Un mes ha pasado desde la noticia sobre Jungkook y en el que Taehyung ha hecho lo posible para mantenerme alejada de los problemas y por problemas me refiero a interponerme en el asunto. Hoseok no ha dado información al respecto y nos dijo que nos mantendría al tanto de eso, además nos dijo también, que a medida de lo posible, actuáramos con normalidad porque si algo le hubiera sucedido, ya lo hubieran sabido y eso de alguna manera me tenía un poco más tranquila.
Bueno, en realidad no, eso no me aseguraba que Jungkook estuviera bien y era por eso que tenía a un muy estresado Taehyung la mayoría de las veces, porque no lo dejaba en paz con las cosas que tenía en mente y sumerle también lo que a él le atormentaba a propósito de todo.
Resumen que podía hacer sobre este mes... No sé qué diablos le habrá sucedido a Ryeho, pero no volví a verlo, no podía decir que poco me importaba porque si me causaba misterio su desaparición de mi radar... O yo del suyo, mejor dicho.
- Considero que deberías ir- Taehyung insistió.
- Y yo considero que deberías callarte- Respondí sin verlo por estar leyendo un artículo del periódico para terminar un proyecto en el comedor- Está bien si los dos van sin mi, así ayudo a tu mamá con las compras.
- Vaya, te volverás una anciana a tus diecinueve años, Sun- Se rio él y yo lo ignoré- Eres una aguafiestas.
- Tú un estúpido- No resistí mucho en devolverle el insulto.
- Y los dos un par de infantiles- Dijo Soori quien estaba junto a su novio en el otro sillón con fastidio- Si Sun no quiere ir no tienes por qué obligarla, Tae.
- Jamás la he obligado, cielo, solo dije lo que yo creía- Se hizo el inocente.
- Si, cómo diez veces...-Murmuré sin que el par de tortolos me escuchara.
Mi amigo fue invitado por su novia a una fiesta de nuestra universidad, la cuál era hoy y desde hace cuatro días él ha estado insoportable por ello. Dice que jamás ha ido a una y ahora que tiene la oportunidad, no iba a desperdiciarla porque iba con Soori y por supuesto, pretendía que fuera también, pero prefería mil veces martillarme un dedo que hacer mal tercio. Además simplemente no quería ir, no me gusta el ambiente que hay a si que para mi era muchísimo mejor quedarme en casa.
Taehyung ya no lo podía catalogar como amigo, era un molestoso hermano mayor que francamente, quería mucho, siempre sentía la protección que me brinda aun sabiendo que puedo defenderme sola, pero aun así siempre podía confiar en él para lo que sea. Aunque a veces se vuelva un estúpido molestoso, sabia que me quería y eso era lo que me importaba, además, sabía que era reciproco.
- Bien, no olvides ponerle llave a la puerta, contestar todas mis llamadas y mensajes y por supuesto avisarme cualquier cosa llegara a suceder- Ven? Como un hermano sobreprotector- Mamá y papá llegaran en un par de horas, me avisas cuando eso suceda también, por favor.
- Si, señor- Dije firme y el rio- Diviértanse mucho y por favor, Soori...- Miré a mi amiga quien ya estaba en la puerta- no lo pierdas de vista y procura que no haga alguna estupidez.
- Oye...
- Claro- Interrumpió a su novio mientras reía.
- Cuídense mucho- Les sonreí pero Tae me abrazo repentinamente.
- Ya sabes, si sales ahora de casa y ves algo raro, no dudes en correr, tu tampoco hagas una estupidez- Si, digamos que mi historial de estupideces cometidas al salir de casa tampoco es el mejor, a si que entiendo por que me lo ha dicho.
- Haré mi mayor esfuerzo- Reí y le golpeé levemente el costado para que Soori no se hiciera ideas equivocadas.
Digamos que debe ser difícil saber que una chica vive en la casa de tu novio y aunque le aclaró tanto Tae como yo que no había nada entre nosotros mas que cariño fraternal y que ella confiara en nosotros siempre era bueno dejarlo en claro de alguna u otra manera, porque además el argumento de que yo también tenia novio pero que estaba en Japón por un intercambio no era muy creíble, aunque en parte, no era una completa mentira.
Después de que ellos se fueron me alisté para salir también, estuve en pijama todo el día y aunque ganas no me faltaban de salir así, preferí vestirme con un pantalón holgado y una sudadera, la verdad es que el tiempo de invierno ameritaba un abrigo, pero francamente, son muy incomodos a si que solo opté por una bufanda para abrigarme. La madre de Taeghyung me había mandado la lista de cosas que tenía que comprar por mensaje de texto a si que tome mi celular, las llaves y salí de casa.
No era tarde, eran aproximadamente las ocho de la noche y aún no oscurecía por completo. Como vivimos en un pueblo alejado de la ciudad nunca es común ver tanto tránsito o caos en las calles a ninguna hora. Mi paso no era muy apresurado, no era lejos donde debía ir a si que me tomé mi tiempo para disfrutar del clima frio y también que mi mente se calmara, como solía hacer cuando estaba sola, traía a mi recuerdos que me hacían suspirar y en muchos de ellos estaba Jungkook. Prefería mucho más que lo que ocupara mi mente fueran momentos bonitos que tuve con él que taladrarme la mente con posibles desenlaces de todo esto.
Tal vez me estoy volviendo loca y ni me he dado cuenta.
Pero si no fuera por esa parte lucida y desarrollada que tenia en mi ser, no me hubiera dado cuenta que alguien me estaba siguiendo y por ello algo en mi se endureció, en realidad no podría explicar con palabras como mi estado se transformó por completo. Aunque en mi mente estaba Taehyung diciendo que corriera, no pude ignorar también que sea quien sea que me estuviera siguiendo me incomodaba y lo peor es que muy en el fondo sabia que nada bueno vendría de esa persona por mas desconocida que fuera.
Con toda la valentía y la adrenalina que estaba teniendo me volteé a ver de quien se trataba. Maldecía la tranquilidad de la que estaba agradecida de tener hace un minuto porque al menos, tendría un poco de ayuda, tal vez aquella persona enmascarada que tenia en frente ni siquiera se hubiera dignado a seguirme, pero ya no podía revertir ese hecho, simplemente tenía que hacerle frente y dejar todo a mano del destino o mejor, determinar yo el destino con lo que haga en este momento.
- Quién eres?- Alcé la voz al notar que él tampoco continuó avanzando corroborando la idea de que estaba siguiéndome- Oye!
Sentí un par de pasos acercarse rápidamente a mi por mi lado izquierdo y supe que era otra persona con la cara descubierta que estaba dispuesta a propinarme un golpe que afortunadamente, esquivé. Luego otro por la derecha y este si me llego en la cara pero tan pronto me recupere del impacto, le devolví el golpe y al otro que quiso hacerlo también.
Bien, lo que ocurrió a continuación me dejó completamente confundida. El hombre enmascarado comenzó a ayudarme con uno de ellos golpeándolo y dejándome a mi cargo el otro sujeto.
Vaya plot twist.
- Qué diablos haces!?- Escuche decir al el otro que no tenia mi atención y tampoco sabia a quien se refería y no obtuvo respuesta de nadie.
Después de algunos golpes tanto mios hacia él como otros que recibí, fui yo quien aun quedo de pie consiente. Unos segundos después, mi acompañante también termino con el otro sujeto y solo se escuchaban nuestras respiraciones.
Cuando me acerqué a él a darle las gracias fue que el enmascarado se acercó a mi con un paño blanco y lo puso en mi boca dejándome sin respirar más que lo que sea que tuviera empapado eso. En medio del forcejeo que formamos por intentar soltarme e intentar ver de quien se trataba, mi vista comenzaba a nublarse de a momentos, mi cabeza dolió y también perdí energías. En un intento de quitar su mano de mi boca logré ver un dibujo en su muñeca y un par de pulseras artesanales, no sabía si era por mi poca lucidez pero solo me concentré en el trenzado que los hilos de sus pulseras tenía y luego de unos segundos caí completamente inconsciente.
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