Capítulo 9

3.8K 344 29
                                    

"Si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma"...

(dicho pupular, atribuído por Francis Bacon)

Llegado el lunes, para reiniciar labores, Enzo por fin logrará ver a su asistente, todo el fin se semana no pudo hablar con ella, y jamás devolvío sus llamadas, su lobo estaba furioso y desesperado por abrazarla y oler su delicioso aroma, aunque era tenue, pero le encanta.
Las palabras del brujo quedaron rondando en su cabeza, ella no tenía esencia de ser una mujer lobo, aunque fisicamente se podía decir que sí, las mujeres lobo de hecho son hermosas, pero la bellaza de antonella era aún mayor a la de una humana y a la de una mujer lobo, sus facciones, su porte elegante, su anotomía era simplemente perfecta, todo el que la viera, se quedaba encantado con su belleza, pareciera que los hechizara con tan sólo mirar a cualquier especie, la zozobra de Enzo lo tuvieron dos días ejercitándose para calmar los deseos de poseer a antonella, de solo pensar en los besos que se dieron y los cálidos abrazos, hacían que el lobo ardiera de deseo, y sin poder soportar más, llama a una de sus muchas amantes de una noche para saciar ese deseo por antonella, su lobo aullaba de dolor, no estaba de acuerdo con Enzo en que él se acostara con otra que no fuera su luna, --si aún no la marcamos podemos disfrutar pensaba el alpha en desacuerdo con su lobo.
Ésa mañana de inicio de labores, Enzo se viste elegante y muy seductor como siempre, con un traje a la medida, azúl oscuro y sin corbata que le resaltaban más su varonil rostro, junto con uns zapatos negros, sale felíz al edificio con la esperanza de abrazar y besar nuevamente a su luna.

En cuanto llegó a su piso, diviso desde su distancia la espectacular mujer que tiene por asistente y mate, iba tan sensual, su gatita el día de hoy iba con un vestido rojo muy ajustado hasta la rodilla, un escote sensual que resaltaba los voluptuosos pechos y su firme y redondo trasero, su maquillaje era casi invisible una bellaza natural con sus rojos labios pintados, su hermoso cabello largo y recogido en una coleta alta, hacían que marcara aún más su delicado y perfecto rostro, sus ojos eran impresionantes en cuanto ella lo vío le regaló una hermosa sonrisa, sin esperar más Enzo se lanzó a sus brazos, aspirando su delicado aroma, tenue pero lo persibe, !MÍA!! reclama el alpha y su lobo, !NUESTRA!!! proclaman.

Antonella sintiendose felíz le corresponde el abrazo, hasta que persibe el olor de otra mujer lobo, rápidamente lo empuja con fuerza sintiendo en su interior la ira más profunda, cargada de celos, lo mira con odio sin esperar respuesta de Enzo, sale de ahí velozmente, su loba quiere despertar y corre al baño a tomar su pastilla, no podía creerlo, le fue infiel, la proclamó como suya y aunque aún no la había marcado eran mates, se debían respeto, mirándose en el espejo sus ojos estaban cambiando a un púrpura intenso, frotó varias veces su pulsera para calmar a su loba y dejarla dormida, respiro para tranquilizarse y pensar que hacer, él no puede descubrirla, no aún, pensó antonella, debía salir y confrontrarlo? nooo, claro que no, que le digo, oye hueles a zorra barata!!, te revuelcas con otras y dices que soy tuya?, --desgraciado, pensaba llena de celos y decepción.
Ya más calmada, decide ir por el café de su jefe, y dejarle claro que no acepta un maldito infiel, agggg!!! imbécil, se repetía con corage.

--Señor, buenos días, lo saluda cortante y fria, aquí tiene su café, le dijo despúes de haber tocado e ingrasado a la oficina de su jefe.
--que te pasa antonella, porqué reaccionaste así cuando te abrecé? le cuestiona molesto por el rechazo de su luna, pensando que ella pudo descubrir que estuvo con otra, pero, si no es una mujer lobo no creo verdad?, IDIOTA!!! ES TÚ CULPA,!! le recrima el lobo, aggg!! cállate !! no ayudes tanto, le dice con ironía a su lobo.

Antonella no sabe que decirle, así que lanza las primeras palabras que vienen a su mente.
-- No creo que esté bien que me abrace en la oficina, pueden vernos y empezar a hablar mal de mí, porque he escuchado que con todas sus asistentes se acuesta, lo dijo muy bajito, y sabiendo que es mentira, nadie ha dicho eso, -- y además, dudo mucho que éste fin de semana no haya estado revolcandose con otras y viene acá hoy a proclamarme como suya o yo que sé, y no somos nada, así que señor Russo por favor abstengase de dar muestras de "afecto" lo dijo haciendo comillas con sus dedos, en público.
Enzo la mira con los ojos rojos de alpha, le habla con la misma voz de ogro, -- NO!! ERES MÍA!! PUEDO TOCARTE LO QUE QUIERA!! ruge furioso el lobo de Enzo, quien había tomado el control del cuerpo, antonella lo vío maravillada con sus facciones de hombre lobo, --eres asombroso, le dijo tocando su rostro, el lobo la miraba con adoración, --PERDONANOS MI LUNA, NO PUDIMOS EVITARLO, TU AUSENCIA Y EL DESEO POR TÍ NOS VENCIO Y TE FALLAMOS, NO NOS DEJES!! hablaba melancólico el lobo, suplicando a antonella, --¿ eres su lobo?? preguntó encantada con él, -- SI MI GATITA!! SOY TUYO TAMBIEN, le decia cariñosamente y felíz de la cercanía de su luna y de su aroma, ---ohh!! no te pongas triste, sé que él estúpido de Enzo no me quiere, le decía con tristeza, ella sentía que su lobo la quería pero Enzo lo dudaba y no la aceptaba del todo, antonella se acerca y lo abarza y le da un tierno beso al lobo quien con sus garras la toca y la abraza absorbiendo su aroma y lamiendo su cuello, impregnándose de ella, con deseos y lleno de lujúria quiendo marcarla, --no lobito, se lo que quieres hacer, aún no, me puedes dar tiempo?, le decia sonriendo al bello lobo de Enzo, sin soltarlo del fuerte y posesivo abrazo, cuando Enzo vuelve a su cuerpo, muy molesto con su lobo, se dá cuenta que antonella está abrazada a él, y eso aunque no lo recozca lo emociona a tal punto que la abraza a un más a él, ella el darse cuenta lo aleja, --Ahh! ya eres tú, lo dice como si no fueran uno solo, lobo y humano, sabiendo que éso lo molestaría.

-- bueno señor Russo, vuelve a dirigirse a él de manera fría, le informaré de su itinerario para hoy, y así lo hizo, Enzo respiraba rápidamente viendo como su asistente era distante con él, pero al parecer con su lobo no, --antonella!!, la llamó fuertemente, --sabes que somos uno solo verdad?, ella se hace la desentendida, --de que habla señor? Enzo se le acerca, la mira muy enardecido de celos, -- no puedo creer que estoy celoso de mi lobo el cual somos el mismo, se reprendía internamente el alpha, -- porqué estás molesta conmigo?, la semana pasada estabamos bien, que cambió? -- nada ha cambiado respecto nuestro trato de jefe-asistente, no sé de que habla? le hablaba de usted, y de manera distante, --no somos nada, y por lo visto usted tambien lo sabe, o me equivoco?? lo retaba con la mirada, ya que él debío entender el doble sentido de la respuesta de antonella, --usted con sus zorras, perdón, con sus mujeres, yo con lo mío, se lo dijo en tono pícaro dándole a entender que ella tambíen tenía "amiguitos", así que señor si no necesita nada más, me retiro, lo miró mal ya salío de la oficina a continuar con su trabajo sin darle tiempo a recriminar algo.

El alpha no podía creer lo que escuchó, --ella me pudo oler? sabe que estuve con otra?? se cuestiona impesionado, --LO SABE IDIOTA!!, NO SÉ COMO PERO LO SABE, POR TU CULPA NO NOS DARÁ RICOS BESOS Y ABRAZOS!! con rabia le replicaba el lobo.
--Éso es imposible!!, traeré al brujo acá no puedo esperar más, por lo visto será dificil convencerla despúes de esto, --agggg!!! porqué fuí tan débil?
...si Mahoma no va a la montaña...

El resto del día estuvo muy ocupada con trabajo acumulado de la anteriror asistente, enviando correos, revisando correspondencía, oraganizando archivos y demás asuntos de la empresa.
Enzo por su parte estaba desesperado, ella no podía haberse dado cuenta, era imposible para una humana, tenía que remediar las cosas con ella, despúes de todo creo que es mi mate y me encanta esa mujer, es mía y la quiero sólo para mí.

faltando poco para terminar la jornada de trabajo, Enzo debía asistir a una cena de negocios con unos clientes que erán humanos, así que decidío llamar a su asistente para informarle que debía acompañarlo, ya eso era tambien era parte del trabajo y estaba estipulado en el contrato laboral, antonella molesta decide aceptar.
Antes de la salida, va al baño a frotar su pulsera para relajarse, cómo aún está dolida por la infidelidad de su alpha, decide maquillarse muy bien, resaltando sus exóticos y hermosos ojos, su labial lo retoca, se suelta el cabello, tratando de acomodarlo mejor, se aplica un poco de perfume, y sale lista para la cena, iba a demostrarle a Enzo que su desliz le iba a costar caro.

En cuanto la vío, abrio sus ojos viendo que se había arreglado aún más, --waoo!, deliciosa, pensó el lujurioso, fruncío el seño porqué se imagina que es para que otros hombres la vean, y ella es suya, rapidamente la aborda con preguntas locas, -- porqué te maquillaste más? y te pusiste perfume?? la miró muy molesto, -- señor, vamos a una cena con clientes importantes debo dar una buena imagen, soy su asistente y cara tambien de la empresa, no cree?? lo dijo en tono irónico y burlon.

Enzo respiró agitadamente, mirándo lo hermosa que se veía, su olor lo embriagaba, y saber que la iban a ver otros hombres lo molestaba mucho, pero como él es un hombre lobo, un imponente alpha nadie se atrevería a mirarla y él se iba a encargar de marcar territorio, no iba a permitir que su gatita estuviera viendo otros hombres, así que llamó a los ejecutivos de la reunión y la pospuso para un desayuno al día siguiente, y no lo iba a comentar a su luna para aprovechar la salida e invitarla a cenar y tal vez a su apartamento, pensó emocionado el aplha, con el maravilloso plan que acababa de idear.
--Serás mía gatita!! ésta noche serás sólo MÍA!!!...

Eras tú, No me dejes... (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora