Demostrar el odio con insultos, palabras, gritos, golpes, mal de ojo. Todo es una simple tela que oculta el verdadero sentimiento. ¿Puede ser amor o simplemente un capricho por atención?
Ser nueva en Hogwarts no es un trabajo fácil, más cuando eres...
Paso un día de mi llegada y las miradas eran penetrantes como balas. Al haber terminado con las clases de hoy, tomo un libro y voy a sentarme en el patio. El césped verde brillaba, y escucho pasos de mi madre.
—T/N ¿Cómo te fue en tu primer día?—pregunta contenta.
—Bien creo, algo abrumador.
—¿Por tus compañeros?—dice a lo que asiento— Simplemente no te conocen tesoro, cuando lo hagan sabrán lo hermosa que eres.
Les dije que emanaba felicidad. Sonrió por lo que dijo.
—Eso espero.
—¿Y que hay de esos chicos del tren?¿Hiciste amigos?—pregunta curiosa
—No se, ellos ya me han dejado en claro que no me dejarán en paz así que...—deje escapar un suspiro—¿A ti como te ha ido hoy?
—Igual que a ti, pero creo que ellos la pasaron peor que yo—dice entre risas.
—¿Fuiste muy seria?
—Si, fue fascinante. Pero es por ahora, solo para que me tomen en serio cuando mando tarea.—explica.
—Me parece perfecto. Espero que no seas tan ruda conmigo, TÚ hija. Mañana tendré contigo.
—No hay excepciones Eloise. Solo pocas, no te daré el pase al cielo así de fácil.
—Lo supuse.
—Te dejo seguir leyendo, tengo que irme. Cualquier cosa me buscas ¿esta bien?—dice dejando un beso en mi frente.
Luego de un rato de haber disfrutado leer, tres chicas se paran frente a mi. Las miro y ellas a mi, en silencio. Yo con cara seria y ellas con una sonriente.
¿Y ahora qué? pensé.
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—Hola, un gusto soy Narcissa Black, estas son mis hermanas. Andrómeda y Bellatrix Black—dice la más rubia extendiendo su mano mientras sus hermanas saludan.
La miro de arriba abajo.
—¿Hola?
—Tú eres T/N Grindelwald ¿no?—dice Andrómeda.
—Claramente.
—Uf, que actitud, me encanta—agrega Bellatrix.—Nada mal para una Ravenclaw. Esperaba amabilidad.
—Bella—dice Andrómeda retándola.
—¿En que escuela de magia estabas antes de venir aquí?—pregunta Narcissa.
—Ilvermony.
—¿Y por que decidiste venir aquí?—pregunta Bellatrix.
—Problemas personales.—digo a los que las hermanas asienten.
