Drabbles de terror con amor 🖤 halloween especial

Twenty 👻

Mashiho y Doyoung estaban acostumbrados a quedarse hasta tarde en la sala de práctica, ambos amaban bailar así que en lugar de ser una rutina matadora y excesiva para ellos era más bien como una larga y entretenida jornada de prácticas y mini competencias de baile, y como no, algunas sesiones de besos luego de que el manager les notificara que ya todas las cámaras estaban apagadas, pero igual no hicieran ninguna tontería que los delatara fuera de la sala.

El manager sabía sobre su relación desde hace ya bastante tiempo, y aunque siempre les decía que era arriesgado y que debían ser cuidadosos, también los apoyaba y ayudaba a tener tiempo para ellos de vez en cuando, claro, siempre que prometieran no hacer nada tonto.

—Eres un tramposo— Se quejó Doyoung tratando de huir de los brazos de Mashiho, que a pesar de ser un poco más bajo de estatura tenía más fuerza física que él —Sabías el orden de las canciones— Acuso el menor sabiendo perfectamente que habían puesto la lista de reproducción en aleatorio.

—¿Cómo podría saber el orden?— Pregunto divertido Mashiho abrazando un poco más a Doyoung que se retorcía entre sus brazos tratando de escapar.

Eran casi la una de la madrugada y ellos seguían en la sala de práctica.

—Está bien, está bien, creo que deberíamos regresar, ya es tarde— Comento el pelirrojo girándose aún sin ser soltado por Mashiho, pasando sus brazos por sobre los hombros del mayor y juntando sus narices en un pequeño mimo.

—¿Regresamos ya? ¿O aún tengo tiempo para besar a mi lindo novio?— Pregunto el japonés reforzando un poco más su agarre en la cintura de Doyoung.

Ambos completamente en su mundo hasta que las luces se apagaron de manera repentina.

—Okay, tranquilo, seguro fue solo un problema con las bombillas o algo así— Tranquilizó el mayor caminado con Doyoung aferrado a su brazo hasta el interruptor de la luz.

Presionando este y sorprendiéndose cuando las luces se encendieron nuevamente, como si alguien de verdad las hubiese apagado.

—De acuerdo, ya es tarde, hora de regresar a los dormitorios— Decidió Doyoung tomando rápidamente su mochila y celular, robándose el abrigo de Mashiho y caminado rápidamente junto al mayor hasta la entrada del edificio.