Viktor
4 de marzo de 2015
La adrenalina está comenzando a correr por mi sistema. Puedo escuchar los latidos de mi corazón, rítmicos y constantes. Ya me he acostumbrado a esta sensación, es lo que precede a los conciertos. La emoción corre por mis venas y aunque intento acompasar mi respiración, mi corazón continúa queriendo salir de mi pecho.
Un flash me saca de mis cavilaciones y cuando giro me encuentro con Palmer, cámara en mano, dedicándome una sonrisa. Mira la foto que ha tomado hace apenas unos segundos y me da su aprobación levantando el pulgar. Entonces reduce la distancia que nos separa y se planta frente a mí.
—Así es como luce un artista apasionado —comenta y clava sus ojos en mi rostro—. Me parece increíble. Tengo unas tomas fantásticas de todos ustedes cuando hacen música y es simplemente... Es que no sé cómo consiguen transmitir tanto.
—¿Entonces ya eres nuestra fan? —Devan aparece detrás de Palmer con una botella de agua de la cual ha bebido.
Palmer se encoge de hombros enigmáticamente.
—¡Cinco minutos! —grita alguien del staff.
—Allá afuera hay doscientas personas listas para presenciar un espectáculo increíble —Devan palmea mi espalda antes de continuar su camino—. ¡No los decepcionemos!
Escucho a Kennedy aullar desde algún lugar y las palmas de Katherine al igual que sus porras también me llegan. Alguien es lo suficientemente amable de pasarme mi bajo y los monitores, los cuales Palmer me ayuda a colocar alrededor del cuello a la par que acomoda el cuello de la camisa negra que estoy usando para la ocasión.
—Iré a mi lugar. Quiero retratarlos desde que salgan al escenario.
—¿No habrá un beso de la suerte para mí? —me atrevo a preguntar, noto que Palmer no se lo esperaba.
A pesar de que rueda los ojos, mira a ambos lados antes de inclinarse y darme un beso muy rápido. Al igual que en el hospital, es apenas un roce, pero no por ello me siento menos afortunado.
—Éxito, superestrella.
La veo ponerse en movimiento y apenas desaparece tras una de las cortinas yo imito su actuar. Ajusto la correa del bajo sobre el hombro, busco mi plumilla en el bolsillo e intento relajar la tensión de mis hombros. Cuando anuncian que ha llegado el momento y los gritos nos llegan desde el exterior sé que debo estar a la altura de las expectativas.
Cuando piso el escenario, sea del tamaño que sea o haya cientos, miles o una sola persona, yo me siento distinto. Como si fuera otra persona completamente diferente la que se apodera de mí, alguien que sabe lo que debe hacer a cada momento. Es surrealista, porque sigo siendo yo, pero viviendo algo increíble, transformando sonidos y silencios en música que consigue que alguien sienta algo, creando una conexión mágica con personas que no conozco.
Eso, esa sensación, el sentimiento es especial.
—¡Hola a todos! —habla Kath en el micrófono—. ¿Están listos para una tarde excepcional?
Gritos a todo pulmón, chillidos emocionados. Algunos dicen mi nombre y los de los demás de una manera especial. Yo sonrío, porque esas personas que gritan tan emocionadas son las que hacen esto posible.
—¡Entonces hagamos música!
Aiden abre los acordes y Kennedy y yo lo imitamos. Devan a la batería hace lo suyo y Katherine suelta una exclamación que hace que la gente se emocione aún más, a la expectativa. Los acordes de This Is a Party comienzan y la voz de Kath llena el lugar.
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Prototype Música y Contraste [Serie Fama y Gloria #1]
RomanceUn músico aclamado que vive el sueño de su vida. Una fotógrafa frustrada que está estancada en donde no desea. Dos cuentas anónimas que unen sus caminos. Un sentimiento que crecerá más allá del entendimiento. Un romance con fotografía, acústica...