Paraíso

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   Ella miraba el techo de aquella sombría casa , estaba tirada en el suelo con los ojos rojos , sus ojos estaban desenfocados   sollozaba con temor de que el mundo terminará pensaba que las cosas serían diferentes si tal vez nunca hubiera aceptado esa misión,  tal vez su vida sería igual de monótona,  pues siempre tendría que ser lo mismo , llevaba al menos tres o cuatro días sin comer nada , pues comió lo poco que había en la alacena y no había logrado escapar , suspiraba y con dificultad se levanto del piso , sus huesos sonaban fuertemente y sus piernas ardían con cada forzado movimiento,  llego a una ventana , miro el cielo , las hermosas constelaciones donde juraría podía mirar el rostro de su chico , lo extrañaba demasiado, pero no podía llorar ni tirarse a morir al menos ya no mas , con pocas energía siguió caminando por la casa en busca de alguna forma de escape.

      El bicolor tenía el ceño fruncido mientras miraba a el otro con furia , el peli-negro ni se inmutó , solo sonreía con burla y tranquilidad.

- Déjenme ir - dijo el susodicho.

- Dime donde esta t/n - mas que petición fue una orden.

  El peli-negro chasqueo la lengua y dio una risa ronca - Hermanito mio , si no me dejas ir tu chica va a morir de hambre y de sed  - dijo con simpleza,  pues era mas que cierto , ya estaba cansado de estar en ese lugar y demas preocupado por la vida de la chica.

- Dime donde esta - pidió de nueva cuenta.

- Solo asegúrate de que este viva - hablo el mayor.

     Los autos de la policía iban con rapidez por el caliente asfalto , el bicolor llamo a sus amigos los mejores héroes, todos iban lo mas rapido que los vehículos daban.

   La chica miraba por la misma ventana , ya no tenía nada por hacer , busco por todos lados y no encontró nada , todo estaba vacío  , estaba frustrada , por su mente pasaban como pelicula su vida y las cosas bellas de esta.

   Escucho cirenas de policía,  no puso atención alguna despues de todo nadie sabía que ella estaba allí,  una fuerte explosión la hizo sacar la nube de pensamientos que tenía y miro a la destruida puerta con sorpresa.

- Bastardo de las mitades aquí esta la tarada que tienes como esposa! - la voz del rubio inundo los oidos de todos.

- Ba- el bicolor entro a el lugar y la miro.

      Sus almas se encontraron y por fin , por primera vez en toda su vida se sentían seguros , nada malo volvería a pasar y eso era algo que sus ojos reflejaban , un suspiro de alivio salio de los rosados labios del bicolor para luego dejar salir aquellas saladas lágrimas que tanto se esforzó por retener , la chica sonrío con nostalgia.

- Ven y besame mocoso mimado - dijo ella al bicolor mientras sonreía ampliamente y el rubor se instalo en sus mejillas.

    El bicolor río levemente para correr a ella y besarla con todas sus fuerzas,  la abrazo con cariño,  ese beso fue el cello de su nueva vida , fue mas significativo que cualquiera que se hallan dado jamas , no se separaban y las respiraciones o intentos de estas se escuchaban por el lugar seguido de los ruidos de la saliva mezclándose en las bocas de los dos , se besaban con fulgor el bicolor sostenía firmemente la cintura de la mas baja , pequeños gemidos salían de sus gargantas y el deseó de mas se apodero de sus sentidos.

- Son unos empalagosos - solto el rubio ceniza mientras miraba la escena con una pizca de asco.

- Dejalos kat-chan se estan reencontrando - le dijo el pecoso algo nervioso.

sɪɴ sᴀʟɪᴅᴀ [todoroki × t/n]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora