Ni modo, la vida sigue

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Abby Harris

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Abby Harris.



—No. Llévame de nuevo a casa. Odio las fiestas.

—Pero si el disfraz te queda hermoso —replicó mi hermano—. Tienes que divertirte.

Hacía unos días me había llegado una invitación de Alanna, una compañera de clases, a su fiesta de cumpleaños número diecisiete. Y era de disfraces. Y mi hermano vio la invitación antes que yo, así que básicamente me compró un disfraz y me obligó a ir.

Cuando vi el disfraz de hada, no me pude negar.

Aunque una vez que estuve fuera de la casa de Alanna y vi toda esa gente, quise huir.

—Tienes que divertirte, Abby —repitió—. No puedes vivir encerrada en tu cuarto.

—En mi cuarto me divierto mucho —aseguré.

—En tu cuarto no convives.

Claro que sí. Con mis amigos de internet.

—Es que en las fiestas hay gente.

—Pues sí, Abby. Son fiestas.

—No me gusta que haya tanta gente.

—Te dije que invitaras a Lily, pero no quisiste.

—Estaba ocupada —mascullé, mirando a otro lado.

Era mentira. No sabía nada de Lily.

Adrián había dicho que la invitara, y le dije que lo haría, mentí, por supuesto, y luego seguí mintiendo diciéndole que no podía ir.

Hace unos días, me había escrito. Y yo no le respondí. Y me sentía muy mal por ello.

Y me pareció una solución perfecta ir a mirar su perfil de Instagram. Donde, por cierto, se me fue un like en una publicación de hace años. Esperaba que no lo hubiese notado.

Incluso me preguntaban por la Chica Perdida en twitter, yo solo fingía demencia. Porque no podía responderles que no sabía nada suyo porque estaba siendo una tonta con ella.

Y es que, como había dicho Val; la tenía fácil. Solo debía ir y decirle que también me gustaba. Pero me daba miedo. Y ahí estaba yo complicando todo.

—Muy bien, me largo —dije, quitándome el cinturón—. Pendiente de Toribio, no vuelvas a dejar la puerta abierta.

—Se dice «por favor»

—Por fis.

Dejé un beso en su mejilla y él me dijo que tuviese cuidado. Porque si no me lo decía no lo iba a tener, claro.

Me bajé del auto, y observé la fiesta, medio nerviosa. Había gente incluso fuera de la casa. Pero me pareció genial que todos llevaran disfraz, seguro era por la amenaza que Alanna dejó en su invitación.

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