Dos semanas, me mantiene enserada no sé dónde, una chica viene me trae comida y se va he tratado de mantenerme tranquila por mis hijos, es difícil cada vez que cierro los ojos veo a Bastián morir una y otra vez, pronto daré a luz he buscado una manera de salir de aquí, pero nada, solo hay una salida, es custodiada por dos gorilas que no se mueven ni para ir al baño, he tratado de contactarme con Aura, pero nada hay algo bloqueándome, lo único que me queda son mis hijos no puedo permitir que algo les pase, jamás me lo perdonaría.
–Como esta señorita –es Amanda.
–No, hagas peguntas tontas –agacha la cabeza tengo las intenciones de disculparme, descarto la idea recordando que es mi enemiga.
–Le traje unos chocolates –intenta aliviar la tensión.
La ignoro, mi corazón ya no siente como antes me quietaron algo, pero yo los terminare de destrozar, Hefestos se va a arrepentir de esto.
–Más tarde le traeré la cena –sigo sin decir nada.
Seba sin decir nada más, tengo que salir de aquí de alguna manera, me concentro tratando de comunicarme con Zeus, se supone que soy una diosa entonces esto no debería de ser tan difícil.
~Zeus, Zeus~ no hay respuesta ~Papá, te necesito ~ vuelvo mi atención a la puerta cuando esta se abre.
–Como se encuentra, mi prisionera favorita –maldita.
–Abandonada, así tratas a tus invitados –tengo la necesidad de abalanzarme sobre ella, recapacito solo por mis cachorros me repito una y otra vez –A qué se debe tu visita, no has venido desde que estoy aquí –me hago a la ofendida.
–Me disculparas, estaba terminado de preparar el ritual de sacrificio –todo mi cuerpo se tensa cuando dice esto –Me hubiera gustado que las cosas sucedan de manera distinta, lamentablemente no será así, esos bebes morirán –siento todo mi cuerpo congelarse cuando dice esto, ella nota mi expresión –No lo sabias, buena ya que morirás de todas formas, tu liberaras a todos del sello, pero tus bebés serán una ofrenda asía Hefestos –Trato de mantener la calma, me es imposible no van a tocar a mi hijos.
–Como puedes hacer esto, ellos no te han hecho nada, ni si quiera han nacido y ya los estas condenando, por favor Hespérides no lo hagas, sabes lo que es ser madre, no lo hagas –tiene una mirada de superioridad.
–Conociste a Mikhail, te conto lo que paso sabes lo que Aura te dijo, pero no sabes mi versión, si sobrevives te la contare será tu premio de consuelo –la quiero matar.
Me estudia con la mira, tiene intenciones de tocar mi abdomen abultado, me alejo.
–Es hora –los guardias me toman de los brazos y me sacan, caminamos por el pasillo hasta llegar a un salón lleno de velas, cosas raras y lo que más me aterra una mesa de piedra al centro.
Todos posan su atención en mí, a lo lejos veo a Amanda quien al percatarse de mi presencia solo agacha la cabeza y desaparece por un corredor. Intento zafarme de su agarre, pero no lo logro, empiezo a buscar una manera de salir.
De pronto siento un dolor en mi vientre, mis bebes ya vienen.–Pónganla en encima de la piedra –trato de evitarlo, pero no tengo fuerzas el dolor incrementa cada vez más –Preparen todo ya es hora.
No me niego a que este sea en final, una anciana se acerca a mí.
–Tienes que pujar –niego –Trato de ayudarte si los bebes no nacen ahora morirán en tu vientre –la miro con temor –Ahora puja.
Hago lo que pide, el sudor cae por mi frete, todos aprecian mi sufrimiento, deja de importarme cuando escucho el primer llanto.
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Sol y luna (Novikov #1) (Editando)
Hombres LoboMuchos piensan que los lobos, vampiros, ninfas, no existen pero yo soy la prueba de si, mi nombre es Arcane ninfa del bosque al menos eso creía y vengo a contarles mi historia. Hace no mucho tiempo todas estas especies no toleraban estar juntas, se...