𝙷𝚘𝚛𝚗𝚢 24/7 𝐕𝐨𝐥. 𝟏 {𝙑𝙤𝙡𝙠𝙖𝙘𝙞𝙤}

Cap 20. Sueños.

Buenass, buenass <33

Último capítulo :(

Este cap es mucho más cortito de lo normal.

⚠️Cantidad extrema de wiwa :P

Espero que te guste mucho.

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Horacio, Horacio, Horacio...

El francés abrió los ojos lentamente, sintiendo como alguien zarandeaba su hombro con brusquedad.

La luz de la mañana ya era la suficiente como para cegarlo y hacer que volviera a cerrar los párpados, ignorando por completo a la persona que lo llamaba.

--Joder, Horacio, ¡levanta ya! El puto ruso está esperándote, vas a llegar tarde al instituto-- Gustabo alzó la voz y sacudió a su hermano con más fuerza.

--Mierda-- pensó.
Nuevamente se quedaba dormido, otro día más que tendría que saltar de la cama como un rayo para no perder las clases.

Tiró las sabanas a un lado y se elevó un poco aún sobre el colchón.

--Ostias, ¿has vuelto a tener un sueño de los tuyos?-- interrogó el rubio, observando descaradamente el miembro erecto del otro chico.
--¿Esta vez moría yo también o solo te follabas a tu amorcito secreto?-- rio.

--¡Gustabo!-- Horacio se ruborizó ante los comentarios de su hermano.
La vergüenza fue mayor por el simple hecho de que todo lo que decía era cierto, había vuelto a soñar cosas de ese estilo y no podía evitarlo.

--¿Cuándo vas a decírselo?-- preguntó el rubio, tomando asiento en la cama, junto al menor.

--Nunca-- sonó molesto.

Tras eso Horacio abandonó el lecho y comenzó a vestirse apresuradamente. Tomó las prendas arrugadas que estaban sobre su escritorio, no disponía de tiempo para armar un buen conjunto, pero algo cómodo como un pantalón de chándal gris y una camiseta básica celeste para ir al insti bastaba.

Intentó calmarse y calmar también su caliente entrepierna, respiraba profundo tratando de limpiar su mente y olvidar el sueño tan erótico que acababa de tener hacía escasos minutos.

--Estás jodidamente pillado por él eh-- Gustabo, quien aún seguía allí observándole, era conciente de los sentimientos de su hermano, tanto porque este se los contaba, como por sus actitudes y gestos naturales que los dejaban clarísimos.

Horacio dio un golpe con el puño cerrado sobre la mesa, haciendo que el desorden rebotara levemente.
--Gustabo déjame un rato, vete-- señaló la puerta con el dedo índice, sin darse la vuelta para mirarlo a la cara.

El mayor abandonó el cuarto,dejando a Horacio en absoluta soledad dentro de él.

Agarraba sus libros y libretas y los colocaba en el interior de su maleta, lo último que metió en esta fue su diario o algo por el estilo.
Era una pequeña libreta blanca, sobre su portada se veía el nombre
"Horny 24/7",  y más abajo se apreciaban unas siglas "H. P".
Horacio Pérez.
Ese diminuto cuaderno escondía los secretos más íntimos del muchacho.
Ahí apuntaba sus sueños y además todas esas fantasías que pasaban por su cabeza durante el día, sus fetiches y sus deseos más calientes, todos esos en los que aparecía su mejor amigo, Víktor Volkov.

Una vida entera había sido imaginada por el francés, tanto dormido profundamente, como también con los ojos bien abiertos. Un futuro probablemente incierto, pero que en su cabeza era todo un cuento de hadas.

Aprovechaba todas esas ideas y las combinaba con su magnífica creatividad para crear un linda, pero falsa, historia de amor, la cual amaba leer y releer cada día deseando que se hiciera real.