《Diferente》 ◇Yoonmin AU◇¹

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— Gigi hyung~ — Canturrió el menor al tiempo que entraba al auto del mayor.

— ¿Cómo te fue, Mochi? — Preguntó después de dejar un beso en la frente de Jimin.

— Estoy muy cansado, hyung, le aviso que me puedo quedar dormido en cualquier momento. — Informó recargando su cabeza en el asiento.

Entonces tendré que ser rápido.

— Esta bien pequeño, iremos a cenar y después te llevaré a casa, ¿Si? — Jimin dirigió su mirada al mayor.

— No hace falta ir a un restaurante hyung, solo vamos a tu casa. — Le pidió y Yoongi comenzó a entrar en pánico.

— A-Ah... pero Jiminnie, tengo wue-

— Por favor hyung, me siento algo mal y quiero comer para poder dormirme, ¿Si? — Le pidió haciendo los ojitos con los que Yoongi caía siempre.

Y Yoongi quería soltarse a llorar porque esos ojitos siempre funcionaban.

Tendrá que ser otro día...

— De acuerdo, Mochi. Iremos a mi casa y te haré algo de cenar.

Jimin sonrió con cansancio y Yoongi comenzó a conducir en dirección a su casa mientras pensaba en su mala suerte, esa noche debía de ser especial para ambos, pero si Jimin estaba cansado entonces no lo iba a obligar.

Tal vez debió de pensar hacerlo cuando el pequeño descansara, aunque últimamente se mantenía muy activo en todos lados, de un día para otro tenía muchas propuestas de trabajo y también tenía un "Proyecto secreto" del cual no quería hablar con nadie, excepto con SeokJin.

Jin era el único que sabía en qué estaba metido el pequeño Mochi, y aunque Yoongi junto con todos los demás le preguntaran de que se trataba, el mayor no cedió a decir ni una sola palabra sobre eso.

Al estacionar frente a su casa, Min se percató que Jimin se había quedado dormido en algún momento, y no pudo evitar sonreír. Desde la primera vez que salieron se pudo dar cuenta que Jimin en un auto no podía mantenerse despierto, no importaba si era una viaje de cinco minutos, el menor se quedaría dormido al instante en el que el carro arrancara.
Rodeó el auto y abrió la puerta para después cargarlo como a un niño pequeño, de inmediato comenzó a removerse entre sus brazos.

— Gigi. — Murmuró medio dormido en el oído del mayor.

— Eres un flojo, Jiminnie. — Se burló ignorando la corriente que sintió en la espalda ante el susurro.

Como pudo, abrió la puerta de la casa y al prender la luz se dirigió al sofá donde dejó al menor y después de lavar sus manos fue hacia la cocina para hacerle algo de cenar.

Y como Jimin estaba demasiado cansado y sabia que si le cocinaba algo muy elaborado se quejaría de que tardaría mucho en terminar para comer, se limitó a hacerle un yogurt con fresas para que terminara pronto.

— Jimin, vamos a cenar. — Lo despertó, amando en exceso el puchero que hizo.

— Hyung, si me tardo en terminar de comer lo voy a golpear. — Amenzó sentándose en el sofá, Yoongi rió y le extendió el plato.

— No creo que con tus manitos de pollito me puedas lastimar mucho. — Se burló sentándose a su lado y Jimin lo miró indignado.

— Mis manitos de pollito saben hacer muchas cosas bien, entre ellas dar buenos golpes.

— Si, como no. — Jimin solo le sacó la lengua y comenzó a comer mientras veía como Yoongi cambiaba los canales de televisión.

Cuando terminó de cenar se paró para ir a lavar el plato que había usado, al acabar caminó de nuevo hacia la sala, pero se atravesó la tonto mesa de centro que su hyung tenía en medio de la sala y se pegó en su dedito pequeño del pie, haciéndolo caer sobre Yoongi.

— ¡Aish hyung! ¡Le dije que quitara esa tonta mesa de ahí! ¿Presisamente tiene que tenerla en medio? — Se quejó mientras sobaba su dedito.

— Jimin, las mesas de centro son presisamente para tenerlas en el centro, no tengo la culpa de que seas tan despistado. — Respondió en medio del ataque de risa que le dio al ver a Jimin tsn enojado con el mueble.

— Voy a quemar su maldita mesa de centro, entonces. — Amenazó con un puchero y cruzando sus brazitos sobre su pecho.

— ¿Estás bien? — Le preguntó cuando logró calmarse.

— Claro, se preocupa después de que casi muero de dolor. — Jimin se removió y fue cuando se dio cuenta que estaba sobre las piernas de Yoongi, la sangre no tardó en llegar a sus rostro.

— Ya, no seas enojon, Mochi. — Le dijo abrazandolo por la cintura.

— H-Hyung...

— Si si, esta bien, cada vez que vengas quitaré la mesa de ahí para que no te vuelvas a atacar.

— Gi-Gigi. — El mayor levantó la mirada.

Y sus miradas se cruzaron, dándose cuenta que sus rostros estaban muy cerca, tan cerca como hacia tiempo no pasaba.

Un sentimiento muy conocido para los dos recorrió su cuerpo por completo, ese sentimiento que sentían cada vez que estaban los dos juntos, cada vez que se abrazaban, y que se sentía más intenso cuando se besaban.

De un momento a otro Yoongi comenzó a acercarse de poco a poco mientras el cerebro de Jimin trataba de comprender que estaba pasando en ese momento.

— Y-Yoongi. — Habló en un susurro.

— ¿Qué pasa? — Respondió del mismo modo, mientras seguía acercándose.

— ¿Qué haces? — Preguntó cerrando los ojos.

— ¿Tú qué crees? — Contestó antes de cortar la molestia distancia por completo.

Un déjà vu.

Jimin suspiró aliviado en cuanto sintió los labios de Yoongi sobre los suyos, recordando con alegría ese sentimiento de paz que solo los labios de su hyung lograban conseguir.

Se acomodó sobre las piernas de Yoongi dejando cada rodilla en cada lado del mayor, pasando sus manos al rededor del cuello contrario mientras que Yoongi lo tomó por la cintura.

Estaban sumidos en el beso y en el sentimiento de tranquilidad cuando Yoongi se atrevió a morder levemente el labio inferior de Jimin, obteniendo un jadeo apenas audible de parte del menor.
La temperatura comenzó a subir en ese momento, Jimin lamió el labio contrario pidiendo permiso para poder introducir la lengua y Yoongi aceptó.

Yoongi aceptaría todo lo que Jimin quisiera darle.

Jimin ni siquiera se dio cuenta cuando comenzó a moverse sobre Yoongi, de no ser por el gruñido ronco que Min dejó salir y sentir algo entre sus piernas, el pudo haber seguido con los movimientos.

— Ji-Jimin... — Jadeó Yoongi apretando su cintura para tratar de controlarse.

— Yoongi, por favor...

— ¿Qué quieres, Jimin?

— Quiero hacerlo, Yoongi, por favor... — El mencionado abrió sus ojos lentamente para mirar a Jimin.

— ¿Seguro? Jimin, no es-

— Yoongi solo hagámoslo, por favor.

Yoongi aceptaría todo lo que Jimin le pidiese.