Start Over (LRDF 2) ✅

Algo Especial

Buenas buenas, esto lo hice ayer en la madrugada después de que oficialmente cumpliera 16 años, siii ya me estoy poniendo vieja, en fin... Quise hacer algo pequeño, pero transmitir esa emoción y nostalgia que siento cada vez que llega esta fecha, y pues... Nada, que lo disfruten tanto como yo lo hice escribiéndolo, muchas gracias a todas, gracias, gracias, gracias 💖👀. Las amo, Plutón, Sol, Saturno y todos los planetas ya saben... En mi corazón, siempre. Brisa y Pri gracias por sus tonterías, por tus vídeos y por hacerme reír. A mis mejores amigas gracias siempre por estar aquí y por apoyarme cuando lo necesito, besitos a todas, las quiero y por supuesto a ustedes por leerme 🤣❤️. Ya me puse sentimental.

"Algo especial de Mel para ustedes"

—¿Qué haces Charly?—preguntó Yeimy entre risas cuando la llevaba con los ojos vendados después de haber terminado su concierto, por el pasillo del hotel donde se hospedaban en Londres.

—Shh... Quieta—susurró cerca de su oído y ella volvió a reír, ambos estaban ebrios.

—Charly... Déjame ver—pidió, corriendo lejos suyo, quitando la cinta de sus ojos, contemplando el montón de luces que decoraban el camino a la habitación, se volvió para mirarle con una sonrisa, para después seguir el camino en silencio.

Entró en la habitación con la tarjeta, observó el interior de ésta con algo de lágrimas en los ojos, sentía un enorme revoltijo en el pecho, no podía siquiera pronunciar palabra debido a la emoción que la abarcaba, se acercó a la cama que estaba llena de papeles  con varios poemas escritos, de sus libros favoritos, uno de los premios que habían ganado juntos como el mejor dúo músical y el mejor álbum del año.

Una gran foto decoraba el centro de la cama, ambos abrazados, encima del escenario, mirándose uno al otro, mientras alguna canción lenta en inglés sonaba por toda la estancia, Charly se acercó a ella.

—Mi reina... —habló cerca de su hombro, moviéndose lentamente al ritmo de la música.

—¿Si?—respondió con tono risueño, apoyando la cabeza en su hombro.

—Te amo—dijo acariciando su cabello y ella sonrió, feliz.

—Yo también te amo, imbécil—comenzó a reír alejándose un poco para verle el rostro.

—Me muero por hacerte el amor... princesa—confesó, mordiendo su labio inferior, su sonrisa se esfumó poco a poco, a medida que sus labios se iban acercando, ambos cerraron los ojos, sintiendo millones de cosas en su interior, entregando sus almas en un suave y profundo beso.

Yeimy llevó las manos al final de su camiseta, ayudándole a quitársela, Charly hizo lo mismo con ella, poco a poco se fueron deshaciendo de sus ropas, tirándose encima de la cama con la foto e incluso los papeles, los premios lo echaron a un lado, encima de la mesilla de noche, para después seguir con sus secciones de besos.

—Gracias, por estar aquí, conmigo... Ahora—murmuró Charly soplando el aliento contra su boca, atrapando su labio inferior entre los dientes, provocando que Yeimy levantara la cabeza en busca de más, tomando su cara entre sus manos, llevandolo hacia ella.

—Ahora y siempre Charly—volvió a besarle, cambiando de posición, colocándose encima de él, se dejó caer encima de su ereccion moviendo su pelvis contra la de Charly, recordando cada instante, cada hazaña, cada momento de plenitud, su boda, sus reencuentros, sus besos, sus estupideces, sus locuras y todo eso que habían construido juntos.

—¿Siempre?—cuestionó con voz agitada, bañados en sudor, Yeimy contempló su rostro con amor, su cabello cayendo alrededor de sus caras, ambos sonrieron.

—El Rey y la Reina son eternos.... ¿Recuerdas?—se acercó a su boca con una sonrisa y siguieron con sus alocados besos, acompañados de los movimientos de Yeimy acompasados por los de Charly.

—Lo recuerdo, lo recuerdo—besó su cuello, su clavícula y después su hombro, mientras le acariciaba la espalda con devoción—Podría tener millones de cosas, canciones, quizás premios, reconocimientos, pero... Sin ti nada tiene sentido, nada... —decía sin dejar de moverse contra ella y acariciar su piel.

—Shh... No digas nada, solo calla y mírame—pidió ella, él obedeció y así pasaron los minutos, ambos mirándose a los ojos, sin dejar de hacerse el amor, hasta que el placer los consumió a los dos, tensando sus extremidades y sus vientres, dándole la llegada a su intenso orgasmo.

Se recostaron en la cama, en silencio, mirando la luna, que se veía desde la ventana, la cual alumbraba sus cuerpos desnudos, siendo cómplice de su amor, Charly tomó uno de los papeles que llevaban algo que él mismo había escrito y lo leyó en voz alta.

No hay nada comparado con esa persona... ¿Sabes?
Incluso puedes tener el amor de tu familia, de tus amigos, de todos
Pero queda esa rara sensación, de no tenerla, de no poder abrazarla y decirle te amo y que te corresponda de la misma manera.
De querer que te diga que te quiere como se lo dice a otros, que se preocupe por ti como lo hace con ellos, que te acaricie el cabello mientras te consuela como lo hace con alguien más, que te bese sin un mañana, sin importar nada, que te haga el amor sin saber el transcurso del tiempo, que las horas se vayan en sus caricias y los días entre besos, que sus brazos sean la mejor cobija y su pelo lo único que acaricie en toda mi vida.

Habrán muchas cosas pero nada como esas, como las palabras correctas no de la persona equivocada, sino de la persona correcta, de la persona que lo deseas, podrán haber muchas cosas buenas en el mundo, pero la única que hallo perfecta, hermosa y la única que deseo y quiero, es a ti Yeimy Montoya de Cruz... Se hizo realidad mi deseo, era tenerte aquí.

Yeimy lo miró con lágrimas en los ojos, mientras acariciaba su cabello, sus ojos mirándose entre si, por segundos, minutos, tal vez horas, pero no había tiempo, era como estar en el espacio, si ambos estaban juntos el tiempo pasaba a segundo plano, solo eran...

—Tú y yo—susurró ella y el asintió, acariciando su mejilla, para con mucho cuidado prenderse de su boca, besándola con una mezcla de amor, lleno de una profunda hambre de su cuerpo, de ella.

Nada se compara con esa sensación de estar en los brazos correctos, porque cuando estas en ellos, no solo amas a esos brazos, también aprendes amarte a ti mismo/a.

Ayy espero que les haya gustado lo que escribí (sobre todo eso que hice de Charly para Yeimy 🥺)

Que todas las personas que también estén de cumpleaños hoy 14 de octubre, la pasen genial, que tengan un gran día, colmados de bendiciones y de buenas personas y energías, que siempre estén dispuestas a sacarte una gran sonrisa. Y sobre todo, si nadie se acerca a ti para darte las grandes felicitaciones que mereces, no importa, ponte muy sexy (así como leíste SEXY) y situate frente al espejo con tus audífonos, baila y canta hasta que sientas el cuerpo pesado, por ti, por mi y por todos los que nacieron hoy día... ME VOY A BAILAR ❤️. (me pondré lindaaaaa 🤣🤣)