tenerte eternamente (NEUM II)

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"Aún recuerdo el día que llegaste a mi vida, tú sin avisar, y yo sin sospecharlo; desde entonces me gusta pensar que también existen los accidentes bonitos."

***

(...)

—Oh por dios Jeff ¿es un safari?— doy pequeños saltos de felicidad. 

—Algo así, es realidad es un refugio de animales. Están en tratamientos físicos y después regresan a sus hogares— lo escucho atento. 

—Wow, muero por entrar— lo tomo del brazo y lo jalo para que camine más rápido.

Lo primero que mis ojos ven, son unos tigres bebés. No puedo esperar más y corro hasta ellos, por suerte no hay gente esperando así que nos dejan entrar enseguida. 

La encargada de esta sección, nos explica que le daremos de comer a los tigres, nos da un par de mamilas con formula especial para ellos y nos acercamos lentamente. Mi cuerpo se llena de adrenalina y felicidad. 

Los tigres se acercan a nosotros en cuanto ven que les traemos comida, nos sentamos en unos pequeños banquitos y la chica encargada nos indica como cargarlos para que puedan comer. Miro a Jeff, esta prestando atención a las indicaciones que nos dan. Me mira y nuestras sonrisas se hacen aún más grandes. 

-El tigre que esta contigo es el más pequeño, apenas tiene dos meses de nacido y esta en este refugio porque nació con algunos problemas en su vista, por fortuna su operación salio muy bien y esta en las ultimas etapas de su recuperación— me dice Emily, la encargada. 

—¿Y qué pasa con el mio?— pregunta Jeff. 

—El también es de los más pequeños, tiene 3 meses y esta aquí porque tenia problemas en su corazón, el tratamiento también esta funcionando bien y pronto ira con su madre— 

Después de alimentarlos, jugamos unos minutos más con ellos, los acariciamos y mimamos y es hora de seguir con el recorrido. 

Alimentamos a todos los animales desde arriba de una Jeep que rento Jeff, nos encontramos con jirafas, cebras, avestruces, antílopes y muchos otros más. Sin dudarlo es uno de los mejores días de mi vida y lo estamos disfrutando entre risas, platicas y besos.

 —¿Tienes hambre?— 

—Si, ya son casi las seis de la tarde— estamos recostamos en la parte trasera de la camioneta, observando el paisaje. 

—Hice una reservación en un restaurante, vamos a comer y después a descansar— me da un beso lento y asiento.

Pasamos a la parte delantera de la Jeep y empezamos el camino hacia el restaurante, yo conecto mi celular al radio y pongo algo de música para cantar mientras llegamos. 

Suena STAY de Justin Bieber y la cantó a todo pulmón mientras Jeff me hace coro y ríe diciéndome que soy una pésima cantante.

Quince minutos después llegamos al lugar, es un restaurante japones.  Obviamente Jeff sabe que es mi comida favorita, podría comer sushi y arroz frito todos los días de mi vida.

El restaurante es hermoso, tiene un ambiente japones pero también muy elegante. Nos sentamos en una mesa privada y enseguida pedimos nuestra comida.