"Y si pudiera traerte a mi lado con tan solo el hecho de pensarte, soñarte e imaginarte; créeme que entonces, no me faltarías ni un solo día, ni un solo instante."
***
Me siento sola, hace mucho tiempo no me sentía así. La casa esta muy silenciosa y se me vienen a la mente hamburguesa y tocino, mis pequeñas mascotas que se encuentran en un hotel para animales, los extraño tanto. Han estado ahí desde que nos fuimos de luna de miel y me siento muy mal por eso, aunque solo han pasado siete días.
Sin pensarlo, marco al hotel y pido que por favor las traigan para el pueblo y yo me haré cargo de los gastos, ellos aceptan amablemente.
—Muchas gracias— repito por milésima vez y cuelgo.
Me levanto del sofá y observo cada centímetro de la casa, no puedo creer que sigue igual que como la deje solo que con polvo por todos lados. Voy en busca de todo lo necesario para poder limpiar. Pongo música para que el tiempo de limpieza sea más ameno y sin perder más tiempo, empiezo.
La música invade toda la casa, ha pasado una hora y por suerte ya estoy en el ultimo cuarto, agradezco mentalmente estar sola ya que si estuviera Jeff aquí, haríamos de todo menos limpieza.
Termino de hacer la cama y por fin he terminado. Me dejo caer en la cama y tomo mi celular, no tengo ninguna notificación nueva. Suspiro y me levanto rápidamente de la cama, me sostengo de la pared cuando siento que todo a mi alrededor se mueve y me quedo parada tratando de no caerme. El mareo pasa unos segundos después.
—¡Leni!— escucho que me gritan desde afuera, me asomo por la ventana y veo a Alex, esta recargado en la pared, viene con un traje negro y un maletín. En seguida bajo.
—¡Hola!— digo en cuanto lo veo, el alza la mirada y me sonríe, pero su sonrisa se desvanece en cuanto me ve —no escuche el timbre—
—Creo que no sirve, estuve tocando varias veces. ¿Te sientes bien?— me pregunta. Yo abro la puerta para que entre.
—Si, claro ¿por qué?—
—Estas pálida— frunzo el ceño — y no creo que sea por no tomar el sol, porque acabas de regresar de tu luna de miel—
—No sé porque lo estoy, supongo que porque no he desayunado— Alex mira su reloj.
—Es casi medio día, deberías haberlo hecho hace un rato— caminamos hasta el comedor y nos sentamos.
—Lo sé, es solo que se me paso el tiempo por hacer limpieza— me excuso aunque sea verdad.
—Si quieres podemos ir a algún lugar a desayunar mientras hablamos sobre el pueblo—
—Me parece una buena idea, el refrigerador esta más vacío que nada— tomo mi cartera y salimos.
Alex tiene un carro muy bonito, es pequeño pero para una o dos personas es perfecto. Me abre la puerta y le agradezco. En cuanto entra me regala una sonrisa y yo se la devuelvo.
—Es un poco raro verte aquí de nuevo— habla y el auto comienza a moverse.
—Lo sé, yo también me siento rara— reímos —pero sabes cuanto amo estar aquí— él asiente.
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tenerte eternamente (NEUM II)
Teen FictionLa vida de Leni y Jeff es casi perfecta, su amor ha permanecido y crecido a lo largo de estos años, y pareciera que nadie puede cambiar eso. Sin embargo están por vivir sucesos que pondrán en riesgo su tranquilidad.