Maday [Libro 1]

Capítulo 22

Salí de ahí hasta donde Max se encontraba con Susan, me despedí de Susan y salimos para la casa.

Después de llegar a casa, con un nudo en la garganta por lo que haría, pero tenía que despedirme de Max, mi hermano.

-Max.

-¿Si?

-Te quiero, te amo mucho Maximo-le dije abrazándolo.

-Yo también te amo Mady-respondío envolviéndome en sus cálidos brazos.

-Sos el mejor hermano que pude tener.

-Y tú igual, eres la mejor mi pequeña Mady.

Fue lo último que dije y me dirigí a mi habitación, a encerrarme.

No quería hacerlo, porque a Max le dolera, a Bernie, a Bysael, a Anthony y quien sabe si también a Xander, en verdad lo extrañaba demasiado, pero más allá de eso, yo ya no podía con mis pensamientos. Toda una vida odiandome y luchando internamente.

Y para cuando conocí a Xander, a la felicidad, todo se esfumó, porque lo de él y yo término así como empezó:

Lo que comenzó en un hospital,en un hospital terminó.

Cerrar ciclos no era mi fuerte. Me senté y tomé una hoja de papel, para dejarle una carta a Max.

Mi Maximo.

No te sientas culpable por lo que hize, tú fuistes un buen hermano e hicistes demasiado por mí, me cuidastes, me apoyastes y me amastes, te amo como nadie, porque el amor más puro fue el tuyo y el mío, nuestro amor de hermanos, nuestros lazos de sangre.

Agradezco todo lo que logramos juntos, por apoyarme siempre, no olvides el gran amor que te tengo Max, tú eres una maravillosa persona y quiero que logres todo lo que te propongas, que seas feliz y encuentres alguien que te haga feliz y te ame de verdad.

Eres fuerte Max, eres grandioso y eres mi Maximo.

Perdóname por lo que hize, hasta siempre.

-Sigue brillando Maxi.

Con amor, tu hermana.

Escribí todo eso con lágrimas en los ojos, no quería pero ya no podía más.

Dejé la carta sobre la mesa, abrí el primer cajón y saqué un bisturí, ya en mis manos el proceso sería rápido.

Trazando y abriendo mis venas con furia y dolor...

-Vive-me dijo mi conciencia.

Y oscuridad infinita.