tenerte eternamente (NEUM II)

8

"Ella quiere ser amada con una lengua honesta, un corazón dedicado y unos ojos exclusivos."

-Ron Israel

***

—Iré a bañarme, siento que huelo a hospital—les aviso y subo a mi habitación.

Me quedo paralizada, cuando veo el closet abierto, el espacio de Jeff esta casi vacío.

Busco mi celular en mi bolsillo y marco el numero de Jeff, no estoy entiendo nada, así que necesito que él me explique. Suena varias veces, pero no obtengo respuesta. 

Debe estar ocupado.

Cierro la puerta del closet con un nudo en la garganta y el corazón oprimido. Sea lo que sea que este pasando, necesito saberlo ya. 

Unos minutos después, estoy fresca y limpia, escucho que Luci me llama desde abajo, así que salgo de mi habitación.

—Te buscan en la puerta— bajo casi corriendo, sé quienes son —te gustará lo que ha llegado— Luci me sonríe y salimos, no sin antes tomar mi cartera.

—¡Hola Gus!— Gus es uno de los dueños de la veterinaria de Hamburguesa y tocino.

—¡Leni! que gusto verte— le sonrió— ellos también estarán contentos de verte—abre la puerta trasera de la camioneta y en seguida, hamburguesa comienza a llorar y tocino a maullar.

Gus los saca de sus jaulas y enseguida hamburguesa se lanza sobre mi, lamiendo mi cara . 

—Yo también te extrañe mucho— la acaricio y le doy besos en su pequeña cara. Veo que Luci toma a tocino, me sorprende ver que no hace ningún sonido de defensa, como lo hace con Nick o cualquier otra persona que lo quiere acariciar, que no sea yo o Jeff —muchas gracias por traerlos Gus— 

—No es nada, es divertido dejar la veterinaria por unas horas— rio.

—Luci también es veterinaria ¿verdad?— la miro, esta muy entretenida con Tocino.

—Si, los animales son mi vida— sonríe y mira a Gus.

—Que bien, podrías darme trabajo, estoy pensando en dejar la ciudad pronto—Luci lo mira unos segundos —y este pueblo es muy bonito— los miro, parece que hubo un chispazo.

—Claro,  siempre necesito ayuda en mi clínica y estoy pensando en abrir una granja pronto— la miro con los ojos abiertos, eso ni yo lo sabia. 

—Bien, pues Leni tiene mi número— me mira con un brillo en los ojos — llámame cuando necesites ayuda— Luci dice que si con la cara, parece intimidada. 

—Claro, se lo daré con gusto— le sonrío y abro mi cartera, tomo un par de billetes— ten— 

—Oh, sabes que no es necesario Leni— 

—Claro que lo es— sé que ha tenido problemas financieros y su veterinaria esta al punto de la quiebra a pesar de que son muy buenos —si no lo tomas, no le daré tu número a Luci— ella me golpea con el codo, pero me mantengo firme ante mi amenaza.

Gus se rasca la cabeza y trata de no sonreír, sus mejillas se vuelven rojas.

—Vamos, no me dejes con la mano estirada— muevo los billetes y después de varios segundos, los toma.