[ADVERSARIO] PARTE 1

CAPÍTULO 119

El emperador dijo que era por el bien de la cara del Gran Yan, pero en realidad era para recompensar a Jing Ting Rui.
　　
¿Y qué significa una placa de oro y un encomio? En este momento, Jing Ting Rui es el ministro más favorecido por el emperador, y sería mejor que se pusieran de su parte.
　　
Pero el Príncipe de Jing ha empujado con ligereza al hombre favorito del Emperador. Todo el mundo ha visto cómo trata al general Jing. En el futuro, me temo que nadie acudirá a su puerta para enviar dinero si quiere aceptar sobornos.
　　
Ai Qing levantó ligeramente la barbilla y continuó ocupándose de los asuntos políticos, pero Yan murmuraba en su corazón: "El hermano Emperador es demasiado amable con él, le ha regalado una placa imperial, y también le ha encomendado un título a su  madre, el Señor Jia tiene razón, esto tiene que ser para alguien de alto rango, ugh.
　　
Sin embargo, como ninguno de  los ministros puso objeciones, el asunto quedó zanjado.
　　
Al terminar la corte, había más ministros que nunca sonriendo y felicitando a Jing Ting Rui. También había personas que pensaban que debían encontrar rápidamente un casamentero para poder casar a sus hijas y sobrinas con Jing Ting Rui antes que nadie, para poder conseguir un buen matrimonio.
　　
Ai Qing, naturalmente, no quería ver a Rui Rui cerca de los demás, pero no esperaba lo que sucedió después de esto, era más de lo que había imaginado......
　　
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El atardecer brillaba en diagonal sobre el cristal de la ventana lacado en verde, manchando las brillantes baldosas de piedra verde del suelo, y el inquieto corazón de Ai Qing.
　　
Un gobernante debe ser tranquilo y digno y tener el comportamiento de un hijo celestial, así que ¿cómo puede ser como una hormiga en una olla caliente, dando vueltas sólo porque uno de sus súbditos no vino a darle las gracias?
　　
"Xiao Dezi". Ai Qing se dio la vuelta, y el joven eunuco, que acompañaba a uno de los eunucos, se adelantó inmediatamente y se inclinó.
　　
　　
"Tú sirviente  está aquí, ¿el Emperador va a  cenar?"
　　
"Bueno ...... ¿el General Jing no ha regresado al palacio todavía?" Ai Qing preguntó en cambio: "La placa entregada por la corte imperial debería ser entregada en la tarde, ¿no? "
　　
"Volviendo a Su Majestad, los seis hábiles artesanos del Ministerio de Obras emplearon dos horas en construir la placa y enviaron inmediatamente a alguien a la residencia del General, y a estas alturas, ya debe estar colgada sobre la puerta hace tiempo".
　　
"¿Entonces por qué no ha vuelto?" Ai Qing murmuró.
　　
"Su Majestad, le ha dado una placa de oro y ha concedido a su madre el título de dama ennoblecida. Creo que este General Jing está compartiendo un festín con todos los señores".
　　
Xiao Dezi no pudo reprimir lo que dijo, pero cuando lo dijo, se arrepintió un poco.
　　
Obviamente, el rostro del emperador estaba tan rojo como la tela teñida, lleno de irritación.
　　
　　
"Son buenos, como recompensé a Rui Rui,aprovechan esto como una oportunidad para acercarse a Rui Rui...". Ai Qing dijo de todo corazón.
　　
"Es decir ......" Xiao Dezi se secó el sudor en secreto, pensando que el emperador estaba enfadado con el General Jing. Parecía que el cariño del emperador por el General Jing había subido otro nivel para ser tan despreocupado.
　　
"Envía a alguien a instarlo, sólo di que tengo algo para convocarlo". Dijo Ai Qing arrugando  su claro ceño.
　　
"Este sirviente irá ahora ". Xiao Dezi bajó a enviar a alguien, y entró Xuan'er, que originalmente había sido la jefa de las doncellas de palacio en el Palacio del Este, y desde la llegada de Ai Qing al trono se había convertido en una Shang Yi imperial de tercer rango, la doncella de palacio cercana al emperador.
　　
En su mano, Xuan'er llevaba un plato de finos postres imperiales y una olla de fino Biluochun, para rellenar el estómago del Emperador.
　　
"Su Majestad, los asuntos imperiales son importantes y el cuerpo del dragón también, ha estado toda la tarde en el estudio imperial corrigiendo papeles, no se agote". Xuan'er aconsejó de forma muy reflexiva.
　　
"Lo sé". Ai Qing sonrió débilmente, luego extendió la mano para tomar un trozo de pastel crujiente, y estaba a punto de comerlo cuando Xiao De Zi regresó con pasos apresurados para informar.
　　
"Su Majestad, este  servidor acaba de enterarse de que en la residencia del General se celebra un banquete, sin duda, pero el anfitrión es la dama ennoblecida, y el General Jing no ha aparecido en absoluto. La gente de esta mansión pensó que el general estaba en el palacio."
　　
"¿Qué?" El pastelito que tenía en la mano cayó al suelo, el azúcar blanco escarchado se derramó en un círculo, y Xuan'er se arrodilló apresuradamente para limpiarlo.
　　
"Entonces, ¿a dónde fue?"
　　
"El criado irá a curiosear de nuevo". Xiao De Zi ni siquiera necesitó la orden del Emperador, salió corriendo inteligentemente.
　　
De este modo, Ai Qing perdió naturalmente el apetito, el té se puso frío, Xuan'er no pudo persuadirlo de comer, y en su corazón no pudo evitar odiar a Jing Ting Rui.
　　
''El emperador está tan preocupado por él, pero no es ni la sombra de sí mismo, si no fuera por el ascenso y la recompensa del emperador, ¡sólo es un hijo ilegítimo!
　　
Sin embargo, Jing Ting Rui era la persona más popular frente al Emperador, y aunque estaba descontenta, aún así sonrió y dijo: "Su Majestad, esta sirvienta  le traerá otra tetera".
　　
En cuanto Xuan'er se llevó la bandeja, Xiao Dezi regresó jadeando y sintiendo el sudor en la frente.
　　
"Esclavo, esclavo, encontré a alguien, es realmente el esfuerzo de pisar algo y conseguir algo". Xiao Dezi parecía encantado y se acercó al Emperador.
　　
"Es el esfuerzo de pisar zapatos de hierro para encontrar a alguien". Ai Qing le siguió con alegría y preguntó con una sonrisa en la cara: "¿Dónde está?"
　　
"¡El Patio de Bronce!"
　　
Xiao De Zi dijo sin descanso: "Después de la corte, algunos ministros felicitaron al general Jing y lo invitaron a un banquete, Pero el General Jing dijo que tenía asuntos militares que atender y no acudió al banquete. El banquete se celebró en la residencia del General para recibir la placa del Emperador.   Escuché que Jing Ting Rui tomó la placa que estaba apoyada en en el piso y ¡Hoo!, saltó sobre la viga y colgó la placa. ¿puede creerlo? Una placa de oro tan pesada".
　　
"La placa está hecha de madera de hierro y enmarcada en oro, pero Rui-rui puede tirar de un enorme arco de mil libras sin ningún problema, así que ¿qué tiene de extraño?" Ai Qing estaba bastante orgulloso de sí mismo, como si fuera él quien pudiera abrir el arco gigante.
　　
"Sí, fue este sirviente el que armó un escándalo, el general Jing volvió a palacio después de eso y se quedó ocupado en el Patio de Bronce, ¡un general realmente bueno y leal al país!"
　　
"Si eso es cierto, no deberías haber preocupado al Emperador". Xuan'er llegó justo a tiempo para escuchar esto, así que se adelantó y dijo: "Su Majestad, ahora puede tomar un refresco a gusto".
　　
"¿Dónde no estoy a gusto?" Ai Qing se sonrojó ligeramente y se defendió: "Sólo tenía curiosidad por saber por qué no había venido a verme, ¿podría ser que no le gustara esta recompensa?"
　　
"¿Cómo puede ser?, es un honor glorioso, nadie  puede pedir más ". Xuan'er sonrió y dijo: "El general Jing  se lo merece".
　
Habiendo servido una vez al Príncipe Heredero en sus estudios, Xuan'er estaba bien versada en literatura y en tinta, un tenue aire de elegancia literaria impregnaba su boca.
　　
"Realmente no puedo adivinar lo que hay en su mente". Ai Qing se sentó en su silla, "Quiero verlo, es un sueño del alma que, ejem, eso es todo".
　　
Ai Qing sintió que había hablado demasiado y se tapó apresuradamente, bebiendo su té mientras Xuan'er se callaba sabiamente.
　　
"¡Este sirviente  sabe lo que es un 'sueño del alma'!" De improviso, Xiao Dezi recogió: "¡Significa soñar y ver! Es fácil hacerlo. Tengo una manera de hacer que el General "sueñe contigo también".
　　
"¿Cómo se haría eso?" Ai Qing miró con curiosidad y dijo con escepticismo: "¿No puedes seguir corriendo en la cabeza de Rui Rui?"
　　
"Pequeño Dezi, sólo se te ocurren malas ideas". Xuan'er sacudió la cabeza y también aconsejó: "Su Majestad, no le escuche, no hay una palabra decente".
　　
"¡Este sirviente realmente tiene una buena idea esta vez! Una buena idea". Xiao Dezi estaba ansioso por defenderse, y también apretó a Xuan'er frente a él: "No escuches, no quiero decírtelo todavía, sólo se lo diré al Emperador".
　　
Luego se acercó al oído de Ai Qing y murmuró un rato.
　　
Ai Qing parpadeó asombrado con sus grandes ojos, pero este asombro también revelaba una pequeña admiración por la "sabiduría" de Xiao Dezi.
　　
Obviamente, ha sido engañado por las "intrigas" de Xiao Dezi varias veces, e incluso la primera vez que estuvo piel a piel con Jing Ting Rui, se sintió confundido por tomar la medicina CUN.
　　
Sin embargo, desde la infancia, Ai Qing ha sido el protector de sus hermanos, ayudando a soportar la carga de los errores de Tian Yu y Tian Chen, y sabiendo que si cometen otro error, ellos mismos asumirán la culpa, pero aún así no se siente a gusto para seguir adelante.
　　
En esto, sin saberlo, Ai Qing ha desarrollado un físico que es fácil de engañar para "meterse en problemas". Y Xiao Dezi es desalmado, no sabe nada de todo y a menudo hace cosas malas con buenas intenciones ¡Lo que hace es simplemente "por miedo a que el mundo no sea caótico"!
　　
Por lo tanto, este amo y este sirviente juntos son suficientes para desordenar las reglas del palacio. Esto es gracias a que Ai Qing es el emperador, de lo contrario Xiao Dezi habría sido azotado varias veces.
　　
Con el apoyo de Ai Qing una vez más, Xiao Dezi dijo felizmente: "¡Su Majestad, no se preocupe, esta vez será fiable!"
　　
"Eso espero". Ai Qing asintió con cautela, sin olvidarse de consolar también a Xuan'er. Xuan'er seguía enfadada con Xiao Dezi, así que terminó de recoger sus cosas y se despidió.
　　
Xiao De Zi recibió entonces con orgullo la orden secreta y fue a hacer todos los preparativos.
　　
Sin nadie a su alrededor, Ai Qing se recostó en su sillón, con todo su cuerpo cada vez más menudito, y su bello rostro lleno de expresiones confusas y descontentas.
　　
"Por desgracia, Yan dijo que no importan los sujetos o las personas, sus corazones están todos vueltos hacia el Hijo del Cielo, y Yan nunca miente". Ai Qing murmuró para sí mismo: "Pero Yan, si el corazón de Rui Rui ...... realmente me pertenecía, entonces ¿por qué no vino a agradecerme mi gracia?"
　　
Pensé que Rui Rui vendría tan pronto como terminara el tribunal de la mañana, y había estado esperando con un estado de ánimo muy alegre, pero no pude ver ni siquiera una sombra de él.
　　
El estado de ánimo de Ai Qing era de pérdida y tristeza, así como de una inexplicable inquietud. Desde que era un niño, Jing Ting Rui lo había vigilado como una sombra.
　　
Asimismo, siempre había permanecido al lado de Jing Ting Rui. Hacía tiempo que se había acostumbrado a esa figura, a esa sonrisa amable.
　　
Ahora, él y Rui Rui ya no tienen la obstrucción de su padre ni el "amor bizco" de la reina de su padre.
　　
Es más, ya tienen una relación muy estrecha ...... pero, Ai Qing también sintió un desapego sin precedentes.
　　
¿Mi recompensa no se ajusta a tus deseos? O, ¿sólo quieres algo de esa persona?''. Ai Qing no pudo evitar recordar ese incidente.
　　　
Cuando Jing Ting Rui fue atacado en la cárcel y quedó inconsciente, Yan recogió de su lado una pieza de jade antiguo con forma de media luna.
　　
No era algo extraño, pues a un general no le extrañaría tener algunos adornos caros en su persona, pero el exquisito material y la perfecta elaboración de esta pieza de jade eran raros incluso en el palacio imperial, que estaba lleno de tesoros exóticos.
　　
Por eso, cuando Jing Ting Rui ya no estaba gravemente enfermo, pero aún no había despertado, Yan lo sacó en secreto y se lo entregó a Ai Qing como si le ofreciera un tesoro, y dijo con una sonrisa: "Qué cosa tan buena, tal vez se lo dio como muestra de afecto la hija de uno de los dignatarios".