"¿Tenemos todo?".
-Grenetina, azucar, café instantáneo, crema batida, leche y un refractario, sip, tenemos todo.
Saiki estaba algo irritado porque su cafetería favorita estaba cerrada por remodelación del lugar, así que Kaido sugirió hacer su postre favorito ya que ambos disfrutaban de hacer recetas de repostería de vez en las cuando.
Kaido llenó media olla de agua y la puso a hervir en la estufa antes de echar el azúcar, Saiki se veía bastante impaciente así que se acercó a el y tomó su mano.
-Si sabes que esto no tomará tanto tiempo, ¿verdad?
"No he comido gelatina de café en tres días, no sé qué esperas de mi".
-Vaya novio me vine a conseguir.
El más bajo se acercó a la olla y agregó la grenetina junto con el café esperando a que se mezclara para después apagar el fuego.
-Saiki, ¿puedes vertirlo en el refractario? -dijo avergonzado por su falta de fuerza en los brazos.
"Claro cariño". Dijo dándole un beso en la frente para después hacer lo que le pidió y meterlo al refrigerador.
Dos horas pasaron y sacaron el contenedor de vidrio para después cortar la gelatina y servirla en dos copas, Kaido puso crema batida en ambas junto con algo de leche y se sentaron a disfrutar del postre.
"Creo que te amo más que a la gelatina de café".
Kaido se sonrojó hasta las orejas y lo golpeó suavemente en el brazo.
-C-cállate y come.
