Dímelo a Besos

Beso 20: Ladynoir

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Beso 20

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Chat Noir estaba muy pero muy entusiasmado preparando lo que parecía ser una sorpresa para su Lady.

En la cima de la torre Eiffel, había colocado una manta, un par de cojines y pétalos de rosa, como sello característico de él. A parte de eso, tenía una canasta de mimbre con cosas que había conseguido en la panadería de sus suegros, sin que la chica tras la máscara de Ladybug lo supiera.

Quería darle una sorpresa por su aniversario, después de todo, y quería algo que le diera la libertad de observar los maravillosos escenarios que París le entregaba y que solo podían disfrutar gracias a sus miraculous.

Sí, sabía que la chica iba a protestar, pero iba a ser una parada mientras patrullaban la ciudad, algo casual que ¡Paff! Apareció ahí y había que aprovechar.

Dejó todo listo y se fue a buscarla, puesto que era la hora que habían acordado reunirse para patrullar, iniciando en la torre Montparnasse y terminaría en la torre Eiffel, si todo salía bien.

...

Ladybug ya lo esperaba, cuando él llegó al punto de encuentro, lo saludó con una sonrisa y empezaron la patrulla, entre charlas banales y chistes malos entre medio. Algo que ya era rutinario en el último tiempo.

Cuando llegaron a la torre Eiffel, y antes de que Ladybug descartara el lugar para seguir a otro, Chat Noir la detuvo impidiendo que se fuera, tomándola de la mano.

—¿Qué sucede? —consultó, al ver que por más que tuviera su atención, el superhéroe no le soltaba la mano.

—Es que hoy... es —dijo bajando la mirada, mientras la soltaba. Ladybug sonrió ante el gesto y tomó su yoyo.

—Sé que hoy es nuestro aniversario, Chaton —respondió, sacando del yoyo, un pequeño paquete que le entregó con una sonrisa—. Realmente, no sabía que regalarte, así que horneé esto yo misma.

Chat, sin perder tiempo, abrió la bolsita para encontrarse unos exquisitos chouquette que tenían un olor tan atrayente que tuvo que cerrar los ojos ante de caer en la tentación. Los guardaría para cuando llegara a su casa, sin duda alguna. ¡Y más si eran hechos por su lady, los iba a disfrutar el triple!

—Gracias, M' lady —dijo, cerrando el paquete y sonriéndole—. Yo también tengo algo para ti.

—¿Para mí? —se sorprendió y el rubio, le quiño el ojo antes de pedirle que lo acompañé.

Llegaron a la cima de la torre, en cuestión de segundos, haciendo que la chica se emocionara por aquello. Aunque en cuanto vio la canasta de mimbre, lo miró con cierta sospecha.

—Creo que ya se por qué mis padres actuaban tan extraños hoy —ante sus palabras, Chat solo se río, dejándose caer de rodillas ante la manta para tomar las cosas que ahí había. Jugo, unas porciones del pastel favorito de Marinette y un par de cosas para picar entremedio, como frutos secos y snacks.

Ambos pasaron el resto de la tarde juntos, y observaron como las estrellas iban apareciendo sobre los cielos parisinos, acostados sobre los cojines, con las cabezas juntas.

Chat Noir dibujaba con el dedo figuras con las estrellas, cuando Ladybug suspiró.

—¿Qué pasa? —preguntó preocupado. Ladybug lo miró y sonrió, haciendo que las preocupaciones del chico desaparecieran, y cambiaran a sorpresa, en cuanto ella se giró, lo tomó del rostro y acomodándose levemente sobre él, lo besó.

Aquel beso, tenía una chispa diferente a los que se habían dado con anterioridad, algo nuevo y emocionante que llevó al chico a poner su mano sobre la espalda de la chica para que no se alejara de él, quería que aquel momento durara eternamente.

El contacto fue tan mágico y placentero que cuando finalmente, la danza de sus labios terminó, se quedaron ahí, con los labios casi pegados, respirando profundamente, sin ser capaces de abrir los ojos.

—Feliz aniversario, gatito —le dijo Ladybug a Chat Noir, cuando finalmente pudo abrir sus ojos y ver los de su enamorado.

—Feliz aniversario, mi Buginette.

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Promtps del día de ayer: Un beso tan apasionado, tan perfecto, que al separarse ninguno de los dos puede abrir los ojos durante unos instantes.

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Al fin les puedo traer el pendiente de ayer, ando muy atrasada, pero es por pura flojera, no voy a mentirles. He tenido tanto trabajo, mi cría ha estado en pruebas, así que estoy muerta de cansada que a la hora de escribir es como... ay no que flojera xD

Además, que siempre quedo como fatigada cuando termino un fic xD Y el Gato de la Guardiana terminó hace poquito, entonces... aun no me repongo de eso xD Peor bue...

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Palabras: 671

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Ahora vamos por el doblete de Adrinette, de hoy y mañana 😉

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Gracias por leer

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Aquatic~

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21 de octubre 2021