Ojos

286 12 0
                                    

Esto lo estoy escribiendo casi oculto, no quiero que sepan que lo hago y tampoco quiero explicar porque lo hago así ya que no tengo tiempo, tal vez luego lo explicaré después, pero no, aún no…

Tiempo atrás, ni siquiera recuerdo cuando, ni cuanto ha pasado desde entonces, ya he perdido la noción del tiempo con la situación en la que estoy; no seguiré explicando. En fin, ese día en el que empezó todo había comenzado como todos y pasado perfectamente hasta ese momento, regresaba de mi trabajo cuando, justo antes de llegar a mi departamento en el hotel, un amigo mío me “interceptó” y me dio una cinta de video, si de esas de VHS viejas, me dijo que la viera, que quedaría impresionado, aunque al principio no tendrá nada especial, pero también tenía algo raro, quería que viese qué era eso que tenía de extraño, me la dio y se fue de una manera apresurada, pero, con aspecto desanimado y mareado, le pregunté que era cuando aún no se había alejado mucho, a eso me respondió: “ya verás, te darás cuenta de que quiero que notes” y siguió su camino caminando como antes, pero un poco más lento.

Me pregunto cómo es que recuerdo tan bien una experiencia tan terrible como la que fue ese período de tiempo en la que sufrí tanto y ni siquiera recuerdo que cosas buenas me han ocurrido en mi vida, a pesar de saber que fueron muchas, es algo raro, el humano es así, recuerda perfectamente las malas experiencias, pero las buenas pasan como si nada y se olvidan inmediatamente.

En fin, tras pasar la escena de atrás, en la que me dieron la cinta, seguí por el pasillo que llevaba a mi departamento y entré, me descargué de las cosas que llevaba y ordené un VHS, lo conecté tras unos problemas que tuve y puse a reproducir la cinta, al principio solo se veía un fondo negro, pasaron unos cuantos segundos antes de que empezara lo que en realidad era el video, en él se veían dos personas juntas que parecían ser novios sentadas a la orilla de un lago, ese lago me parecía conocido, es un lago muy sereno que queda aquí en Japón(estaba de viaje de negocios para aquél entonces, por ello digo “aquí en Japón” y que era un departamento de hotel)  de repente la mujer se levanta y se dirige a la cámara, seguida del hombre, entonces se vuelve a ennegrecer la pantalla, de nuevo aparece otra escena, ahora veo una ciudad moderna típica de Japón, pero, contrario a lo que normalmente es en una ciudad moderna, no había nadie en las calles, estaba nublado y nevando, poco a poco se oscurecía el cielo, entonces como si nada una persona cayo de uno de los pisos altos que no podía ver y se estrelló contra el suelo, entonces una silueta humana femenina salió de la puerta de uno de los edificios, caminó lentamente  hacia el cuerpo de la persona, y cuando se encontró justo en frente de él, se agachó, entonces cogió al cuerpo por el cuello y la parte de la cara de la silueta se extendió hacia el rostro del muerto, entonces el cadáver empezó a ponerse pálido; se volvió a desaparecer la imagen, quedé bastante desconcertado con esa escena, tras unos segundos de espera, volvió la imagen, ahora veía la sección de la cara humana donde están los ojos, la imagen era terrible, su piel era pálida, y tenía los ojos como si llevase mucho tiempo sin dormir y estuviese mirando fijamente un lugar por un tiempo demasiado prolongado, la iris del ojo era roja, tenía las pupilas dilatadas y miraba fijamente con odio a la cámara. Apenas esa parte empezó me espanté tanto que di un salto del susto literalmente, tras unos segundos, la cinta se expulsó sola, la verdad, ese rostro se me hacía conocido, pero con ese aspecto, no tengo idea. Me levanté del sillón en el que estaba y me puse una chaqueta de cuero, fui a buscar a mi amigo, estaba dos cuadras más adelante. Apenas salí del edificio, ví que había una niebla densa y estaba nevando, habían muchas personas caminando allí y acá, como si estuvieran apresurados a encontrar algo, a buscar a alguien; en fin, seguí de camino a la casa de mi amigo.

Cuando llegué, toqué la puerta, tras pasar unos 3 minutos intenté abrirla, estaba abierta, lo que me sorprendió fue el estado de su hogar, estaba hecho un desastre, como si un huracán hubiese atravesado solo ese lugar, llamé a mi amigo, nadie contestó, de repente se sintió un aire frío y salió de un cuarto, me dijo “ya viste a que me refería”, dijo que esa cinta le había dado problemas, y que varias personas conocidas cercanas a él han muerto frente a sus ojos repentinamente, que mejor no me acercara, le pregunté quién le había entregado esa cinta y me respondió que simplemente se reprodujo en su televisor repetidas veces y decidió grabarlo en una cinta para mostrarlo a varias personas y me digan que tenía esa cinta que hacía sentir mal a las personas; cuando terminó esa frase sentí un intenso dolor de cabeza y me senté en un sofá; ahí mismo cerré los ojos, y ví aquélla escena de la mujer mirando fijamente, entonces los abrí rápidamente, las luces estaban apagadas y mi amigo miraba hacia la dirección donde estaba la ventana, se oscureció el cielo, entonces la ventana se rompió como un golpe furioso hacia el lado de adentro, mi amigo se cubrió la cara inmediatamente por los fragmentos, pero yo seguí viendo hacia la ventana, entonces ví a una mujer vestida con un kimono blanco con piel pálida y con cabello extremadamente oscuro, despeinado, le cubría la cara hasta la boca, que era lo único que veía, entonces se quedó como mirando a mi amigo, que empezó a hablar japonés tan rápido que no entendí. La mujer desapareció, y entonces volví a ver esa escena de los ojos, pero ahora era real, ella me miraba con odio directamente, yo me eché hacia atrás, hasta que toqué la pared que estaba tras el sofá, entonces mi amigo gritó “¡Yoru no Hikari!, “resplandor en japonés, entonces cambió la mirada hacia él rápidamente y desaparece, entonces los bombillos apagados revientan, mi amigo cayó con el susto que le dio la mujer.

Después de un momento de silencio y que nosotros aprovechamos para recuperarnos en el que también el cielo volvió a su claridad natural, yo le pregunté a él si tenía idea de qué era eso, me dijo que era una entidad sobrenatural, que seguramente era una “Onryo”, un fantasma vengativo conocido por el folklore japonés. Pero no tenía idea de por qué nos atormenta, por qué quería venganza contra nosotros, qué le habíamos hecho para que buscase venganza contra nosotros.

Intentamos salir de la casa, pero la puerta tenía un montón de candados puestos por todas partes, cadenas evitando que se pueda abrir clavadas a la puerta, entonces, definitivamente estábamos encerrados, observé por el ojo de la puerta y ahora veía que en las calles no había nadie, volteé y ví que mi amigo empezó a sangrar por la boca mientras se dirigía hacia mí, entonces me intentó decir que así era como se habían muerto sus conocidos, que tenga cuidado, porque ahora iba a estar solo, entonces siguió sangrando, ahora de la sección donde estaba el cabello, se desmayó y llenó la alfombra de sangre, de nuevo se oscureció el cielo, yo me dirigí rápido a una de las ventanas grandes de la casa para salir, pero cuando iba a salir me apareció la Onryo justo enfrente gritando tan fuerte que me quedé aturdido, me eché hacia atrás y desapareció, ahora giré la vista hacia mí amigo, estaba levantado por unas cadenas llenas de agujas metálicas que le cubrían todo el cuerpo excepto la cara, ahora estaba despierto, gritando de agonía, entonces la Onryo dirigió su vista hacia mí y las cadenas se movieron hacia los lados para apretujar más a mi amigo, que por alguna razón aún no había muerto, ahora gritaba incluso más fuerte, ahora lloraba de agonía, de dolor, de sufrimiento; entre las cadenas empezaba a salir sangre a montones, la Onryo gritó y acabó con él, las cadenas presionaron tan fuerte que se soltaron y desgarraron, despedazaron a mi amigo, le arrancó la piel y pedazos del cuerpo con la fuerza con la que se soltaron, yo simplemente me quedé paralizado, más de lo que ya estaba cuando ví eso, ese odio que ocultaba por alguna razón contra nosotros; entonces la Onryo se acercó a mi lentamente, yo le pregunté, casi le grité, “¡Qué quieres!” y ella me contestó en japonés “Tus ojos” mientras recogía los de mi amigo del suelo, yo le preguntaba por qué estando terriblemente asustado y ella dijo que “cualquiera que vea mis ojos debe morir, para eso hice esa cinta, todos deben morir”, yo, espantado, traté de salir por la ventana que tenía atrás y pude, entonces la Onryo desapareció dejando un montón de cuervos en su lugar. Yo corrí a un auto que estaba cerca y en él estaba ella, mirándome fijamente como antes, pero desde el auto ahora; desapareció de nuevo y las ventanas del auto reventaron violentamente como antes, un fragmento de ellas me llegó a dar en la pierna, se enterró muy profundamente, traté de moverme rápido por la calle y entonces ahora la Onryo apareció trepando una pared de uno de los edificios, saltó y me embistió, entonces volvió a desaparecer, me di cuenta que cuando me cogió por los brazos al caer, los dejó desgarrados, entonces perdía mucha sangre por ahí, la escena de la cinta se repitió, una persona cayó del último piso de un rascacielos, entonces hizo lo de la cinta, tomó al cadáver y bueno, le robó el alma, o eso pareció, entonces le quitó la piel y los ojos, dejando solo la capa de músculos sobre su cuerpo, otra vez dirigió su vista a mí, empecé a sentir un intenso dolor en la panza, bajé la mirada y una cadena como las de antes me atravesaba el estómago mientras sangraba incluso más, y la Onryo se acercó lentamente a mí arrastrándose, yo ya debería de estar muerto, pero ella, no sé cómo, me mantiene vivo para atormentarme y hacerme sufrir, la cadena cruzó completamente del frente hacia atrás y me dejó, la Onryo entonces me dijo “a ti te dejaré vivir por más tiempo, mientras tanto, seguiré vengándome mientras otros vean mis ojos incluso por algún medio,  espero le digas a tus conocidos que se cuiden de ver ojos, porque entonces yo misma me encargaré de atormentarlos y matarlos, pero será más rápido con ellos, así te atormentaré a ti también; claro, no serán los únicos, haré que todos en el mundo, uno por uno, empezando por las Américas, luego Europa, entonces el África y entonces volveré a mi hogar en Asia, haré que todos sufran, no te sentirás solo en el otro mundo cuando vuelva aquí a matarte como mi última víctima, el mundo ahora será el infierno, y el infierno será la tierra, el cielo solo observará, porque no soy tan fácil de ser afectada. No morirás hasta que sea yo quien te asesine”, entonces se fue, dejando una pluma negra en su lugar, entonces el cielo volvió a su estado normal, las personas volvieron a aparecer y los autos volvieron a rodar, una persona desconocida corrió hacia mí mientras yo, poco a poco me desmayaba. Al día siguiente amanecí en un hospital, y me sedaron, terminé aquí en un lugar que no tengo idea si queda en nuestro mundo, no he visto el exterior desde hace quien sabe cuánto, no tengo hambre, sed,  no necesito ir al baño, solo estoy aquí como internado, solo con un televisor y una PC con internet, no vivo, no muero, no sé si esto es parte del castigo de la Onryo, pero sé que me falta mucho para morir, entre tanto, las demás personas ven el video por sus televisores haciendo que la Onryo los busque y los mate, uno a uno, al final nadie quedará.

Historias, Leyendas de terror y CreepypastasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora