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"Aunque pudiera estar en mil sitios a la vez, tengo claro que seguiría agarrándome a la misma mano cada vez que sintiera que estoy perdido. La tuya."

***

Lo siguiente que supe fue que me desvanecí en los brazos de Jeff, solo escuchaba su voz diciéndome que despertará.

Mis ojos se abren por unos instantes, logro ver a Jeff un poco borroso, su cara luce muy preocupada pero siento como presiona mi mano con la suya. Parece que esta caminando a mi lado, me mira y veo como su boca se mueve pero no logro entender que dice. Mis ojos se vuelven a cerrar.

—Leni— abro los ojos— ¡Leni!—

—Lu...— trato de hablar pero siento mi boca muy seca, necesito agua. Veo que estoy en un cuarto blanco, la cama es muy pequeña y por la ventana no entra nada de luz, seguramente ya anocheció.  Veo mi mano, tengo colocado un suero intravenoso. 

—Tranquila— Luci toma mi mano y la acaricia suavemente.

—Agua— digo casi en un susurro, ella se levanta de un salto y me acerca el vaso de agua a la boca para que pueda darle un sorbo. —gracias— mi voz suena muy débil —¿Qué paso?— 

—No lo sé, Jeff sigue hablando con el Doctor— en cuanto dice su nombre, entra por la puerta y me mira. 

—Leni— se acerca a mi y me mira acariciando mi cabello— ¿Cómo te sientes, amor?— 

—Bien— respondo tratando de sonreír —¿estoy bien?— preguntó un poco nerviosa. 

—Si, no es nada grave, no te preocupes— me sonríe y acaricia mi mejilla.

El doctor entra mirando algunos papeles, me mira y después revisa el suero, luce joven pero las ojeras alrededor de sus ojos lo hacen ver un poco mayor.

—Estas muy deshidratada y tienes una infección muy fuerte en el estomago— toma mi pulso y acomoda la aguja del suero con un fuerte movimiento.

—Auch— me quejo pero no se disculpa. Miro a Lucí tiene el ceño fruncido y su mirada hacia el doctor, es dura. 

—Debería tener más cuidado—  habla, pero él la ignora por completo. Su actitud es muy extraña. Miro a Jeff, también luce extrañado con la actitud de el Doctor.

—¿Hay algún problema?— se endereza, luce intimidante siempre que esta en esa posición.

—¿Por qué habría algún problema? — dice mientras escribe cosas en sus hojas. 

—Porque eso parece— dice de golpe, le tomo la mano y me mira. Con ese gesto espero que se tranquilice. 

—Estoy haciendo mi trabajo— responde pero parece fastidiado. 

—Pues deberías de hacerlo bien— me sorprendo cuando Jeff me suelta y sus manos se forman en puños. 

El doctor mira a Jeff por varios segundos y finalmente me mira a mi.

—Pasaras la noche aquí para que el suero se termine y tienes que tomarte estos medicamentos— pone una cajita con pastillas en la mesita que esta alado de la cama— son para la infección,  por la mañana mi compañera te dará de alta y más indicaciones para seguir en casa— asiento, por sorpresa su tono de voz cambio un poco.

tenerte eternamente (NEUM II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora