Colección Dramione

-11-

Título: Ataque
Nº de palabras: 1133
Advertencia: POR FAVOR LEER LA NOTA DEL FINAL Y DEJAR COMENTARIO. SERÍA DE GRAN AYUDA PARA MÍ. GRACIAS.

Theodore era, de todos ellos, el que más adelantado iba. Fue el primero en encontrarse con la pacífica imágen de Hermione dormida en el sofá de la sala común de premios anuales con cara de auténtica tranquilidad, y por ende, el que retrocedió e indicó a los demás que no hicieran demasiado ruido. Últimamente habían notado a la joven más cansada de lo habitual, por lo que les parecía una buena idea darle unos instantes más de sueño y no irrumpir en el lugar armando alboroto. Blaise propuso subir al dormitorio de Draco durante un tiempo para no molestar y la verdad, aquello parecía muy buena idea. Acercarse y tomar el libro que había en la mesita del café también sonaba como una buena idea. Él no tenía tantas cosas en común con la joven como Pansy, ni tanta facilidad para hablar como Blaise, pero quería ser capaz de ofrecerle una pequeña ayuda, de la misma forma que había hecho ella con él antes. Que tuviera alguien más allá de Draco para hablar de sus gustos literarios sonaba como una buena distracción y además, el libro parecía interesante. Sí era una buena idea, ¿cierto?

Cuando extendió la mano, Hermione abrió los ojos y sujetó su muñeca, inmovilizándola con su mano izquierda. Se levantó como un resorte, con la varita en la mano como si no la hubiese soltado en ningún momento y se abalanzó sobre él, que cayó de un golpe tosco y sordo al suelo que provocó la mirada preocupada de sus amigos. Ella se sentó en su estómago, apretándole con fuerza la punta de la varita en el cuello. Todo aquello debió durar en conjunto un máximo de diez segundos, pero Theo fue capaz de apreciar cada detalle con una exactitud milimétrica, viendo cómo cada uno de los pelos de la joven se movía contra el aire a cámara lenta hasta que el golpe contra el suelo y un punzante dolor en la espalda lo trajo de vuelta a la realidad.

— ¡¿Dónde está el resto?!- exigió ella en un grito.- ¡Dímelo!

— ¿Pero qué diablos te pasa?- preguntó Blaise en otro grito, acercándose a ella, antes de tener que apartarse de golpe.- ¿Qué mierda?

— ¡Granger! ¿qué diablos te pasa?

— No voy a preguntarlo de nuevo, ¡dime lo que quiero saber!- volvió a pedir antes de apretar aún más su varita.- ¡Ahora! ¡Dímelo! ¡Ya!

— ¡Hermione!

Hermione parpadeó dos veces y Theo lo supo, Draco acababa de salvarle la vida. Lo supo tan pronto como los ojos de Hermione volvieron a enfocarse en él, o mejor dicho, se enfocaron en él por primera vez. La sintió destensarse, perdiendo toda esa fuerza y seguridad que la hacían mantener la espalda recta y la varita firme contra su cuello, que pronto desapareció de ahí. Ella la había arrojado contra la pared contraria con una expresión de terror. Exactamente la misma expresión de terror que había puesto al mirar sus manos y darse cuenta de que podía haber matado a su amigo y ni siquiera hubiera sido consciente de ello. La misma expresión de terror que mantenía cuando se apartó de él de golpe, arrastrándose por el suelo, negándose a creer lo que había estado a punto de pasar.

¿Cuándo las cosas se habían salido tanto de control? ¿Cómo había llegado a esa posición? Sólo sabía que en un momento estaba en el sofá, intentando pensar en cómo le diría a Draco que se iba a Bulgaria en primavera y pedirle que fuera con ella, y al siguiente... Al siguiente había estado a punto de matar a Nott. ¿Qué pensarían de ella sus padres? ¿Sus amigos? ¡Merlín! ¿Qué pensaría de ella Draco? Y Nott...

— Lo siento- logró decir de manera entrecortada. Ni siquiera había notado en qué momento había comenzado a llorar o a hiperventilar. ¿Era Pansy la que estaba delante de ella?- Lo... Lo siento. Perdón. No quer... qiere.. no quería.

¿En qué mierdas estaba pensando? ¿Cómo se había dejado arrastrar a ese punto? ¿Cuándo había llegado a ese punto? Se suponía que era Hermione Jean Granger, heroína de guerra, la bruja más inteligente de su generación, defensora de los inválidos. Y había estado a punto de matar a un hombre, totalmente desarmado. Un hombre que era amigo suyo. Amigo de Draco. Le empezaron picar los pulmones y la nariz y necesitó abrir la boca para poder respirar, pero aquello no funcionó. El aire no llegaba a ella. ¿Así se iba a terminar? ¿Así iba a morir? Después de tantos magos tenebrosos, tantas criaturas oscuras y aventuras peligrosas... ¿Ese iba a ser su final? Después de años de pelear por su derecho a amar a su pareja sin ocultarse... ¿Iba a terminar así? ¿Ahogada en su propia sala común? ¿Víctima de un ataque de ansiedad? Volvió a aspirar, más desesperada que antes, negándose a que aquel fuera el final, pero no funcionó. No llegó el oxígeno a ella, y de hecho, perdió aún más aire al sollozar. Intento patético de bruja. Deshonra de gryffindor. Sangre sucia inmunda. El mundo estaría mejor sin ella. Sus padres estaban mejor sin ella. Sus amigos estaban mejor sin ella. Draco estaría mejor sin ella. Patética. Patética.

— Granger- dijo alguien frente a ella.

— Hermione- volvieron a llamar. En esta ocasión, tomaron su mentón para levantar su cabeza, en un intento desesperado de recuperar su atención. Reconoció la voz, y entre lágrimas, logró reconocer esos ojos grises que siempre se distinguirían de los demás. Pero no logró enfocar.- Tranquilízate, ya pasó, no fue nada, tranquila...- rogaron mientras tomaban su mano. La apoyó sobre lo que adivinó sería su pecho, con un subir y bajar tranquilo y rítmico.- Conmigo, ¿vale? Inspira... Expira...

— No sé cómo lo has hecho pero no pares Draco-pidió Pansy, advirtiendo cómo muy poco a poco, la respiración de ella se regularizaba.- Ya pasó Granger, ya terminó. No pasó nada, Theo está bien. Esto también pasará, ¿recuerdas?

— S...í- contestó ella con dificultad, recibiendo felicitaciones por parte de ellos dos.- The...

— No te preocupes por él ahora, está bien.

— No tienes nada por lo que pedir disculpas, más tarde te explicarás.

— O no lo harás, no importa- corrigió Draco, temeroso de que ella volviera a estallar.- Ahora sólo cálmate y respira conmigo princesa. Lo haces bien Hermione, lo haces muy bien...

— ¿Necesitas algo? Sólo tienes que decirlo Mione... Te puedo llamar así, ¿verdad?

— Sí- dijo con más convicción esa vez.- ¿Té?

— Es una buena idea- concedió Pansy con una sonrisa.- Iré a pedir un poco de té para todos, ¿te parece bien?

— Sí.

— ¿Quieres algo más?- preguntó Draco, comenzando a aflojar su agarre sobre la mano de su pareja, convencido de que se deslizaría por su pecho ahora que ya estaba más tranquila. En lugar de eso, giró para agarrar con fuerza la mano de él.- Está bien, tranquila, aquí estoy.

— Nota —

Esto es totalmente experimental por aquí porque... Bueno, es una parte muy importante de un fanfic que estoy escribiendo (que aún no está publicado) dramione. ¿Os gustaría saber un poco más acerca de él? ¿Leerlo en algún punto? Va para largo, pero se trataría de un longfic (más largo de lo que ha sido "Mi Hijo" y probablemente de lo que sea "Momentos"). Peeeeeero esta es una escena muy importante (y avanzada) que ya he escrito y de la que me gustaría saber vuestras opiniones para saber qué hacer con ello.