𝙷𝚘𝚛𝚗𝚢 24/7 𝐕𝐨𝐥. 𝟏 {𝙑𝙤𝙡𝙠𝙖𝙘𝙞𝙤}

Cap 15. Juntos.

Buenass, buenass <33

Espero que te esté gustando mucho la historia, tremenda trama me estoy armando.

Disfruta mucho el capítulo :)

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Acodado sobre el polvoriento bordillo de la ventana de su habitacion, Horacio encendía el que podría el sexto cigarrillo de la mañana.
Dando caladas intensas a este con la mirada perdida.

El humo se atragantó en su garganta cuando vió a un peligris penetrar en su patio exterior.
Miles de recuerdos vinieron a su mente tras ver a ese hombre pisar las rojizas baldosas, acercándose a su puerta.

Dió una última calada al cigarrillo y lo dejó a un lado de la ventana.

Se dirigió hacia la entrada de la casa antes de que aquel hombre pudiera picar en su puerta.
Giró el pomo con rapidez y la abrió, topandose allí con el mesero teniendo su brazo en alto a punto de tocar la oscura madera.

El rostro de Jack se desencajó al ver la apariencia que tenía Horacio.
Desaliñado, su cresta estaba excesivamente larga, el cabello ya le rozaba la mandíbula; llevaba la barba sin afeitar y su pijama se veía sucio y desilachado por algunas zonas. Además el olor a tabaco y alcohol eran bastante notorios en el menor.

--¿Qué haces aquí?-- de mala gana, Horacio interrogó al sujeto.

--Yo...tengo algo que proponerte-- comentó Jack con una mezcla de sentimientos entre temor y nerviosismo.

--Yo no quiero nada de ti-- el francés se dió lentamente la vuelta y comenzó a cerrar la puerta frente al peligris.

--No es por mi, es por Gustabo-- el mayor se armó de valor para decir aquello.

Horacio paró en seco, su piel se erizó por completo al escuchar aquel nombre.

Gus-Gustabo... Gustabo...

No había sabido nada de aquel hombre en semanas, tampoco quería saberlo. Era conciente de que el muchacho estaba siendo buscado por el FBI, pues Gael le contaba sobre las investigaciones y todo lo demás, pero él nisiquiera estaba asistiendo al trabajo.

Pensar en su hermano solo le recordaba escenarios que no quería recordar.
Lo único que quería de ese hombre era retorcer su cuello con sus propias manos hasta ver como su corazón dejaba de latir frente a él.

Abrió nuevamente la puerta y sin darse la vuelta para mirar a Jack, le hizo señas para que entrara a la casa.

Ambos hombres tomaron asiento en el sofá de piel blanca.
Horacio agarró un vaso y se sirvió un poco de whisky, le ofreció también una copa al mayor, pero este la rechazó.

Dió un trago a su vaso y comenzó a hablar.

--¿Qué pasa con Gustabo?--

--Me gustaría empezar desde el principio, asique dejame decirte... --

Jack le confesó a Horacio qué él estaba allí cuando el rubio acabó con la vida de los agentes.
Le explicó lo sucedido, primero la muerte de Pamela y más tarde la de Víktor.
Recalcó el hecho de qué ninguno de los dos había sido maltratado o golpeado, qué no habían sufrido físicamente, pues ya era demasiado duro contar aquello, debía al menos darle positividad al asunto.

--¿Y por qué no hiciste nada?-- musitó él de cresta observando con firmeza su bebida.

--Yo...--

Horacio dejó caer él vaso de entre sus manos, este estalló nada más rozar el compacto suelo de madera, desparramandose por el los vidrios y el whisky qué quedaba estancado en el fondo.