Para no decirte adiós

Capitulo 18: Exterminio

Capítulo extra de regalo de navidad 🎄😂 (voten y comenten por favor. He bajado los números de votos y comentarios así que es mucho más fácil que cumplan con las metas para actualizar el siguiente 🥺😩)

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Lo común se había vuelto ajeno para mí. Estaba comiendo con Esther y algo había cambiado. La veía y no sabía si creer en sus buenas intenciones o dar por hecho que ella al igual que todos solo me tenían lástima.

— Oye, no has tocado la comida.

— No tengo mucha hambre. ¿Que era eso que querías hablar? En un rato tengo que ir a trabajar.

Esther tomó un sorbo de vino y seguido suspiro algo penosa.

— Quería pedirte perdón pues por todo lo que ha pasado, por lo que ocurrió con Fernando y..., si quieres puedo hacer que el se fije en ti.

— No necesito que hagas que nadie se fije en mi Esther. Ya Fernando no me interesa. Puedes estar con él si te place.

— Pero...

— Escucha, ya no quiero seguir hablando del tema. Mejor hablemos de otra cosa.

— Vale. Este fin de semana habrá una fiesta en mi casa. Pensé que querrías ir y despejarte un poco. Además, te traje una de estas. — Sacó de su bolso un bote con éxtasis y dándomelo sonrió. — se que te gustaron cuando la probaste.

Era cierto, me gustó esa droga porque era la única forma de no ser yo. Cuando la consumía, era libre, no había dolor que me impidiera sentir que podía comerme el mundo. El corazón se agitaba, las venas hervían y mi mente solo quería una cosa, vivir.

— ¿De dónde las sacaste?

— Digamos que se me hace fácil conseguirlas.

— ¿Estás vendiéndolas?

Poniendo los ojos en blanco chistó

— Hay buen dinero y necesito pagar la universidad. Necesitas desestresarte un rato y esas pepitas lo van a conseguir.

Las agarré y aunque sabía que estaba entrando en un círculo vicioso, la realidad es que necesitaba salir de la realidad y esa píldora me ayudaría. Esther se despidió dejándomelas como obsequio de cumpleaños y estaba segura que en cualquier momento terminaría con una botella de vodka, la música a todo volumen y el éxtasis corriendo por mis venas. Mi móvil sonó y un mensaje del número anónimo entro.

Anónimo a las 1:00pm

Hola, ¿qué tal tu día?

Aitana a las 1:02pm

Creo que no debemos seguir hablando

Anónimo a las 1:04pm

¿Por qué?

Aitana a las 1:06pm

Porque es ridículo. No se quien es usted y no tiene sentido hablar con alguien que no conozco.

Anónimo a las 1:07pm

ya sé. Me presentaré.

Aitana a las 1:08pm

Necesito un nombre

Anónimo a las 1:09pm

No puedo darte uno pero si puedo describirte quien soy. Pues veamos, no soy muy bueno describiendo. He llegado recientemente a Madrid. Soy de Toscana, actualmente dirijo el área financiera de una empresa importante aquí en Madrid y por eso estoy acá. Estoy divorciado, creo que olvidé cuando fue la última vez que salí con una mujer y sentí esto que siento por ti. Se que suena loco, se que no tiene mucho sentido pero hay cosas en la vida que no lo tienen. Desde que te vi no he podido dejar de pensar en ti.