hacia atrás en un intento de calmarse.

— No hay nada señor —

— ¡¿Cómo no va a ver ninguna pista?! — gruño. — me juraron que esa prueba estaría a salvó con ustedes, pero lo han perdido —

— De verdad lo sentimos mucho señor, estamos muy avergonzados —

— ¿Cuando sucedió? — hablo un poco calmado.

Sin embargo no llego ninguna respuesta por lo que hizo que Taehyung volviera a enfurecer.

— ¡¿Malditasea cuando fue?! — repitió con suma molestia.

— Hace casi nueve meses —

Entonces Taehyung lanzó la botella de agua junto a su celular con fuerza al piso.

Su respiración era rápida al igual sus latidos del corazón, intentaba calmarse para no hacer un desastre hasta que después de una hora se tranquilizó y siguió con su ejercicio.

Después de varias horas ejercitándose camino hasta la bolsa de boxeo cubriendo sus muñecas con las vendas, aquella camisa negra delgada de manga corta se pegaba a su cuerpo al igual que su cabello en su frente, y con un fuerte puñetazo comenzó a golpear la bolsa con furia.

En las madrugadas corría en las frías calles de Los Ángeles con su padre siguiendo su paso, los dos comenzaron a tomar el tiempo perdido y aunque él señor Joong-ki desconocía lo que su hijo tenía en mente estaba dispuesto en apoyarle.

¿Pero que era lo que Taehyung pensaba todo el tiempo?

Tal vez su hijo pensaba cosas tan oscuras que tal vez podrían ser ilegales, aunque Taehyung se mirara tan tierno su mirada era lo contrario.

— Ultimadamente haz estado un poco cayado, ¿Debería preocuparme? — hablo mientras seguían trotando.

— No — volteo a verle brevemente. — he estado pensando en muchas cosas, nada importantes —

— ¿Tienes pensado ir a Corea? — volteo a ver aún lado saludando a las personas.

— Sí, pero no ahora — suspiro. — debo hacer unas cosas —

— Sabes que puedes decirme cualquier cosa, sabes que te apoyaré — respiro profundo sintiendo el ardor en sus piernas.

— ¿Aunque cometa un delito? — sonrió burlón al ver el rostro de su padre incrédulo.

Al ver que no recibir respuesta aumento la velocidad de sus pasos, sin embargo el grito de su padre lo hizo detenerse.

— Aunque hagas eso, seguiré apoyándote — respiro rápidamente humedeciendo sus labios.

Taehyung ladeó un poco su cabeza perdido en sus pensamientos, después de unos segundos sonrió y hablo.

— Lo pondremos aprueba —

Así los dos siguieron su camino hasta la casa.

DOS AÑOS DESPUÉS

El frío viento de Corea le dió la bienvenida al castaño que caminaban con dos enormes maletas entre las personas, era tan sorprendente como una persona podía caminar tanto.

El enorme abrigo negro le protegía del frío mientras aquella camisa de cuello alto le hacía resaltar su piel, su pantalones de mezclilla con unas enormes botas negras lo hacían ver tan malditamente bien más cuando aquellos lentes negros se recargaba en su nariz.

Taehyung había regresado mejor que nunca.

El auto negro que esperaba por el abrió la puerta trasera para que subiera, mientras el chófer se encargaba de subir las pesadas maletas en el maletero.

— Al hotel señor — subió al auto comenzando a conducir.

Quitó sus lentes para mirar al retrovisor.

— Sí — con una mirada sería miro a través de la ventana observando todo el lugar.

El auto tomo rumbo al Palace Hotel dónde se estaría quedando por unos días.

Además tenía que ir al hospital por la desaparición de una prueba que había hecho hace mucho tiempo, no podía creer que esas personas no supieran nada.

Al poco tiempo el sonido de su celular de una llamada lo saco de sus pensamientos, sacándolo de su bolsillo contestó.

— ¿Ya haz llegado? — la voz de su padre se escuchó del otro lado de la línea.

— Sí, voy para el Hotel ahora — suspiro inclinándose en su asiento.

— Muy bien, si sucede algo no dudes en llamarme — colgó.

Después de media hora el auto se estacionó en el lujoso Hotel abriendo la puerta trasera para que pudiera bajar, observó al rededor y sonrió entrando siendo seguido sus pasos por el botones llevando sus maletas.

Cuando llegó a su habitación está era enorme con tantas cosas lujosas para su vista, dejo que el botones dejará sus cosas aún lado y saco unos billetes entregándose lo, después de que este se retirará cerró la puerta con seguro y abrió sus maletas.

Saco todo poniéndolo en su lugar, después de hacerlo tomo el enorme portafolio checando que todo estuviera ahí ya que eran de suma importancia.

Después de tanto tiempo investigando había conseguido suficiente evidencia, lo volvió a poner en su maleta y ponerlo debajo de la cama.

Ahora solo necesitaba averiguar dónde estaban aquellos hombres que tanto había investigado.

Había venido por un motivo y lo cumpliría.

Hola, después de mucho tiempo he vuelto con un nuevo capítulo espero y les haya gustado, pues solo comentarles que hace poco abrí una página de productos en línea aunque aún no he subido nada pero pronto lo estaré haciendo, y me ayudarían mucho siguiendo la página gracias 🥺❤️✨