Demostrar el odio con insultos, palabras, gritos, golpes, mal de ojo. Todo es una simple tela que oculta el verdadero sentimiento. ¿Puede ser amor o simplemente un capricho por atención?
Ser nueva en Hogwarts no es un trabajo fácil, más cuando eres...
A pocas semanas de que este año acabara, me encontraba en el patio jugando al Ajedrez Mágico con Remus. James y Sirius estaban sentados junto a nosotros, y Peter simplemente desapareció.
—¿A quién miras con exactitud Potter?—digo concentrada en el juego.
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—A Snape. Como una mujer tan bella y cálida como Lily, es amiga de un imbécil y estúpido como Quejicus.—contesta James con un suspiro.—Ojalá pudiera ser Lunático.
Remus y Lily tenían una hermosa amistad.
—Supérala Cornatormenta—agrega Remus mientras mueve una pieza en el juego.
—No me daré por vencido tan fácil.
—Algún día tendrás que hacerlo.—comentó a lo que James pone los ojos en blanco.
—Miren su sonrisa—dice Potter frustrado.
Con los restantes miramos hacia su dirección, ella riéndose y él con una sonrisa. Parece haber sentido nuestras miradas y miro hacia nosotros. Rápidamente Lunático y Canuto voltearon. Snape me miro borrando su sonrisa y volviendo a ver a Lily. Volví mi mirada al juego. Peter llegó con una caja.
—¡Chicos! ¿Qué sucedería si de repente encuentro una caja con insectos?—pregunta Colagusano entusiasmado.
—¿Eso es lo que hay dentro?—pregunta Sirius levantándose e inspeccionando.
—¿Dónde lo has encontrado?—preguntó disgustada.
Tengo terror a los insectos.
—En algún... lugar...—contesta Peter.
—No importa dónde, sino como lo usaremos—dice James contento.
Stark paso por lado nuestro.
—Grindelwald, olvidaste tu libro en pociones—dice alcanzándome el libro.
Sirius lo toma.
—Es muy grato de tu parte traerle el libro hasta aquí Thomas, ella lo tendrá en cuenta.—dice Sirius con una sonrisa.
—Oh Stark, ¿Le tienes miedo a los insectos?—pregunta Peter abriendo la caja.
—¡JAQUE MATE!¡PERDEDORA!—grita Remus felizmente a lo que bufo.
—Te he dejado ganar Lunático, no te creas—digo poniendo los ojos en blanco.
—No les tengo miedo Pettigrew—contesta Thomas.
Jugué una vez más con Lupin, mis ganas de ganar eran mayores que otra cosa. James vio como Evans se iba con Dorcas y Marlene. Aprovecha el momento para molestarlo.
